Pablo López pasó ayer por el quirófano después de su rotura del ligamento cruzado e inicia a partir de ahora un proceso de recuperación que le dejará fuera de los terrenos de juego prácticamente hasta final de temporada.
La idea que tienen todas las partes es que el jugador se trate en Valencia, y el club está buscando la fórmula «legal» para cortar la cesión, aunque ese movimiento no se podrá hasta el mes de enero.
Pablo López pasó a principios de mes por los micrófonos de Tribuna Deportiva, donde aseguró que su próxima meta era quedarse «en el primer equipo y jugar en Mestalla». Corberán se refirió al joven murciano nada más conocerse la lesión: «Mandarle los mejores deseos. Fue una acción fortuita en el descanso. Es una dificultad que aparece en su carrera deportiva, pero tenemos una fe tremenda en él. En lo futbolístico y en lo personal estoy convencido que las dificultades que nos ayudan a todos a madurar, a dar pasos que el fútbol nos exige. Estoy seguro que así será y lo veremos recuperándose y jugando con la camiseta del Valencia CF que es el deseo que todos tenemos».