LORDI

+ BLOOD WHITE

Viernes 10 de Octubre – Sala Revi Live – Madrid

Dos años han pasado desde que, estando en Madrid dispuesto a ver a las criaturas finlandesas de LORDI aterrarnos en Fuenlabrada, una tormenta logró detenerles, llevándoles a suspender su esperada fecha. Desde entonces han publicado otros dos álbumes, contando con que dos años antes habían puesto a la venta siete discos de una tacada, todos ellos de gran calidad, bajo el nombre de «Lordiversity». No se puede decir que no sean unos trabajadores natos, y, desde luego, es una banda totalmente merecedora de un «sold out» que se hacía notar desde tempranas horas de la tarde alrededor de Revi Rock. Todo tipo de público, de todas las edades, con todo tipo de indumentarias y de todos los pelajes. Da gusto el comprobar que la calidad de una banda como LORDI es apreciada por varias generaciones y por un amplio espectro de público, que ha sabido valorar la trascendencia de la banda por encima de su indumentaria, sus disfraces y todo lo extramusical. Siempre han facturado trabajos de calidad indiscutible, con gran peso del hard rock en su sonido, que viajan por varias épocas del rollo sin sonar rancios, anticuados o manidos. Son únicos, y musicalmente tienen una identidad absoluta, reconocible y, en realidad, Mr.Lordi ha cumplido su sueño…el montarse unos KISS del averno, casi crear un micromundo a su alrededor, siendo él mismo un Gene Simmons de menor tamaño, pero más aterrador. Le ha salido bien la jugada, pero no sin antes entregarnos grandes discos como el que venían a presentar en el «Limited Deadition Tour», el que les servirá para mostrar al mundo su último trabajo discográfico.

Impresionante el puesto de merchandising, con una gran variedad de ítems, a cual más llamativo, para que al fan no le falte de nada, y un escenario compuesto por varios telones que simbolizan el mundo LORDI perfectamente…y es que, en una sala como Revi Live, se valora el observar que la banda trae consigo una parafernalia como la que transportaron para esta gira. Ahí había una batería, y un «flight case» con el nombre de la banda invitada, BLOOD WHITE, quienes acaban de publicar su disco debut «From Hell», desde tierras germanas. Los músicos salieron a por todas vestidos de blanco. Su vocalista Dr.Zero, es el único que nos deja ver su cara completa, pintada, mientras que su bajista Gas G, no deja mostrar su rostro, usando una máscara antigás. Luke Y-Cut, el batería, luce una mascarilla a lo Hannibal, mientras que la atención se la llevan los dos guitarristas. Mr.Bonesaw parece un cirujano pirado, así como D.C. Spark muestra una máscara que no esconde su admiración por Slipknot. Cuando empezó a sonar «Don’t Blame Me» quedó bastante patente esto último, no tanto por lo musical, sino por lo que se proyecta al público desde el escenario. Un sonido aplastante, una actitud desafiante, y un estilo musical que encantará a todos aquellos amantes de sonidos procesados, aunque se perciban totalmente naturales y muy profesionales. El tema de apertura es un bombazo y casi podría ser parte de un disco de FIVE FINGER DEATH PUNCH. El público parece contectar de inmediato, y prosiguen con «Unholy Water» que, con un riff asesino, más clásico, vuelve a su forma original en una propuesta que podría tener entre sus referentes a DISTURBED o a los propios SLIPKNOT, presentando un estribillo realmente sensacional, en el que los coros de los guitarristas adornaron más aún el excelente resultado. Dr.Zero no para de moverse, gesticular, poner su pié en las pantallas, dirigirse a las primeras filas…es un gran representante para BLOOD WHITE, y además tiene un timbre de voz muy poderoso que gana en vivo. Aunque eran totalmente desconocidos para muchos de los asistentes, los temas que fueron presentando cayeron como un mazazo, dejando huella, como «Fear», mucho más cercano a SLIPKNOT, desprendiendo una fuerza descomunal. «Memories», mucho más atmosférica, pudo disfrutar de un público atento, que veía cómo la banda se comía el escenario, dándolo absolutamente todo. «Run Or Die» es incendiaria, y el trabajo de los guitarristas creando un muro eléctrico es encomiable. Un hit single en toda regla, que disfrutamos los ya muchos asistentes que decidimos presentarnos a primera hora para darles la oportunidad. No nos estábamos arrepintiendo.

