Sergio Lamúa, el técnico que subió al Club Baloncesto Zaragoza a Segunda FEB, entrena esta temporada 2025-2026 al Club Bàsquet Benicarló. Un cambio importante tanto a nivel profesional como personal que él mismo reconoce que no fue fácil, pero que afronta con ilusión y ganas: «Lo que más echas de menos es que estás muy lejos de casa y hay muchos momentos en los que estás solo, pero esto es nuestra profesión y tenemos que adaptarnos a ello«.

Lamúa se muestra satisfecho con su nueva etapa en Benicarló. «Es un sitio muy cómodo, tanto para vivir como para entrenar. Todo el mundo está pendiente de que todo esté en las mejores condiciones para poder entrenar y eso facilita el trabajo«, admite. Sobre el grupo de jugadores que tiene a su disposición, destaca el buen ambiente y el compromiso: «Creo que hemos acertado, sobre todo en lo personal. Es un grupo trabajador».

Para el técnico, hablar del CBZ es muy emotivo. El ascenso a Segunda FEB no fue solo un éxito deportivo, sino una experiencia muy personal a nivel sentimental. «Fue una sensación muy bonita porque conseguimos algo por lo que peleamos todo el año y que se puso muy complicado. Lo más especial fue hacerlo en un club donde el presidente José Luis Rubio, el vicepresidente, José Luis Rubio Jr., y el coordinador, Toño Martín, son amigos míos de toda la vida», y añade: «Conseguir un ascenso con gente que es tu familia elegida, como se suele decir, y hacerlo en Zaragoza fue muy bonito. Es lo que se merece el club y la ciudad«.

Tras el ascenso, todo parecía indicar que Lamúa seguiría una temporada más con el CBZ. Sin embargo, la incertidumbre sobre la posibilidad de que el proyecto se pudiera llevar a cabo o no cambió los planes: «Había interés por ambas partes en continuar. Pero cuando me llamó Benicarló, hablé con el club y ellos no sabían si el equipo podría salir a competir. Yo tenía que decidir entre esperar y quizá quedarme sin nada o aceptar lo que tenía encima de la mesa«.

Primó la seguridad en el ámbito profesional y el técnico se fue al equipo valenciano. «Fue una decisión muy complicada. No solo por lo deportivo, sino por lo personal. Dejé a mi familia, a toda mi gente y me vine solo», cuenta. El Club Bàsquet Benicarló ha empezado la Liga Regular con buen pie, en las dos primeras jornadas ha ganado ambos partidos frente al CB Salou y Bisbal Bàsquet. «Tenemos una plantilla larga, de 11 jugadores, todos con capacidad de ser importantes. Eso nos permite ser agresivos en defensa y mantener un ritmo alto de partido», reconoce el técnico orgulloso.

Cabe destacar que el CBZ y el Benicarló comparten el mismo grupo en la Liga Regular Este. Para Lamúa, enfrentarse a su antiguo equipo tendrá un claro componente emocional, pero también deportivo: «Lo veo como un rival muy complicado, han armado un bloque con jugadores que conocen bien la categoría y lo han combinado con gente de casa, que aporta ese plus de pertenencia que el club siempre ha querido tener. Además de tener un entrenador que lleva muchísimos partidos en la Liga y conoce la categoría». El entrenador del Bernicarló comenta también la actuación del CBZ en sus primeros enfrentamientos ligueros: «Ellos hicieron un muy buen partido en Llíria, donde al final en una serie de errores que se cometen durante el partido hizo que perdieran cuando lo tenía prácticamente encarrilado, pero en cambio la semana pasada fueron capaces de ganar con solvencia demostrando el equipo que va a ser«.

El técnico zaragozano no esconde la admiración por su exequipo. «Para mí, es un equipo muy fuerte y creo que puede estar arriba. El presidente dijo que era el mejor equipo de la categoría y estoy de acuerdo con su forma de pensar ambiciosa. Le deseo la mayor de las suertes porque es mi antiguo equipo, considero que ha sido mi casa y espero que pueda volverlo a ser«, concluye Sergio Lamúa.