Josep Bagur Corominas (Máó, 1960) «es un creador culto, riguroso y profundamente humanista, que ha sabido dialogar con el legado pictórico clásico y contemporáneo». Esa es tan solo una de las muchas razones que ha llevado al Consell a elegir al artista como protagonista de la exposición que cada año se organiza con motivo de la celebración de Sant Antoni. Un reconocimiento con el que la administración insular pretende «rendir homenaje a una figura clave de la cultura y el arte menorquín, que a lo largo de más de cuatro décadas ha contribuido de manera decisiva a la dinamización cultural de la Isla».
Recuerdan desde el Consell insular que su obra, marcada por una mirada neofigurativa y expresionista, «explora la condición humana desde una perspectiva existencial y espiritual, convirtiendo la pintura en un instrumento para comprender y expresar la vida». Como gran conocedor de la historia del arte que es, Bagur ha desarrollado un lenguaje propio en el que «la figura, la luz y el color se convierten en vehículos de una constante búsqueda sobre la identidad y la experiencia humana», destacan los promotores del homenaje.
El artista mahonés, entre el presidente del Consell, Adolfo Vilafranca, y el conseller de Cultura, Joan Pons Torres.
A pesar de una trayectoria discreta en el ámbito expositivo —con solo dos muestras individuales en Maó (1995 y 2003)—, su influencia ha sido profunda y constante en el panorama menorquín. Durante años ha compaginado su labor artística con la docencia en el IES Joan Ramis i Ramis de Maó.
Aunque actualmente ya no puede pintar debido a una grave pérdida de visión, su actividad como vocal de Bellas Artes del Ateneu de Maó «lo ha convertido en un referente imprescindible de la vida cultural local», añaden. En ese sentido, el conseller de Cultura, Joan Pons Torres, recalca que con esta exposición programada para el próximo año «se rendirá homenaje a un artista con quien Menorca tenía una deuda pendiente, en reconocimiento a su trayectoria, su dedicación y también a su obra.
Con este gesto, el Consell Insular quiere poner en valor su labor como docente y como impulsor de innumerables iniciativas que han contribuido a dinamizar la vida cultural menorquina».
Admirador confeso de la obra de Goya y motor de numerosas iniciativas culturales