Tras una también arrasadora «Bloodfield», la pintura de la cara de su vocalista empezaba a desprenderse… estaban sudando la camiseta, y se lo estaban llevando de calle, temazo tras temazo, riff tras riff, baquetazo tras baquetazo. Con el público totalmente partidario, colaborador y en el bolsillo, tirando algún cd a las primeras filas, y con la adrenalina por las nubes, nos asaltaron con la enérgica «Get Up», o «All I Said Was A Lie», a través de un riff mucho más veloz, deudor del «sonido Göteborg» incluso, dejando para el final un misil de canción como «Guns and Fear», que imagino no moverán de su set en un futuro, porque es un single absoluto, cargado de fuerza, un estribillo genial, y un desarrollo para mover la cabeza desde que empieza el tema hasta que termina. Con él dejaron su particular huella e impronta en Madrid,  y ganaron algunos nuevos oyentes, entre los que me incluyo. Y no me lo pensaré si vuelven por alguna de nuestras ciudades. Todo un descubrimiento BLOOD WHITE.

Llegó el momento en que el escenario se tiñó de tonos morados y azulescos que reslataban el universo LORDI, en el que se incluía una puerta central, y varios adornos de atrezo muy resultones, con la batería a la izquierda, y el teclado a la derecha de la misma. Desde decoración sobre el pie de este último, a metraquilatos giratorios sobre los bombos de la batería, o esqueletos colgados de los micros… todo cuidado al mínimo detalle, con cierta modestidad, pero queriendo hacernos llegar lo que siempre han promulgado los finlandeses, es decir, Shock Rock empapado de un componente retro muy atractivo y, visualmente, muy impactante. Tras «God of Thunder» de KISS comenzó a sonar la intro «SCG XIX The Hexecutioners», y tan pronto como Nalle (en sustitución temporal de Hella) emitió las primeras notas de teclado, comenzó el griterío, y Mr. Lordi, así como el resto del line up pisaban el stage, nos asaltaban con «Legends Are Made of Clichés», tema de apertura de su elogiado nuevo disco de estudio, que ya parecía un clásico a juzgar por la cantidad de público cantando su estribillo.

El sonido desde el inicio fue sobresaliente, así como la propia actitud de la banda, en especial la de un Kone que se ha ganado su lugar y peso en los espectáculos de LORDI, ya que, siendo el único guitarrista, lo llena absolutamente todo, con un tono, técnica, limpieza y espectáculo, que, unidos, hacen de su figura una atracción de casi tanta importancia como la de un Mr.Lordi increíblemente enérgico a la voz. La banda suena impresionantemente bien en directo, pues Hiisi y Mana no son precisamente unos novatos a la hora de dar empaque al sonido. El público, animado desde el primer minuto, se fue calentando a gran velocidad, y más lo hizo desde que cayó el primer clásico de la noche. «Girls Go Chopping» de «Deadache» del 2008. Suena duro, medido, con un teclado fantasmagórico súper presente muy bien llevado. Lo disfrutamos sobremanera, y Lordi también, salpicando al público con un hacha impregnado, dando con el sencillo artilugio inicio a la parte más teatral de su particular circo.

Tras el primer saludo de un frontman que no paró de bromear con tópicos, jugando con palabras malsonantes en castellano (follar, culo, tetas, polla, etc…), pero con cierta gracia, la locura se cirnió sobre nosotros a través de un conocidísimo «Who’s Your Daddy?» del famoso «The Arockalypse», en el que el vocalista nos disparó a la cara con una metralleta de humo, mientras que todos cantábamos al unísono el infeccioso estribillo, y es que LORDI tienen repertorio para que gritemos sus letras durante horas…fantásticos coros, melodías y composiciones hard rock de muchos quilates. Un entretenido solo de batería con la melodía de «El Coche Fantástico» como pretexto, nos enseña la originalidad de Mbana para llevarlo a cabo, y así dar un pequeño respiro a una banda que estaba escalando a lo alto de la montaña a gran velocidad, tocando la cima desde los primeros minutos de concierto. Volvieron a su actualidad más inmediata con un «Fangoria» también muy bien recibido, decorado con ese componente de cine slasher que tan bien le viene a LORDI, al salir este con una motosierra enorme echando humo, tan amenazante como cómica. Se agradece que la banda se esfuerce en ofrecer algo diferente en cada tema, y en eso los monstruos nórdicos más famosos de la Tierra, tienen poco rival. Súper divertido el pensar «¿qué ocurrirá en el seguiente tema?».

