Khamzat Chimaev tardó en llegar a la cima del peso medio pero, una vez figura como monarca a pleno derecho, quiere expandir su reinado. Con un imperialismo imparable, después de superar sus graves problemas de salud (que en parte frenaron su ascenso), el checheno apunta ahora a la división de las 205 libras para tratar de ser doble campeón de la UFC. Un logro que poseen diez competidores en la historia de la empresa, como Ilia Topuria o el propio Alex Pereira, nuevo poseedor del oro de los semicompletos tras fulminar a Ankalaev.
«Si me preguntas, claro que me encantaría pelear por el segundo cinturón. No es ningún secreto que el que ahora ostenta el cinturón de las 205 libras (Alex Pereira) es un rival muy bueno para mí, salvo si me pongo imprudente al enfrentarlo», manifestó Borz, en una entrevista concedida para Badaev Podcast.
Borz aprovechó su intervención para comparar las posibilidades sobre el octágono entre el checheno y Pereira, donde piensa que tiene ventaja respecto al ex campeón de peso medio: «Dicen que tiene mucha potencia, pero nunca me ha superado en ese aspecto. Él también peleaba en 185 libras y luego subió a 205. Así que me gustaría pelear en peso semipesado«, añadió.
Los intereses de Khamzat Chimaev y de Alex Pereira distan entre sí. Mientras Poatan piensa en una súper pelea ante Jon Jones en el peso pesado, a la vez que presta atención a sus contendientes en la 205 libras, el checheno debe ahora formalizar una primera defensa vital para consolidar su reinado. En la conversación dentro de las 185 libras, figuran competidores como Nassourdine Imavov, Anthony Hernández o Reinier de Ridder, que pelea este fin de semana en Vancouver.
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«Pero me da igual que me den a Nassourdine, a De Ridder o a Hernández. Solo páguenme un buen dinero… Siempre he sido así. Si te consideras el mejor, no debería importarte con quién tengas que pelear«, zanjó el campeón checheno, respecto a su próximo reto dentro del Ultimate Fighting Championship.