Está claro que la competencia está en su punto más alto. El protagonismo que ha ganado la UFC a nivel mundial y el que ha perdido el boxeo por su falta de competitividad y espectacularidad generó una paridad pocas veces vista entre un deporte y el otro. De cara al cierre de un nuevo año, parece claro que la pelea tiene un justo ganador e incluso, por un importante margen.
UFC está siendo muy superior al boxeo
El boxeo es defendido por aquellos que lo integran desde hace años, pero es innegable que las artes marciales mixtas tomaron un rol protagónico que no muchos creían que podían llegar a alcanzar. El punto clave está en el tipo de show que generan, porque para el espectador casual es mucho más entretenido y estimulante ver como dos luchadores arriesgan su vida al límite dentro de una jaula, mientras que en el boxeo suelen darse peleas más bien aburridas en el último tiempo.
Esto, sumado a la organización de cada evento y la cantidad de estrellas que tiene un deporte y el otro, hace que el aficionado se va más atrapado por lo que pasa dentro del octágono, a diferencia de lo que ocurre sobre el cuadrilátero.
Para ponerlo en comparación, UFC espera cerrar el año a lo grande, con sus estrellas más importantes en escena, a diferencia del pugilismo, que solamente tiene una cartelera grande prevista, mientras que luego se aferrará a las exhibiciones para intentar captar atención. A nivel global, será más atractivo el Gervonta Davis vs. Jake Paul que la cartelera que tendrá en acción a Artur Beterbiev, David Benavidez y Jesse Rodríguez, entre otros, en noviembre.
Gervonta Davis y Jake Paul serán los grandes animadores del duelo más importante del boxeo en lo que queda de 2025. (GETTY IMAGES)
El boxeo ha quedado en deuda a lo largo del año. No ha podido darle al público lo que se espera más que algunas peleas de primer nivel como la que protagonizó Canelo Álvarez con Terence Crawford en septiembre o la revancha entre Dmitry Bivol y Beterbiev en febrero, pero UFC siempre estuvo un paso adelante y con sus veladas se encargó de colocar un enfrentamiento espectacular cada fin de semana.
Las artes marciales mixtas intentas que todas sus jornadas tengan sentido y que sirvan para definir cosas para el futuro, pero el boxeo suele relajarse y descansar en presentaciones escasas que “salvan” el año. Con eso no alcanza y el público lo nota, lo ve y por eso elige cada vez más ver a la UFC. Claro, el pugilismo tiene una tradición que luce inquebrantable, pero eso no significa que esté permitido vivir de lo ganado, casi como si el trabajo ya estuviese hecho. El secreto es seguir vigente día a día.