VALÈNCIA. Que la Generalitat Valenciana tiene prisa por inaugurar su proyecto efímero de ‘Museo Sorolla’ en el Palau de les Comunicacions, que acogerá parte de la colección de la Hispanic Society of America, es una realidad. Fue hace apenas un mes cuando se anunció la licitación, por cerca de dos millones de euros, de la redacción del proyecto de rehabilitación del antiguo edificio de Correos, un proceso en el que la cuestión de los plazos no solo es clave para la administración autonómica, sino prioritaria.
“La Generalitat estima conveniente agilizar al máximo las obras de rehabilitación del Palacio de Comunicaciones y por ello una de las cláusulas del contrato valora la mejora del plazo de redacción de la documentación técnica mediante la reducción de los plazos parciales”, explicaban desde el gobierno en un comunicado. El objetivo, claro, es inaugurar el espacio dentro de la presente legislatura.
Sin embargo, cómo se suele decir, la prisas no siempre son buenas compañeras. En este sentido, el Colegio Oficial de Arquitectos de la Comunitat Valenciana (COACV) ha recurrido el proceso y demandado la suspensión de la adjudicación, tal y como ha avanzado Las Provincias y ha confirmado este diario, al considerar, entre otras cosas, insuficiente el plazo que se propone.
Cabe recordar que los plazos “máximos” que establece el pliego de condiciones son de hasta dos meses para los informes previos, revisión, levantamiento planimétrico, redacción del proyecto básico y de intervención arqueológica y proyecto de actividad; y de hasta cuatro meses para la redacción del proyecto de ejecución con la memoria final de intervención. Para la ejecución de las obras se prevén nueve meses.
Estos plazos iniciales son ya de por sí ajustados, de acuerdo con el COACV, que en su escrito demanda que se duplique (contando con cuatro meses para la primera fase y ocho para la segunda) teniendo en cuenta la complejidad de la operación. Este es uno de los pilares del escrito, aunque no el único. Desde el Colegio también se señalan los criterios de solvencia técnica, que demandan a las empresas acreditar tres proyectos del mismo tipo o naturaleza en los últimos diez años, lo que limitaría la competencia sgún el COACV, así como el cálculo de los honorarios, que consideran “no ajustado” al obviar el trabajo previo e intelectual de un proyecto muy particular.
Así, desde el COACV, plantean que desde la Generalitat Valenciana se debe impulsar un concurso de ideas con intervención de jurado y no así una licitación a la baja. “Desde el COACV nos ponemos a disposición de Presidencia, queremos colaborar y que se resuelva de la mejor manera posible”, expresa Salvador Lara, decano del COACV, preguntado por este diario.