A falta de casi dos meses y medio para que acabe el año, una película ya destaca como la gran favorita para destacar en la temporada de premios y los Oscar. Es Una batalla tras otra de Paul Thomas Anderson, una producción de indudable calidad y destinada a perdurar en el tiempo, pero que a la vez puede ser otro quebradero de cabeza para Warner Bros. porque en taquilla, pese a haber sido número uno y seguir manteniéndose entre las más vistas tras un mes en cartel, es más que probable que termine por provocar pérdidas en su comercialización en las grandes salas.
Como recoge un artículo de Variety, su principal problema es un presupuesto demasiado elevado y que se estima en 130 millones de dólares, para un largometraje de casi tres horas de duración, más otros 70 invertidos en su promoción, además del porcentaje en taquilla que acostumbra a llevarse la que es la principal estrella del filme, Leonardo DiCaprio. Teniendo en cuenta que, más o menos, las exhibidoras se llevan el 50 por ciento de la recaudación, la película de Paul Thomas Anderson necesitaría al menos de 290 o 300 millones a nivel global para resultar rentable.
En estos momentos, su recaudación sería de algo más de la mitad de lo requerido, 162,5 millones, y tal vez si se cumplen los excelentes vaticinios para Una batalla tras otra sobre todo de cara a los Oscar podría mitigar unas pérdidas que ahora mismo se valoran en unos 100 millones de dólares. Lo que es también la peor noticia que podía esperar Warner Bros, cuya fragilidad económica podría derribar en que fuera adquirida por otra compañía, con Paramount y Netflix entre las mejor posicionadas para comprarla.
En el bando de las ganancias, curiosamente, Warner ha tenido en las propuestas de género fantástico y terror sus principales bazas. De esta manera, destaca Expediente Warren: El último rito que costó 55 millones y en taquilla lleva amasados más de 482 a nivel global. También Los pecadores de Ryan Coogler, un exitazo especialmente en Estados Unidos, con un presupuesto de 90 millones y una recaudación de 366,6, o el thriller de misterio sobrenatural Weapons de Zach Cregger que contó con apenas unos 38 millones de presupuesto y lleva cosechados 267,1.