El BM Caja Rural Zamora se impuso este sábado a BM Camargo por 26-36 en un partido en el que los zamoranos tuvieron que trabajar más de lo previsto ante el colista para lograr los dos puntos.
Un esfuerzo que estuvo centrado en detener el ataque sin portero del equipo cántabro y en encontrar soluciones para superar la compacta y agresiva defensa local, que no bajó los brazos hasta el último cuarto de hora del encuentro.
Arranque eléctrico e igualado
La contienda arrancó eléctrica, con tres goles en apenas minuto y medio de juego. Un arranque explosivo con el BM Caja Rural Zamora dominando el marcador (1-2) y teniendo ocasión para ampliar ventaja en los siguientes minutos gracias a una parada desde los siete metros de Lucas Santana.
Sin embargo, por dos veces, los «pistacho» fallaron de cara a la meta de un BM Camargo que defendía muy junto y dejaba pocos huecos a los laterales. No fue hasta el minuto 5 cuando, Medina, puso el 1-3.
El BM Caja Rural Zamora arrancó «a tirones»
La renta duró poco. Los cántabros se emplearon a fondo en defensa, sin contenerse, y con dos buenas acciones igualaron nuevamente el partido. Una mala racha para los zamoranos que cortó Oier y que Felipe, aprovechando el ataque sin portero de los locales, alargó.

El BM Caja Rural Zamora, durante un tiemop muerto en Cantabria. / Balonmano Zamora
Medina puso el 3-6 en un nuevo robo de balón y las aguas parecían correr tranquilas para los de Félix Mojón.
De nuevo, la distancia se evaporó en segundos. Dos errores y dos goles en contra dejaron al BM Caja Rural Zamora seguir remando. Medina anotó desde los siete metros, pero el partido seguía sin romperse.
El equipo pistacho abre brecha
El ímpetu zamorano terminó por marcar diferencias a continuación, con Pau Ortega y Medina dando forma a un parcial de 0-3 que obligó a BM Camargo a pedir tiempo muerto (6-10, m. 14). Un receso que no impidió el despegue de un BM Caja Rural Zamora que, con dos goles más, se asentaba en suelo cántabro.
La racha se acabó con una exclusión y siete metros en contra del cuadro de Félix Mojón. Sanción que vino acompañada del ya típico fallo en el cambio con portero, que dejó a los «Guerreros de Viriato» con dos menos en pista.
Un paso atrás
Por fortuna, el colista no pudo sacar rédito, ya que Guille anotó y mantuvo la renta de los suyos que iniciaron la recta final del primer acto con 8-15 a su favor. Minutos previos al descanso en los que la eficacia defensiva pistacho bajó su rendimiento.
Pese a todo, el BM Caja Rural Zamora llegó con un buen colchón de goles al descanso, arrancando la segunda mitad con un favorable 12-18 a defender ante un BM Camargo que no iba a bajar los brazos.
Una segunda mitad aún más dura para los de Félix Mojón
La segunda mitad arrancó como la primera, con goles. Un intercambio de golpes en el que BM Camargo mostró más puntería que un BM Caja Rural Zamora que, pese a chocar con la dura defensa local, mantenía la diferencia.
Sin embargo, ni las paradas de Pajares ni los goles de Gigi daban tregua al equipo visitante. BM Camargo aprovechaba fallos en el lanzamiento zamorano para dejar la distancia en cuatro goles y amenazaba con hacer sufrir al equipo de Mojón.
Intentó encontrar soluciones el BM Caja Rural Zamora, pero los minutos pasaron sin que pudiera terminar de imponerse en pista. Medina, Pau Ortega y Gigi se afanaban en marcar, pero el ataque sin portero de BM Camargo le mantenía en partido a falta de un cuarto de hora para el final.
Tiempo muerto zamorano y arreón pistacho definitivo
Tal era la situación que Félix Mojón decidió pedir tiempo muerto, ya que el 23-26 no era nada cómodo de cara a los últimos minutos.
El parón dio aire al equipo. El BM Caja Rural de Zamora rompió la dinámica con un parcial de 0-2, que consiguió ampliar en los siguientes minutos con la vuelta de Lucas Santana a pista y buenas acciones al contragolpe. Eso sí, por contra, Medina se hizo daño y tuvo que abandonar el encuentro.
Un final sin grandes sobresaltos
El parcial se seguía estirando, hasta el 23-31 con el que se entró a la recta final. Un marcador cómodo para los zamoranos que obligó a pedir tiempo a un BM Camargo que, cuando volvió a encontrar las redes de la portería de Lucas Santana, ya estaba prácticamente sentenciado.
El carioca estiró el golpe decisivo de los zamoranos hasta el 23-33. Un marcador que, a falta de ocho minutos que dejaba el duelo en manos de un BM Caja Rural Zamora que se dedicó entonces a intercambiar aciertos y fallos con su rival hasta el definitivo 26-36. Un resultado que mantiene a los zamoranos en la pelea por el «play-off» en la clasificación del Grupo B.