Boris Savelev. Viewfinder, una forma de mirar, exposición abierta en Santiago que vive sus últimos días en el Museo Centro Gaiás, tiene un poder de seducción especial. Lo indica así un grupo del primer curso de Fotografía y otro del segundo de la EASD Mestre Mateo (Escola de Arte e Superior de Deseño) al visitar la muestra con docentes como Andrés Etxeita, Rosa Figueroa, y Antón García y Alfonso González.
Premio PHotoEspaña 2024
Esta retrospectiva de Boris Savelev (Chernivtsi, Ucrania, 1947), Premio PHotoEspaña 2024, ofrece 103 fotografías, más vídeos de su proceso creativo y material del archivo personal del propio Savelev (afincado en Vigo) y delcomisario, Adam Lowe, director de Factum Arte, un taller madrileño dedicado a tender puentes entre tecnología digital y técnicas creativas tradicionales y cuyo equipo construyó en 2007 una impresora plana especial de inyección de tinta capaz de construir una imagen por capas a la medida del fotógrafo ucraniano afincado en Galicia (primero en Cambados, ahora en Vigo).
Olalla Grueiro abre este diálogo estudiantil sobre Savelev: «Me gusta la exposición porque tiene un recorrido histórico por diferentes épocas y ciudades». Y Elena Corbellón añade: «La impresión de las fotos es impresionante».

Una alumna ante varias imágenes de la exposición fotográfica de Savelev en el Gaiás. / Jesús Prieto
Renato Damián opina así: «Todo tiene más valor cuando sabes que su técnica de impresión es manual. Sus fotos de calle cuentan una historia a través de la iluminación, y algunas parecen ilustraciones», dice sobre un Savelev que a veces imprime sobre paneles de aluminio recubiertos de yeso.
Mateo Cao, hijo del añorado Emilio Cao, apunta: «El uso que Savelev hace de la luz y el contraste me parece muy interesante, y las texturas que logra de las piedras», relata con una admiración que no comparte otro estudiante, Nico Mazzioti, que disiente sereno: «Me parecen imágenes feas, no me atraen las fotos urbanas, me gustan más las de animales y medio ambiente», aclara.

Otro grupo visitante ante el trabajo de Savelev. / Rocío Cibes
Ciudades y épocas diferentes
Parte del atractivo de la muestra Boris Savelev. Viewfinder, una forma de mirar, radica en que, junto a planos de Moscú, San Petersburgo, Nueva York, Londres o Madrid, ofrece también algunas fotografías hechas en Vigo o Santiago.
«Se nota que la exposición interesa a los estudiantes porque van revisando las fotos y haciendo fotos con sus móviles. Savelev es un autor con una visión muy personal, muy selectivo», apunta el docente Andrés Etxeita. Su colega Rosa Figueroa destaca a su vez el mimo del montaje: «La impresión de la exposición es muy buena y el vídeo donde cuenta cómo revela por capas, está muy bien».

Savelev en la exposición sobre su obra el día de la apertura. Detrás a la derecha, una foto suya de Santiago. / Cedida
¿Por qué gusta tanto?
La tertulia crece con el testimonio estudiantil de Emiliana Pardo, Candela Asensio y Ainoa Novo.
Pardo: «Me parece una exposición maravillosa, enseña mucho de la realidad de cada momento y mezcla foto callejera y documental. Me inspira, porque es justo el tipo de fotografía que me gustaría hacer». Asensio amplía este retrato coral: «A mí gusta mucho el dibujo, y las fotos de Savelev se parecen a mi estilo urbano porque hay muchas fotos de la calle».
A Novo le motiva: «Me inspira mucho el tratamiento de las luces y las sombras, creo que es un fotógrafo muy inspirador. Además, yo soy muy nostálgica, me gusta imprimir las fotos», cuenta sobre una técnica analógica casi extinta.

Estudiantes en plena escucha durante la visita guiada en el Gaiás. / Rocío Cibes
Juan Amoedo, por su parte, alude al rol cromático del autor ucraniano: «Me encantan sus colores pasteles, saturados, densos… Su rojo te atrapa la vista» . Y Zaira García señala: «Al sacar una foto, (Savelev) crea otra historia, narra otra cosa diferente a la realidad, te llama la atención, pero no te cansa al mirar».
Durante la visita, Antón García, otro de los profesores de la Mestre Mateo, resalta también el factor motivador del estilo que ofrece esta retrospectiva del fotógrafo protagonista: «Hay mucha foto en la calle y eso les viene muy bien a los chicos y chicas porque les cuesta mucho atreverse a salir a la calle a hacer fotos, y ver esos planos cotidianos les motiva».

Vista de vitrinas con fotos de Savelev de formato pequeño / Rocío Cibes
Fotos de Galicia
La exposición fotográfica sobre Savelev se puede visitar hasta el domingo, de 10 h. a 20 h. en el Museo Centro Gaiás, con entrada libre. Esta organizada por la Xunta de Galicia, la Cidade da Cultura, Factum Arte, PHotoEspaña y La Fábrica, y con o sin visita guiada, atrapa. Tiene series como la dedicada al Ballet Bolshói donde se difumina la frontera entre foto y pintura, parte de la carrera de un autor que inauguró esta muestra en el Gaiás con la cámara colgada al cuello, una Olympus.
Y aunque Savelev sea alérgico a hablar de su trabajo, el Gaiás exhibe media docena de instantáneas inéditas hechas entre Santiago Vigo, Lugo y Cambados, parte de un portfolio llamado Diario galego porque, que revelan el cariño por Galicia de su forma de mirar…