La reina Sofía celebra este domingo en familia su 87º cumpleaños apenas cuatro días después de que el rey Juan Carlos I adelantara extractos de sus memorias en los medios franceses Le Point y Le Figaro en los que revela su deseo de dejar el exilio de Abu Dabi, de reconciliarse con su hijo Felipe VI, de tener más trato con sus nietas y en los que habla su esposa como alguien que “no tiene igual en mi vida”. Palabras que suenan a gratitud y también a disculpa en un libro del que, por cierto, reniega de Corinna Larsen como uno de sus mayores errores.
Este fin de semana, la única actividad oficial programada por la familia real fue el viaje relámpago que hizo ayer el monarca a África para acudir a la inauguración del Gran Museo Egipcio de Giza. El resto está todo despejado para que puedan disfrutar de la doble celebración de abuela y nieta, pues la princesa Leonor cumplió 20 años el pasado viernes. Un reencuentro facilitado por el hecho de que los alumnos internos de la Academia del Ejército del Aire y del Espacio de Murcia en la que la heredera estudia tengan los fines de semana en régimen abierto. La infanta Sofía, por su parte, acude desde Lisboa, donde estudia su grado universitario.
Sofía de Grecia, en Valencia en 2019.
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En esa ciudad precisamente es donde su abuelo el rey emérito está pasando unos días antes de regresar a España —el pasado miércoles viajó desde Emiratos Árabes Unidos a la ciudad de Vitoria para visitar al doctor Eduardo Anitua en una revisión médica rutinaria—. Previsiblemente pasará unos días en Portugal antes de regresar a Galicia para participar en las regatas de Sanxenxo de los días 8 y 9 de noviembre.
Todo esto con el trasfondo de la publicación de Réconciliation (editorial Stock) de Laurence Debray, unas memorias que en Zarzuela hubieran preferido que no vieran la luz. Los primeros adelantos ya han sido reveladores, pues el emérito habla de la distancia que lo aleja de su hijo, de lo mucho que echa de menos España, de que le gustaría regresar, confirma la mala relación que tiene con la reina Letizia, habla del poco trato que puede tener con sus nietas, da consejos a la heredera, desliza que a la reina Sofía no le dejan visitarle en Abu Dabi y repasa su reinado desmintiendo incluso haber tenido ningún tipo de participación en el golpe de Estado del 23-F.