«Constancia». Ésa fue la palabra que Mariano Díaz (Premià de Mar, 1993) más veces se repitió durante los 402 largos días que estuvo sin … equipo. Más de 13 meses alejado de la alta competición que se terminaron en agosto cuando fichó por el Deportivo Alavés. «Volver a sentir el césped fue muy bonito», recuerda un delantero «indomable», la expresión que acompaña al león y al gorila que lleva tatuados en su espalda. Una declaración de intenciones sobre los hombros de un ex de Real Madrid, Sevilla y Lyon que ha tocado el cielo ganando la Champions y bajado a los infiernos durante su año sin equipo. Un viaje con el gol como compañero el de un ‘9’ que nunca deja a nadie indiferente y que trabaja para resurgir de albiazul.

– Las últimas cuatro jornadas no se ha vestido de corto y tuvo un problema en el nervio ciático. ¿Está ya recuperado?

– Sí. Fue una molestia que tuve en el isquio que trabajando con los fisios y haciendo dobles sesiones ha desaparecido. Me encuentro cada vez mejor.

– Después de cuatro meses en el Alavés, ¿cuánto le falta para alcanzar su mejor versión?

– Estoy en forma, pero siempre intento mejorar. Las molestias que tenía por el año sin jugar se han eliminado y no me veo penalizado por mi inactividad. Espero entrar cada vez más y dar el máximo para el equipo.

– La sanción de Boyé abre un hueco en la delantera de cara a la visita de este sábado (14.00 horas) al Girona. ¿Se ve en el once en Montilivi?

– Estoy trabajando para entrar, si puede ser de titular, y dar el máximo para ayudar al equipo a ganar. La competencia que tenemos los delanteros es muy sana. Todos luchamos por jugar y es el míster el que decide.

– Fue titular en la Copa, frente al Getxo, y firmó un ‘hat-trick’. No marcaba en un partido oficial desde hacía tres años…

– Había anotado en amistosos con el Alavés –doblete al Castellón– y con la selección –marcó en marzo con la República Dominicana frente a Puerto Rico–. La lesión en el Sevilla me impidió disfrutar de muchos minutos. No había tenido tantas oportunidades, pero el gol es algo que no se olvida. Tras el triplete estaba muy feliz y contento. Qué mejor que estrenarme con el Alavés con un ‘hat-trick’.

– No marca en Primera desde el 15 de mayo de 2022 con el Madrid frente al Cádiz. Ha celebrado dianas en Champions, en clásicos pero, ¿el próximo que anote en Liga será el más especial?

– Para mí, el gol que marque en Primera con el Alavés será el más especial por todo lo que he pasado. Y después será el siguiente. Espero que sean muchos. Nunca me he puesto cifras pero me gustaría marcar los máximos jugando el mayor tiempo posible.

Desembarco en Vitoria

– El anuncio de su llegada al Alavés para entrenar causó enorme revuelo. ¿Cómo se gestó?

– Estuve hablando con Sergio Fernández y se dio la posibilidad de venir a entrenar. Fue un honor y lo hice encantado para intentar tener la oportunidad de jugar otra vez en Primera. Los primeros días, en pretemporada, fueron de menos fútbol y más correr, pero fue bonito volver a sentirme futbolista y trabajar en grupo.

– El Alavés ya había intentado ficharle cuando estaba en la cantera del Real Madrid…

– Sí, hubo contactos, pero por circunstancias no se dio entonces y ahora sí que he podido jugar aquí.

– ¿En qué momento pasó a estar a prueba y a tener opciones reales de firmar por el Alavés?

– No es que fuera una prueba. Yo quería ponerme en forma al máximo. El Chacho y Sergio hablaron conmigo y querían que estuviera en el equipo y trabajando en el día a día, con las mismas oportunidades que mis compañeros. Al final, se dio la posibilidad de fichar y yo acepté contento este reto.

Llegada a Vitoria

«Estaba encantado de entrenar, tener la opción de jugar en Primera y volver a sentirme futbolista»

– ¿Tuvo ofertas de otros equipos durante ese periodo?

– Sí, hubo acercamientos de otros clubes, pero no me planteaba firmar por otro equipo. Para nada.

– ¿Siente que el Alavés le ha salvado en uno de los peores momentos de su carrera?

– Es un club que me ha apoyado en un tiempo en el que llevaba bastante sin equipo. También creo que puedo ayudar mucho y por ello estoy muy contento de haber firmado hasta 2027. Es una oportunidad importante tras haber estado un año parado. Es bonito volver a jugar en Primera.

– ¿Cómo hizo durante su año sin equipo para no desconectar?

– Lo único que podía hacer era entrenar todos los días. Buscar la máxima similitud a lo que es trabajar con un equipo. Intentar hacer más porque no tienes partidos. Me levantaba temprano, entrenaba fútbol, cardio o gimnasio y por la tarde hacía lo que no había hecho por la mañana. Trabajaba con mis preparadores y fisios. El objetivo era estar listo para el equipo que me diera una oportunidad.

– El trabajo mental que hizo también fue importante…

– Por supuesto. Lo que hacía era trabajar pensando en el siguiente entrenamiento para cuando llegara el mercado tener esa opción de que un club se fijara en mí. Cuando se abría la ventana me ponía un poquito más nervioso y apretaba más.

Año sin jugar

«Lo único que podía hacer era trabajar y pensar en estar listo para el club que me quisiera fichar»

– ¿Cómo vivió el último mercado de invierno?

– Fue difícil. No sólo ese mercado, sino durante todo el año porque yo podía firmar por cualquier club en cualquier momento. No miraba una fecha concreta y me enfocaba en estar preparado para el día que me llamara un club poder competir desde el inicio.

– ¿Pensó en retirarse?

– No, nunca. Con mi edad no me planteó dejar el fútbol, ni mucho menos. Al contrario, espero que dure. Me siento muy bien y sano. El fútbol es mi vida desde pequeño, no sé hacer otra cosa que prepararme día a día para estar enfocado en lo que más me gusta. Me fui de casa muy joven –dejó el Badalona y fichó por el Real Madrid con 18 años–. Te separas de tu familia y es un cambio brusco, pero vas con un sueño de niño que se ha hecho bastante realidad y que todavía sigo viviendo. Espero que dure y poder seguir agrandando mi carrera.