El Casademont Zaragoza sigue engrasándose y creciendo a base de victorias. Esta vez no encontró rival ante un Leganés que solo les plantó cara en un primer cuarto en el que salieron en tromba. En cuanto las de Cantero rompieron a jugar ya no existió emoción en un marcador que se fue agrandando al son del juego de una Bankolé espectacular. Carla Leite sigue sumando sensaciones, Hempe hizo 16 créditos de valoración y Helena Pueyo y Mawuli mostraron una calidad diferencial ante un recién descendido. El resultado, 47-68, lo dice todo…
Y eso que el partido comenzó con un 5-0 para el Leganés, que empezó corriendo mucho y entonado en un inicio fulgurante en el que anotó 13 puntos antes de sufrir un parcial de 5 minutos sin anotar. Poco a poco, fallón al principio, se fue entonando Casademont: Merrit logró la primera canasta y a partir de ahí fue creciendo gozando de buenos minutos de Carla Leite, que aportó con un gran triple que ayudó a que espabilaran sus compañeras. Tras llegar a ir perdiendo por 6 puntos mediado el cuarto, Helena Pueyo empató y Merrit culminó la remontada a poco más de un minuto para el final. La falta de acierto pese a las buenas opciones de Casademont bajo el aro fue la tónica de un primer cuarto de marcador ajustado en el que a las rojillas les dio tiempo a agarrar una ventaja que ya no soltarían (13-15).
En el segundo cuarto ampliaron la victoria con muy buenos minutos de Mawuli y una imperial Bankolé mientras el Leganés, en el que la zaragozana Irene Lahuerta era la más destacada, se iba apagando. Tirando de calidad y físico, el equipo zaragozano fue distanciándose de las madrileñas a la par que Gueye, Bankole (9 puntos y 14 de valoración en sus primeros 6 minutos) o una Helena Pueyo de dulce mejoraban sus números. Así, se llegó 21-39 descanso y la sensación de ser muy superiores. En el tercer cuarto las de Cantero levantaron un poco el pie del acelerador y eso les dio para hacer un parcial de 11-17 tras otro buen cuarto. En los últimos 10 minutos Bankolé siguió a lo suyo, sumando sin parar, sin que ninguna rival acertara a pararla. Por lo demás, el equipo perdió intensidad: el Leganés llegó a hacer un parcial de 9-0, maquillando un resultado que ya era inmenso. En los últimos minutos, las canastas de Hempe, Oma y Mariona acabaron de cerrar un 47-68 que aún pudo haber sido más grande.
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