El Valinox Novás ha cumplido su luto en una sola fase. El club rosaleiro, descendido tras siete temporadas en Honor Plata, ha eludido la negación, la ira o la depresión. Apenas ha negociado consigo mismo. Aceptada la realidad, ha transitado al alivio. El equipo que ahora dirige Guillermo Artime lidera el grupo I de Primera Nacional con tal solvencia que el técnico, antes que disipar la tristeza, se dedica a contener el entusiasmo. «La Liga es larga», advierte.
Es cierto que la directiva presidida por Andrés Senra, aunque en alguna campaña se llegó a flitear con Asobal, se había concienciado antes de aquel 3 de mayo en que una derrota en Santander certificó la pérdida de la categoría. «No nos cogió por sorpresa», confiesa Senra. «El año no estaba siendo bueno y no habíamos visto brotes que nos hiciesen pensar en darle la vuelta».

Partido del Valinox Novás en Bueu. / Santos Álvarez
Aunque doliese clausurar el ciclo más glorioso durante el 50º aniversario de la entidad, se celebró lo recolectado. «Y como sucede con todo en la vida, empezamos a verlo desde el lado positivo», afirma el mandatario. «Después de haber sufrido y de que nuestras raíces se hubiesen diluido, nos lo tomamos como la oportunidad de volver a lo que queremos».
Ya se había ido diseñando un plan cuatrienal que afectaba a toda la estructura. La contratación del asturiano Artime, ayudante de Roi Sánchez en el Burgos, se concretó un mes después. «El Novás es un histórico del balonmano nacional. Tengo muchos amigos en Galicia, Roi incluido, que me hablaron muy bien. Me lancé», explica el preparador, de 33 años.
Veteranos, canteranos, fichajes
La reconversión de la primera plantilla, entre marchas ineludibles y retiradas de históricos (Manu Martínez, Hermida), se realizó con equilibrio. Ocho jugadores continuaron. Se han fichado gallegos con oficio. Rubén López volvió de A Cañiza. El canterano Yasir se ha instalado entre los mayores. «Recuperamos la solidez de nuestros orígenes y la gente de casa vuelve a tener peso. Los jugadores de la base están teniendo oportunidades en el día a día y las convocatorias», destaca Senra.
«Hemos tenido que empezar de cero, con un proyecto nuevo, y a partir de ahí hemos construido un buen equipo», resume Artime. «Me he encontrado un club que desea recuperar la categoría, con ambición. Tanto ellos como yo queremos crecer a la par».
En el Novás se han esforzado para apuntalar la faceta deportiva. El presupuesto ha bajado de 450.000 a 300.000. Los patrocinadores principales (Valinox, Zona de Obra, Nebrinox, Entrepot Naval, Logemar, Vintanox, Jocar, Capigal o MeuFit ) se han mantenido fieles. Aunque algunos medianos se han caído, «otros han aumentado su colaboración o incluso se han sumado», celebra Senra.
Los datos son igualmente positivos a nivel social. El club cuenta con 900 socios y la asistencia al pabellón de O Calvario «supera incluso la de algunos partidos en Plata». En general, «ha sido una transición bastante llevadera para la plantilla y la directiva, lo que se ha trasladado a la afición. La gente sigue enganchada».
Por goleada
Con todo, admite Senra, «tienes dudas. Aunque pienses que tienes una plantilla completa, no sabes cómo se va a adaptar al nuevo entrenador, a la competición… Desconocíamos el nivel de los rivales después de tantos años». Las seis primeras jornadas han disipado esa incertidumbre. El Valinox ha derrotado a Tacoronte (36-20), Gáldar (22-30), Bueu (26-35), Culleredo (39-27), Xiria (31-37) y Teucro (34-18), que había llegado a O Rosal como tercero. En total, 211 goles a favor y 144 en contra para auparse a la cima con +67. «El equipo juega con colmillo», justifica Senra. Lanzarote, también invicto, se queda en +34. El Ingenio los sigue con diez puntos.
«El equipo está haciendo un trabajo espectacular. Pero en deporte las rachas marcan y las cosas cambian con rapidez. Debemos ser cautos. Si te relajas, cualquiera te gana. Quedan 24 jornadas. Es normal que haya ilusión, pero tiene que ser controlada», advierte Artime, que a la vez espera que este inicio «genere la exigencia de querer hacer las cosas aún mejor».
A la conclusión de la fase regular, los dos primeros disputarán liguillas de ascenso contra los clasificados de los otros cinco grupos. El Novás, entonces Acanor, organizó aquella gloriosa de mayo de 2018. Soñar con repetir esa fiesta «sale de uno mismo y te llega de todos los lados», admite Senra. «Creo que la fase es factible, tal y como hemos arrancado. Intentaríamos traerla a O Rosal; conseguirlo, ya veríamos. El ascenso son palabras mayores. Conocemos bien lo difícil que es. Queda mucha temporada por delante».