«Cómo estamos en este punto con todo lo que hemos invertido en los últimos años y con todo lo que hemos trabajado por el sistema público». Ésa fue la pregunta que más escucharon los asistentes a la cita de ayer que supuso el inicio … de la nueva era en la sanidad andaluza -cuyo órgano de gobierno se llama por primera vez en décadas Consejería de Sanidad y no de Salud-, y que arrancó este miércoles con el nombramiento de Antonio Sanz, número dos del presidente Juanma Moreno en el Ejecutivo regional y veterano entre los veteranos del PP-A, como su máximo responsable. La puesta de largo fue este jueves con una reunión de alto nivel con los gerentes de las áreas sanitarias y los gerentes de los hospitales que dirigieron los propios Moreno y Sanz.
Reunión de trabajo en la Consejería de Sanidad con gerentes de hospitales andaluces y de áreas sanitarias de toda #Andalucía.
Seguimos trabajando y avanzando en las soluciones con un refuerzo de la coordinación.
A nada vamos a dedicar más esfuerzo que a la salud. pic.twitter.com/Qtk3fbrSWg
— Juanma Moreno (@JuanMa_Moreno) October 16, 2025
El encuentro, que se celebró durante gran parte de la mañana en la sede de la Consejería en Sevilla, fue a puerta cerrada y de su resultado no transcendió ninguna declaración oficial, más allá de los mensajes que tanto el presidente como el consejero lanzaron a través de sus cuentas de ‘X’, antes Twitter, en las que se limitaron a expresar unas ideas escuetas. Ilustrada con una foto de la cita, la nota de Moreno señalaba lo siguiente: ‘Reunión de trabajo en la Consejería de Sanidad con gerentes de hospitales andaluces y de áreas sanitarias de toda #Andalucía. Seguimos trabajando y avanzando en las soluciones con un refuerzo de la coordinación. A nada vamos a dedicar más esfuerzo que a la salud».
No se extendió mucho más el ya titular de Sanidad, Presidencia y Emergencias. «Arrancamos esta nueva etapa con reuniones en la @saludand junto al presidente @JuanMa_Moreno y los gerentes hospitales, áreas y distritos sanitarios. Trabajo constante, diálogo sincero y sensibilidad con los profesionales y los pacientes. La salud de #Andalucía, siempre lo primero», indicó el político a quien el presidente ha confiado la resolución de la crisis provocada por los errores en el cribado del cáncer de mama.
El propio presidente Moreno anunció el miércoles, y en su extenso discurso tras la toma de posesión de Sanz y la asunción de nuevas competencias por parte de Carolina España y Jorge Paradela, que la reunión de ayer formaba parte del golpe de timón que tiene pensado darle -o que le ha dado de hecho- a la sanidad andaluza, tras reconocer que su partido, o su Gobierno, no ha sido capaz de «reconstruir» tal y como él y los suyos tenían pensado cuando llegaron al poder autonómico hace siete años.
Moreno planteó la crisis del sistema a un problema global que afecta a toda Europa
La otra pata del intento, casi desesperado por la cercanía de las elecciones autonómicas que están previstas el próximo junio, es la convocatoria de un comité de expertos que reformule la gestión sanitaria.
«Es un problema global, no sólo de Andalucía. Sé que tenemos poco tiempo pero alguien tiene que empezar el camino, y te pido que seas tú», conminó Moreno a Sanz hace dos días en el Salón de los Espejos del Palacio de San Telmo cuando este último juro su nuevo cargo, y donde se encontraba el actual presidente del Parlamento de Andalucía, Jesús Aguirre, y primer consejero de Salud de Moreno, así como el resto de los consejeros, entre ellos la actual responsable de Sostenibilidad, Catalina García Carrasco, y que sucedió al médico cordobés en el puesto después de haber sido viceconsejera durante toda la primera legislatura.
Llama la atención que hayan sido nulas las alusiones de Moreno a Aguirre y García Carrasco desde que estalló la crisis de los tumores femeninos y se comprometió a revisar los fallos del sistema sanitario -«auditaremos lo que haya que auditar», ha insistido el presidente-, y no ya por la responsabilidad que ambos puedan tener en que todo no haya ido del todo bien sino por la experiencia que podrían aportar para remontar la situación. También choca que la viceconsejera actual, María Luisa del Moral Leal, segunda de la dimitida Rocío Hernández Soto tras solo catorce meses en el puesto, siga casi desaparecida: no estaba ayer en la mesa presidencial de la reunión en la Consejería junto a Moreno y Sanz, y sí que se reconocía en las primeras filas a la directora-gerente del Servicio Andaluz de Salud (SAS), Valle García Sánchez, con quien el presidente ha contado de un modo directo desde que estalló la crisis.
Hay que recordar que el Moreno lleva al menos una semana anunciado más ceses en la Consejería, que por el momento se limitan a la dimisión (?) de Rocío Hernández. El ánimo entre los gerentes de los grandes hospitales es positivo, empero, y coinciden en valorar el tacto de Moreno al invitarlos a la toma de posesión de Sanz en San Telmo.
Las miradas se posan sobre el Virgen del Rocío de Sevilla, donde el Gobierno andaluz ha asegurado que se concentra el 90 por ciento de los casos de mamografías con diagnósticos dudosos que no se han tramitado de forma correcta, y que cuyos procesos se están revisando. La cúpula del citado hospital hispalense, el mayor de la región y con más de 8.000 trabajadores, reunió ayer a sus cuadros de mando para tranquilizarlos y ponerles las pilas ante el reto que tienen por delante de recuperar el crédito perdido.
«Nos han insistido en que no escatimarán recursos económicos, que los quitarán de carreteras si hace falta»
El gerente de un gran hospital
Varios directivos del SAS consultados por este periódico han coincidido en que el tono que emplearon el presidente y el nuevo consejero fue conciliador. «Han querido escucharnos, no han parado de preguntarnos qué necesitamos y de decirnos que no escatimarán recursos económicos, que los quitarán de las carreteras o de lo que haga falta», señala a este periódico el gerente de un gran hospital del SAS.
«Vamos todos a una: algunos compañeros les han trasladado al presidente y a Sanz las trabas administrativas con las que se encuentran para hacer contrataciones, y se han mostrado dispuestos a ayudarnos», añade otro.
La sensación generalizada, pues, es que es la hora de remar en la misma dirección. Y de que en la cúpula de la Junta no se explican aún del todo la situación crítica en la que se encuentra la Consejería. «Hemos invertido más que nunca pero tenemos que volver a empezar», aseguran los directivos consultados por este diario que ha sido uno de los mensajes predominantes en la encuentro.