Rafael Louzán, presidente de la Real Federación Española de Fútbol, apremia a Riazor y al Ayuntamiento de A Coruña para estar listo de cara al Mundial 2030, en una carrera por ser sede que todavía no está cerrada y en la que el proyecto final del gobierno encabezado por Inés Rey es incierto. La financiación es el gran caballo de batalla después de meses sin conocer avances, además de las diferencias con el Deportivo, club que ocupa el recinto. «En A Coruña, por lo que me dicen, no se ha hecho nada de lo que estaba previsto, y la responsabilidad recae exclusivamente en la ciudad», expresa Louzán, a quien le «gustaría» que Vigo también se pueda unir a un torneo en el que había una previsión de 20 sedes a compartir con Marruecos y Portugal. 11 para España, aunque se ha caído Málaga y aguarda cambios, además de la otra gallega, Valencia. Este diario preguntó al Concello por su postura, pero declinan hacer declaraciones.

El presidente de la RFEF, en el círculo de Empresarios de Vigo, acrecienta las dudas sobre Riazor 2030 y una ampliación en la que todo son preguntas sin resolver. Hace algunas semanas, los grupos parlamentarios BNG y PP llevaron al pleno diversas preguntas sobre la obra, pero Inés Rey fue esquiva ante la falta de avances. «No tengo noticias en relación a A Coruña. Está dentro de esa preselección. No significa nada más que una preselección», incidió Louzán sobre unas candidaturas cuya responsabilidad recae en las ciudades: «Es una magnífica oportunidad para Galicia. La ciudad de A Coruña es quien tiene la última palabra».

Sobre la distancia que existe entre el Deportivo y el ayuntamiento, Louzán indica que «es una cuestión de entendimiento» entre la ciudad, quien «lidera la candidatura», y el club, que utiliza el campo. Llegar a un punto en común es «una labor propia de las dos instituciones» y ahí él no «puede actuar». Aguarda que A Coruña pueda acelerar los plazos para llegar a tiempo a la cita de 2030: «[El Concello] tendrá que explicar qué es lo que quiere hacer, cómo lo quiere hacer y quién va a financiar todo eso. Y a partir de ahí la cuenta atrás ya empezó. Por lo tanto, creo que hay que apurarse para que pueda ser una realidad que la ciudad de A Coruña pueda ser sede».

Podrían coexistir Vigo y A Coruña, o no llegar ninguna

Las dudas en torno a un Riazor 2030 que no llegue a tiempo aumentan las posibilidades de Vigo. Louzán, respecto a esto, no descarta la posibilidad de que se pueda sumar, coexistiendo dos sedes en Galicia: «Ojalá Vigo pueda ser una de esas sedes. Factible siempre es, pero la última palabra la tiene la FIFA. Yo intentaré explicar qué es Galicia, pero lo tiene que decidir la FIFA».

Louzán insistió en que hay pactadas «20 sedes», a las que habrá que sumar también las que aporte Uruguay, Argentina y Paraguay. De esas, 11 pertenecen a España, aunque destaca que en el Mundial de 2026 de Estados Unidos habrá 16, cuatro menos. Eso sí, el cupo de combinados podría aumentar y, con ello, los partidos a jugar. «Pueden quedar 20, 18, 16… la palabra la tiene exclusivamente FIFA. Como gallego me sentiría extraordinariamente honrado de que Galicia tuviera una o dos sedes, yo no sé si va a tener una, dos o ninguna, porque no está en mi mano el poder hacer o decidir sobre eso».

Cree, además, que el aforo mínimo de 43.000 espectadores puede ser excesivo, así como una losa para la ampliación de algunos campos: «La FIFA ha exigido unos mínimos, para esos estadios yo hubiera rebajado esa presentación, pero ellos tienen unos ingresos computados y esperan que se cumplan». A lo que añade que espera que España no cometa los errores de otros países en el pasado: «Este tiene que ser el Mundial de la sostenibilidad, para que no pase como en otros sitios, que luego han quedado vacíos o alguno cerrado». E incide en esto ya que la inversión «será dinero público» , puesto que los estadios no son propiedad privada, como sí sucede en Portugal, donde los tres campos que acogerán el torneo pertenecen a sus respectivos clubes.

«España está en condiciones de hacer el mejor mundial de la historia. Que las grandes ciudades de Galicia puedan estar estaría muy bien, pero las ciudades son las únicas responsable», añade Louzán sobre unas sedes que todavía no están fijadas y podría «haber movimientos». Entre «2026 y 2027» se irá «concretando» el número exacto y España tendrá el mayor peso, con un 55%.