Con apenas el Gran Premio de Estados Unidos finalizado, empiezan a surgir las incertidumbres acerca de quién será el campeón mundial de Fórmula 1 este 2025. Actualmente, Oscar Piastri lidera la clasificación del campeonato con 346 puntos, que le dan 14 de ventaja sobre su compañero de equipo, Lando Norris (332). Ambos, que compiten por lo que sería su primer título mundial de Fórmula 1, tienen la presión de Max Verstappen, tercero en la lista con 306 puntos.

Con 28 años, el neerlandés ya es tetracampeón del mundo, y a pesar del nivel inalcanzable que parecía tener McLaren, el coche de RedBull ha mejorado y los resultados de los rivales del de Holanda están dejando que desear. A falta de 5 Grandes Premios y dos carreras sprint del final, Verstappen se llevó la victoria en Austin y se encuentra 40 puntos de un Piastri que apenas quedó en quinta posición y un Norris que quedó en segundo lugar.

El verdadero logro de Max ha sido entrar en una ecuación donde solamente debían tener cabida los dos McLaren. En Woking crearon una máquina perfecta que bautizaron como MCL39, un vehículo ideal para que sus dos pilotos pudiesen dominar sin problemas el campeonato del mundo. Y así ha sido hasta ahora, pero nunca sin conseguir despegarse del todo del de Red Bull. Y ahora que el monoplaza ha dejado de ser insultantemente superior al resto (a pesar de seguir siendo más rápido), el holandés se ha lanzado al ataque.

Lo que hace cuatro carreras parecía un sueño lejano, hoy se está convirtiendo cada vez más en una realidad. Y es que el piloto de Red Bull se encontraba a 100 puntos del liderato, y actualmente tan solo a 40. Las matemáticas indican que con sus 306 puntos actuales, aun tiene posibilidades de salir campeón por quinta vez de manera consecutiva.

Restan dos carreras sprint, con 16 puntos posibles para sumar, además de cinco carreras. Si Max Verstappen consiguiese terminar primero en las siete pruebas que restan del campeonato y Oscar Piastri hiciese segundo en todas ellas, el australiano sería igualmente campeón del mundo con 3 puntos de diferencia. Esto significa que no depende únicamente de él mismo, y necesitaría pequeñas patinadas de sus rivales, como alguna tercera posición de Piastri.

Max Verstappen y Lando Norris en el GP de Estados UnidosAFP7 vía Europa Press

Otro caso es su pelea con el inglés. En caso de ganar todo, Verstappen no necesita que Lando Norris patine o quede en alguna posición en específico. Acabaría superándole matemáticamente, eso sí, sin poder permitirse el más mínimo error en el proceso. En este caso, quedaría en segunda posición entre los dos compañeros de McLaren.

En el papel, dominar de esa manera las últimas carreras parece algo bastante complicado, pero el piloto neerlandés ya ha demostrado en los últimos años que puede mantener un ritmo digno de campeón en la recta final. El problema es que el posible campeonato del piloto holandés también dependerá de los errores que pueda tener Piastri, quien tendría que acumular menos de 100 puntos en las últimas carreras.

Otro factor que juega en favor de Max Verstappen es que México y Brasil son pistas que le dan, en cambio, a los pilotos de McLaren no tanto. Además, el nivel de los de la escudería inglesa parece estar bajando drásticamente, no queda muy claro si por cuestiones de simple nivel o si los recientes cambios en los coches de los rivales están dejando entrever que el monoplaza era la razón principal de su liderato.

Por lo tanto, Max Verstappen necesita ganar absolutamente todas las carreras que faltan, que son México, Brasil, Las Vegas, Qatar y Abu Dhabi. Además, el piloto australiano Oscar Piastri debe quedar segundo en todas las careras, y mínimo debe patinar algo más en una de ellas. De esta forma no depende únicamente de sus resultados, que ya deben de ser espectaculares si quiere firmar el quinto campeonato, sino que deberá esperar una combinación buena de resultados a su favor y errores de su rival directo. Al compañero de su rival, Lando Norris, sí que le superaría en caso de firmar un final de temporada perfecto, sin depender de sus actuaciones.

Por el momento, el neerlandés tiene la mirada puesta en carreras como México, que se disputa este domingo 26 de octubre, y Brasil, el domingo 9 de noviembre. Son circuitos en los que ha demostrado que se desenvuelve muy bien, además de ser momentos propicios para el piloto, que compite prácticamente sin presión y con la ventaja de que los dos pilotos de McLaren sienten la obligación de ganar el título. El tiempo corre en contra de sus dos rivales y el de Red Bull está cada vez más cerca.