LORDI - Sala Revi Live - Madrid LORDI - Sala Revi Live - Madrid

«To Beast Or Not To Beast» me parece uno de los grandes discos de su extensa discografía, y «The Riff» sonó calcado, potente, efectista, en el que Kone no para de posar, y demostrar que se basta y se sobra para reproducir cada parte del tema. Tras «Girl in a Suitcase», de «Borderline» (uno de los siete álbumes de «Lordiversity») pudimos ver a un viejo loco con una mujer desmembrada en una maleta, que trataba de agarrar la cara del mismo… un espectáculo serie B muy entretenido que, como digo, te mantiene pendiente y alerta durante todo el show. Nalle nos deleita con unas bonitas líneas de teclado antes de abordarnos con la veloz «Syntax Terror» de su último «Limited Deadition», que me encantó en su versión de directo. Mr.Lordi nos preguntaba si queríamos más, quejándose del calor de la sala, y así presentar la canción lenta de la noche. «Call Off the Wedding» llegó a su cénit con un sentido solo de Kone en su parte final, el cual se alargó unos segundos, incluyendo alguna parte neoclásica tocada con mucho desparpajo y limpieza. De nuevo, pudimos ver un espectáculo del viejo loco, con el que están experimentando muy visceralmente, en una escena similar a la del inicio del «Brutally Live» de ALICE COOPER, con un toque, obviamente, más humorístico. «Retropolis» es otro hit de puro hard rock, que sonó cargado de detalles, mientras que el monstruo principal nos presentaba «Hellizabeth», jugando con el inicio del tema, generando hype y ejerciendo como showman de forma sobresaliente. La propia protagonista del tema salió de la puerta en forma de muñeca a darnos un buen susto, amenizando de nuevo el momento, y teatralizando cada minuto de concierto…¡una pasada!. Incluso el solo de bajo de Hiisi no fue nada usual ni convencional, como tampoco lo es un súper clásico de la envergadura de «Blood Red Sandman» del monumental «The Monsterican Dream» (mi favorito junto al «Get Heavy») que sonó de escándalo, y que nos trajo a un Lordi vestido de Santa Claus de las tinieblas, saco en mano, del que poco sacó salvo algunos confeti y tiras brillantes, que posteriormente tiró al público… yo esperaba algún corazón, o unos sesos, pero también nos vale algo de purpurina. A todo esto, el concierto sonando simplemente perfecto, manteniendo el nivel, sin mermar…solo yendo cada vez a más.

La parte final fue en la que LORDI decidieron hacer uso de la nostalgia, regalándonos un enérgico y coreadísimo «Devil is a Loser» del genial «Get Heavy», del que cantamos cada frase, así como un «Would You Love a Monsterman?» en el que la fiesta subió al siguiente nivel, con todo el mundo saltando, pasándoselo en grande y disfrutando de un concierto en el que estaba todo el pescado vendido. La ganadora de Eurovisión «Hard Rock Hallelujah», hacha en mano, nos recordó que hubo un tiempo en que una gigantesca banda conformada por monstruos, haciendo una música genial, conquistaron al mundo entero ganando Eurovisión… un momento grandioso de nuestra música. Para celebrarlo tantos años después, de la boca de una muñeca empalada a lo «Holocausto Cannibal» que se sacó de la manga nuestro protagonista, salieron otro puñado de confeti, y así finalizar un espectáculo único y perfecto a cualquier nivel que podáis imaginar. No se puede hacer más, ni mejor. LORDI lo reventaron en Revi Live, ofreciendo uno de los que, sin duda, será de los conciertos referentes de 2025. Grandísimos.

Texto: José Rojo

Fotos: Óscar Gil Escobar

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