El pintor sevillano Manuel León se enfrenta a un reto de tamaña envergadura. No solo por la extensión del mural que debe elaborar para finales de año, sino porque su lienzo será el lagar municipal del municipio de Villanueva del Ariscal, cuna del artista, que servirá para dar la bienvenida al pueblo.
La obra representará una ‘costilla de Adán’ gigante. El mural que prepara Manuel León alcanza los 210 metros cuadrados, una superficie que convierte la obra en uno de los mayores desafíos de su carrera reciente. El proyecto deberá estar terminado en diciembre.
Junto a otros tres pintores, León es uno de los participantes de ‘Plazes 2025’, el programa de arte mural de la Diputación de Sevilla que cumple su segundo año y que busca que el arte no se quede atrapado en los museos, sino que se abra a la calle y que sea parte de la ciudadanía.
Este ariscaleño licenciado en Bellas Artes y con reconocimiento mundial se ha embarcado en la tarea de embellecer un lagar que, en su momento, creó el Ayuntamiento municipal para aquellos que quisieran vendimiar pero que, en la actualidad, su interior le sirve como estudio.
La edificación se encuentra en la entrada del municipio por la llegada de Olivares, por lo que el mural servirá tanto para adornarla como para señalizarla porque en letras pondrá: Villanueva.
«El principal reto es que la escala sea lo suficientemente creíble«, explica el artista a EL ESPAÑOL de Sevilla, y es que se ha visto en la obligación de adaptar su lenguaje pictórico a un formato monumental sin perder la expresividad que caracteriza su trabajo.

El pintor Manuel León con el arnés puesto para subirse a la grúa desde donde está pintando el mural.
Cedida
León reconoce que enfrentarse a esta creación en su propio pueblo añade un componente emocional que multiplica la exigencia. «Ya me ha pasado otras veces que la presión es diez veces mayor al estar haciendo algo para mi pueblo, por aquello de ser profeta en tu tierra«, comenta entre risas.
«Me siento muy querido en Villanueva del Ariscal, pero también tengo una gran responsabilidad. Seguro que si estuviera en Nueva York no estaría tan nervioso«, añade, consciente de la expectación que su intervención ha despertado entre sus vecinos. Y es que este sevillano ha expuesto en México, Corea, Grecia, Abu Dabi o Bruselas entre otros tantos lugares.
El también autor del cartel de la pasada Velá de Santa Ana confiesa que está volcado por completo en la obra. «Me estoy levantando super temprano, a las cinco de la mañana, para poder terminar el proyecto a tiempo», relata.
Su mural representará una Monstera deliciosa, popularmente conocida como ‘costilla de Adán’, una planta tropical de grandes hojas y color vivo que simboliza la belleza natural y la vitalidad.
Será la imagen que dé la bienvenida a Villanueva del Ariscal a partir de diciembre, marcando el umbral entre el paisaje urbano y el campo donde nació y creció el pintor.
‘Plazes 2025’
‘Plazes’ es un proyecto de arte mural impulsado por el Área de Cultura y Ciudadanía de la Diputación de Sevilla en colaboración con los ayuntamientos de la provincia y comisariado por la galería sevillana Delimbo que, tras el éxito de su estreno en 2024, se afianza como una cita estable dentro de la agenda cultural provincial.
En esta edición, además de Manuel León, participan los artistas Zésar Bahamonte, Ana Barriga y Ana Langeheldt, que intervendrán en muros de Cantillana, Fuentes de Andalucía, y Villanueva de San Juan.
En la presentación de la nueva edición, el diputado provincial Casimiro Fernández destacó que el proyecto es «un ejemplo de cómo la cultura transforma los espacios, revitaliza los entornos y genera identidad«, subrayando su papel como herramienta de regeneración urbana, dinamización local y atractivo turístico.

El pintor Manuel León subido en la grúa mientras pinta el mural en Villanueva del Ariscal.
Cedida
El diputado recordó que la iniciativa pretende crear «una colección de arte mural provincial y una nueva ruta artística» que crezca cada año con nuevas obras.
El proyecto, comisariado por Laura Calvarro y Seleka Muñoz, de Delimbo, vuelve a apostar por el talento andaluz y por el arte contemporáneo en el espacio público. «Los pilares de Plazes combinan la posibilidad de llevar la cultura a los pueblos y conectar con la ciudadanía desde la libertad creativa«, señaló Muñoz.
Los artistas participantes quisieron reivindicar el valor social del muralismo. Ana Barriga subrayó que «los artistas somos más necesarios en los pueblos que en las grandes ciudades», mientras que Zésar Bahamonte celebró poder pintar en su tierra: «Es un lujo llevar a mi abuela al muro y enseñarle lo que estoy creando«.
Las nuevas intervenciones de ‘Plazes’ comenzarán este mes de octubre y se desarrollarán durante los próximos meses, con el objetivo de completar los murales antes de final de año. Cuatro miradas distintas que volverán a convertir la provincia de Sevilla en un gran mapa de arte público y participación ciudadana.