Un trayecto cotidiano puede convertirse en una gran aventura. Esta es la idea que dio origen a Carlos y sus dinosaurios, un libro escrito e ilustrado por Juan Sebastián León, diseñador gráfico venezolano que, tras vivir mil y una aventuras en países como India o Taiwán durante los últimos 13 años, ha terminado asentándose en Petrés, un lugar «maravilloso» donde ha decidido criar a sus dos hijos —los verdaderos culpables de la existencia de esta historia.

En uno de esos recorridos diarios hacia el colegio, Carlos, personaje principal del libro, convierte lo habitual en extraordinario: mientras mira por la ventana del coche de su padre, imagina un Anquilosaurio conduciendo un camión de carga, un Alosaurio organizando el tráfico con su uniforme azul, y un Espinosaurio llenando las calles de música con jazz. Para él, los dinosaurios no están extintos, sino que cobran vida en la magia de su imaginación.

Y es que este relato nace como tantos otros, buscando un entretenimiento para los más pequeños de la casa. «Sabiendo que tienen una obsesión por los dinosaurios intenté crear un cuento que les apasionara. La idea era llamar su atención con la historia y terminar de engancharlos con el dibujo. Para ello, primero desarrollé varias pequeñas propuestas centradas en la lectura, hasta que hubo una que con la que vi que sus ojos brillaban. A partir de ahí centré mis esfuerzos en lo que siempre me ha apasionado, la ilustración y el dibujo», explica León sobre los inicios de esta historia.

Portada de "Carlos y sus dinosaurios".

Portada de «Carlos y sus dinosaurios». / LEVANTE-EMV

Creatividad al poder

Pero este no es otro cuento más, este tiene algo especial. Tal y como cuenta el autor, la creatividad —a través de la música, el dibujo, el tatuaje o el circo— «ha sido lo mejor que me ha pasado en la vida», permitiéndole comprenderla como una especie de juego repleto de retos que afrontar desde una gran variedad y diversidad de prismas. Por eso, a través de esta obra, quiso dar rienda suelta a la imaginación de sus hijos.

Además de intentar que los pequeños lectores sigan el ejemplo de Carlos e introduzcan esa fantasía en sus rutinas, el escritor ha introducido a lo largo de la obra plantillas, espacios para pintar, juegos interactivos y mapas en los que te enseñan a desarrollar técnicas como el dibujo y el recorte además de estimular la mente de aquellos que las lleven a cabo.

Una distribución única

El, de profesión, diseñador gráfico reconoce que las dificultades llegaron en el momento de convertir la historia en un libro en formato físico que poder distribuir entre aquellos que quisieran adquirirlo. En este sentido, relata que ha sido él mismo el encargado de gestionar elementos clave como la ilustración, el cumplimiento de los parámetros básicos para su venta en Amazon y, en muchos casos, también el propio envío. «Fue algo completamente nuevo, pese a haber trabajado con anterioridad junto a una imprenta todo este tipo de trámites fueron un dolor de cabeza, lo que me obligó a tener que llevar cabo una revisión constante tanto para delante como para atrás», afirma León.

Sin embargo, asegura que «tras mucha paciencia y una larga espera pensando que la primera copia sería un desastre, finalmente todo fue perfecto». Y es que para él, al contrario que para muchas de las editoriales y profesionales del sector con los que ha contactado de cara a futuros proyectos, esto no es un negocio. Esta forma de concebir la escritura es algo que demuestra día a día pasando un rato con las dedicatorias —personalizadas para cada comprador ilusionado— y también con el proceso de un empaquetado limpio, manual y en el que incluye marcapáginas creados a través de su inspiración y sus talentosas manos. Por ello recomienda adquirir el libro a través de sus propias redes sociales —en lugar de a través de Amazon—, pues tiene la capacidad completa sobre los procesos de empaquetado y envío.

Según explica, este proceso es muy valioso por dos razones: se ha convertido en un ritual en el que pasa tiempo junto a sus hijos y disfruta con ellos y ese mismo mimo por el detalle hace que los compradores hablen de él a sus amigos y familiares.

Mucho por llegar

Pero la cosa no acaba aquí, aún quedan cosas por llegar. El autor ya ha anunciado dos novedades que están por llegar. La primera de ellas es que Sebastián prepara una propuesta diferente: un viaje sonoro-cuentacuentos, donde la narración del libro se entrelaza con música en vivo, invitando a que los niños vivan la historia con todos los sentidos. Por otro lado, ya ha escogido la temática de su segunda novela.

Tal y como ha comentado a Levante EMV, la siguiente obra que ya está en camino está relacionado con su pasado como trotamundos y desde una perspectiva más personales la historia girará sobre sus aventuras y viajes como mochilero.

Suscríbete para seguir leyendo