Engorda el palmarés de Susana Rodríguez con una facilidad pasmosa. Cada temporada añade nuevos renglones a una hoja de servicios gloriosa que la convertirá con el tiempo en el deportista gallego con mejor historial. Este sábado en Australia sumó su séptimo título mundial en su disciplina. Desde 2018 solo ha faltado a esta cita en 2020 (que no se disputó por la pandemia) y en 2023 cuando en Pontevedra una absurda sanción le privó de una victoria clara. La viguesa se muestra intratable en su categoría (PTVI) y a esos siete títulos mundiales añade los dos oros paralímpicos y las cinco victorias en el Campeonato de Europa.

No hay triatleta que muestre semejante solidez año tras años. Con 37 años no se le adivina aún rival de cara al futuro. Esta victoria tiene una importancia especial porque ha llegado meses después de haberse sometido a una ablación, intervención quirúrgica cardíaca que se realiza debido a una arritmia. Pero su corazón ha vuelto a demostrar que está plenamente recuperado de ese trance y que para nada el rendimiento de la viguesa se ha resentido.

La actual campeona paralímpica, mundial y europea era la gran favorita de la cita y confirmó los pronósticos, pese a un pequeño susto con la biciclista en forma de inoportuna caída. Pero ni siquiera ese percance, del que con la ayuda de Sara Pérez supo reaccionar rápidamente, hizo peligrar una victoria que supone su séptimo título mundial, reeditando su corona del año pasado, tras los de 2012, 2018, 2019, 2021, 2022 y 2024 en una temporada post Juegos Paralímpicos siempre complicada de desarrollar, pero en la que había sido la mejor.

Remontada

Rodríguez y Pérez empezaron por detrás de su gran rival, la italiana Francesca Tarantello en el sector de natación, habitualmente el que más le cuesta a la viguesa, pero a partir de ahí activaron su tradicional ‘modo remontada’ en la bicicleta y la culminaron en su gran fuerte, la carrera a pie, pese a que durante la transición, la doble campeona paralímpica se cayó sin mayores consecuencias. El tercer tramo de la carrera lo inició por detrás de la italiana, pero nadie resiste a Susana Rodríguez en la carrera a pie. Así viene sucediendo desde hace muchos años. En poco tiempo conjugaron la desventaja con la italiana y a partir de ahí volaron hacia la meta.

Finalmente, la pareja española se impuso con mucha autoridad una vez más con un tiempo de 1:04:42, con más de dos minutos de ventaja sobre Tarantello, mientras que el podio lo completó la alemana Anja Renner a casi cuatro minutos de la ganadora.

Hace tiempo que la cabeza de Susana Rodríguez ocupa mucho tiempo en pensar sobre su futuro, sobre el tiempo que aguantará en la competición, exigiéndose de este modo teniendo en cuenta que compatibiliza el deporte con su trabajo de médico y su agenda a veces se convierte en un pequeño jeroglífico. Pero el tiempo avanza y Susana lo hace subida permanentemente a un podio. Con poco más de dos años para la siguiente cita olímpica nada parece que la vaya a separar de la alta competición.