El concurso de Coruña Marítima para diseñar un plan maestro que rediseñe los muelles coruñeses desde el centro de la ciudad hasta la playa de Oza, recibió 15 propuestas en la fase de presentación de candidaturas que acaba de terminar, de acuerdo con los promotores del concurso, que señalan que en los próximos días se abrirá la documentación recibida y se identificará a «las empresas y uniones temporales de empresas (UTEs) participantes». Esta es la segunda versión del concurso, pues varios arquitectos presentaron recursos a la primera al entender que las bases daban prioridad a los arquitectos internacionales frente a los locales. El fallo del Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales que dio razón a los recurrentes obligó a revisar algunos de los requisitos de solvencia incluidos en los pliegos iniciales. Contra esa resolución, el Puerto no podía interponer ningún recurso administrativo, aunque sí podía ir a la Audiencia Nacional en un plazo de dos meses, pero ha optado por modificar las bases.
Los cambios rebajan las exigencias en cuanto a experiencia previa de los equipos: bastará con haber desarrollado proyectos en ciudades de más de 10.000 habitantes —frente a los 150.000 que se pedían antes— y en edificios dotacionales a partir de cinco millones de euros de presupuesto, en lugar de los 100 millones fijados en la convocatoria anterior. Según señala Coruña Marítima (en la que participan Estado, Xunta, Concello, Puertos del Estado, la Autoridad Portuaria y Adif) ahora se abre un periodo de dos meses durante el que se procederá a seleccionar los cinco finalistas. «La selección valorará especialmente la calidad y complejidad de los trabajos previos, así como la trayectoria profesional, experiencia y reconocimientos obtenidos por los equipos», indica la entidad, y «se priorizará la excelencia técnica frente al volumen de proyectos realizados.»
Con los finalisas seleccionados, se abrirá un período de cinco meses para quepreparen sus propuestas. De esta evaluación saldrá la adjudicataria del Máster Plan «y en ese momento ya se conocerá la maqueta de todo el proyecto». El equipo ganador dispondrá entonces de un año para desarrollar el plan director del proyecto Coruña Marítima, así como todos los anexos y documentos complementarios que figuran en las bases. El importe de la licitación es de 3 millones de euros, indican los promotores de esta.
Conexión ferroviaria
El concurso internacional deberá fijar los criterios para modificar los muelles interiores y por el momento solo hay líneas generales, pero la documentación previa explora posibildiades como indigar en la «viabilidad» un servicio de cercanías en la línea a Betanzos y Lugo, con paso «por el corredor de la ría de O Burgo». La actual estación de ferrocarril de mercancías está en San Diego, pero el documento propone llevar el tren de pasajeros, usando «vías en desuso hasta el entorno de la plaza de Ourense», o con un nuevo trazado. Y el estudio deberá analizar «la posibilidad de implantar un tranvitrén» para la parte urbana. Los muelles mantendrán usos empresariales (aunque se plantea concentrar la actividad ligada a la pesca en Oza y las actuales instalaciones de Repsol).
El proyecto contempla desarrollar zonas verdes y equipamientos públicos, entre ellos un «multiusos de gran capacidad en San Diego» ( y establece que hay que estudiar las necesidades de los barrios cercanos para determinar qué construir. Pero no renuncia a hacer caja con los terrenos portuarios, dedicándolos a usos lucrativos, entre los que cita viviendas y oficinas, así como usos comerciales y hoteleros. Eso sí, añade que hay que «establecer los estándares de suelo destinado a vivienda pública» para dar respuesta a la «necesidad» de la población. En cuanto a la actividad económica, se busca crear espacios «para la innovación y para la atracción de talento», y el documento incide en potenciar el sector sanitario como «sector prioritario de futuro».
Otro de los objetivos debe ser la preservación del «patrimonio» de los muelles. Entre estos menciona enrejados y cierres protegidos y la antigua lonja (conocida como del Gran Sol), de «especial interés». También se consideran a preservar elementos como silos de Batería y Calvo Sotelo, el mareógrafo de Calvo Sotelo (que no el edificio que lo alberga) y el inmueble de DDY.