Jon Rahm y Sergio García caminaban en tierra de nadie durante la última jornada del British Open y cerraron su participación con sendas vueltas bajo par, el vasco tirando 69 golpes y el castellonense 68. Lo curioso es que este último partió la barilla de su driver en un arrebato en el tee del hoyo 2, por lo que jugó prácticamente toda la vuelta sin un palo importante, aunque no esencial en Royal Portrush, como pudo demostrar. “Lo he hecho 50 veces y nunca he roto un palo. La varilla simplemente se partió por la mitad, y me sorprendió. No intentaba romperla, y de hecho me sorprendió, porque cuando se rompe es por el cuello y no por mitad de la barilla”, comentó García al terminar su ronda.
Lo he hecho 50 veces y nunca he roto un palo
Sergio García
Sergio acabó firmando su primer birdie del día en este hoyo 2 y terminaría haciendo cuatro más a lo largo del recorrido sin su driver. “No sé, quizá me habría ido peor [con 14 palos]. Nunca se sabe”, comentaba el ganador del Masters 2017 sobre el hecho de jugar con sólo 13 palos desde tan pronto. Se las ingenió, porque en los hoyos 7 y 12, también pares 5, sacó el birdie. Los bogeys fueron en los pares 4 de los hoyos 4 y 10 y quizá sólo en el primero de estos echó en falta más palo desde el tee. Aunque ya sin presión, el juego de García fue exquisito, buen síntoma cuando aún se juega un puesto como elección del capitán en la próxima Ryder Cup.
Sergio y la Ryder Cup
“Aún faltan un par de meses. Ojalá pudiera tener una bola de cristal y ver el futuro, pero por desgracia no puedo”, decía al respecto de si estará en Bethpage. En este sentido, reiteraba que no quiere perderse la cita de Nueva York: “Significaría muchísimo para mí estar allí. Obviamente, si puedo ayudar al equipo, ese es mi principal objetivo, siempre lo he dicho. Creo que puedo aportar cosas al equipo que probablemente sean necesarias. Obviamente [Luke Donald], al final, tomará la mejor decisión para él y su equipo”. De hecho, el español cree que podría ser muy útil para el combinado europeo en territorio hostil: “Esos jugadores experimentados tienen un gran trabajo que hacer para asegurarse de que los novatos sepan en qué se están metiendo”.
Jon Rahm por su parte tuvo que remar para sobreponerse a los bogeys del 7, el 9 y el 10. En los primeros nueve hoyos sólo hizo un birdie. En esta última vuelta el ‘León de Barrika’ falló más calles y greenes de la cuenta, y cuando tuvo la oportunidad sólo atinó con los putts del 15 y el 18. Remontó para cerrar su participación con una tarjeta de 69 gracias a los tres birdies de los segundos nueve hoyos, pero no fue un día de juego ordenado. El 69 fue, de hecho, fue más que bueno. Eso sí, puede que no entre entre los 30 primeros del torneo, lo cual le debe saber a muy poco. En el Masters fue 14º, en el PGA 8º (y peleando por el triunfo) y en el US Open 7º.
No estaba previsto que fuera así esta semana. Sigo bastante contento con mi rendimiento. El swing se siente mejor, independientemente del resultado
Jon Rahm
El vizcaíno mostró su pesar por no estar con los mejores el domingo: “Desmoralizado no es la palabra, quizá desanimado. Quieres estar ahí, quieres competir en los Major. Me fue mejor a principios de año en los grandes, sobre todo en el PGA, pero no estaba previsto que fuera así esta semana. Sigo bastante contento con mi rendimiento. El swing se siente mejor, independientemente del resultado. Así que sigo trabajando en ello”, comentó.
Scheffler está haciendo lo que todos quieren hacer. Lo que me sigo recordando es que él fue capaz de cambiar las cosas drásticamente […] Soy optimista de que puedo llegar a ese nivel
Jon Rahm
También preguntaron a Jon sobre cómo de lejos se siente de Scheffler. El español reconoció el mérito del estadounidense: “Muy pocos jugadores han podido hacer lo que él ha hecho. Ha ganado tres Majors en tres años [y va a por el cuarto]. Ganó nueve veces la temporada pasada y sigue así. Está haciendo lo que todos quieren hacer. Lo que me sigo recordando es que él fue capaz de cambiar las cosas drásticamente. De no poder cerrar algunas de las oportunidades [de victoria] que tuvo de lograrlo con frecuencia. Si él pudo hacerlo, todos podemos. Definitivamente he jugado a un nivel muy alto, y he tenido mis batallas contra él cara a cara, y siempre ha sido muy divertido. Soy optimista de que puedo llegar a ese nivel también. Obviamente no es fácil, pero soy optimista de que se puede lograr”.