Sevilla consiguió, justo hace dos años, un hito que parecía impensable. La celebración de la Semana Latin Grammy en su primera edición fuera de los Estados Unidos. Hace un par de meses, la Academia Latina de la Grabación, en colaboración con la Junta de Andalucía, … concluyó su calendario de eventos en la comunidad andaluza con Latin Grammy Celebra: La Música de Andalucía en Sevilla. Han sido casi tres años de una alianza que ha dejado en la comunidad un impacto total acumulado de 195 millones de euros. Manuel Abud, CEO de la Academia, hace balance de esta relación que, según se desprende de sus palabras, no acaba aquí.
-El Estudio de Impacto Económico y Reputacional de la Academia Latina de la Grabación en Andalucía refleja que fue de 195 millones de euros de 2023 a 2025. ¿Es para estar satisfechos?
-Esta probablemente sea más una pregunta para los responsables de la Junta de Andalucía. Pero si me permite, voy a dar un paso atrás. En Sevilla fue la primera vez que sacamos la semana Grammys Latinos de los Estados Unidos. Por lo cual, para nosotros era muy importante realmente saber qué impacto económico esto traía para la ciudad anfitriona. Por eso comisionamos este estudio de un tercero para no ser nosotros ni el propio gobierno quien enviara estas cifras. Dicho esto, esta estrategia de internacionalización de la celebración de los Grammy creo que fue muy exitosa, los números hablan por sí solos. Desde el punto de vista de la academia, ha sido una experiencia maravillosa. Andalucía nos ha tratado increíblemente, nos hemos sentido como en casa estos tres años que hemos estado haciendo cosas y, la verdad, estamos muy contentos, muy satisfechos.
-Sobre todo porque buena parte de ese impacto económico no es directo, sino un impacto en promoción. ¿Cómo se ha tomado allí esta proyección de Andalucía?
-Muy bien, porque al final todo el mundo ganó aquí, o sea, los artistas vivieron una experiencia maravillosa. La experiencia de haber ido ahí, la forma en la que nos enseñó Sevilla, los eventos que hicimos. Yo creo que es un círculo virtuoso, ¿no? En el que el artista está muy contento, es bien recibido, el público también se engancha, hay una generación, por supuesto, económica, pero lo que no refleja ninguno de estos estudios es el sentimiento de orgullo de Sevilla de haber sido la sede de una celebración internacional de música tan importante como la nuestra. Yo siempre digo que es lo más importante, pero eso lo dejo a ustedes.
-Siempre se le ha visto en muy buena sintonía con el consejero de Turismo y el presidente de la Junta de Andalucía. Pero, ¿quién dio el paso para fraguar esta colaboración?
-Fue conjunto. Obviamente, la visión de ellos fue fundamental. Por un lado nosotros teníamos la visión de implementar una estrategia de expansión internacional, de llevar la celebración afuera de los Estados Unidos. Y para eso había que cumplir con varios requisitos. Mi objetivo, mi gran sueño, era que la ciudad se volcara por completo alrededor de nosotros, y en una ciudad más grande corríamos el riesgo de perdernos. Tenía que tener, además, una capacidad hotelera, de recintos, de logística que pudieran recibirnos y, por supuesto, algún nexo cultural o musical con nosotros. Sevilla marca todos los requisitos de esa lista. Y también, aunque el tema es un poco más burdo, pero es una realidad, tenía los recursos. Nosotros somos una organización sin ánimo de lucro que necesitamos que alguien nos auspicie. Cuando hacemos nuestras celebraciones acá en Estados Unidos, tenemos toda una red que nos permite hacerla de una forma muy eficiente. Es una celebración cara. Entonces, necesitas tener quien esté dispuesto a pagar esa cuenta. Por otro lado, no quiero poner palabras en la boca ni del presidente ni del consejero, pero ellos claramente tenían una intención y una visión de exponerse ya en una forma mucho más agresiva en los mercados internacionales, de poner Andalucía en el centro de la discusión musical.
-¿Pero por vuestra parte siempre fue Andalucía la primera opción para sacar los Grammys de los Estados Unidos?
-No, para ser muy franco, esto es algo que vas evaluando. No se trata sólo de tener la plata. Cuando empezamos a hablar con Sevilla, con el consejero y con el presidente, yo lo veía lejano, lo veía difícil. Había demasiados obstáculos y ahí le doy todo el crédito al consejero. Él me decía: «Pero eso lo podemos resolver». Y entonces, de pronto, empezamos a ver más síes que noes. Empezando con cosas tan elementales como los horarios, empezamos a romper mitos, a derribar barreras. Una cosa nos fue llevando a la otra, la voluntad de ambas partes, el respeto de ambas partes. Somos una organización un poquito complicada, somos muy celosos de nuestra marca y de nuestras cosas, somos muy diligentes. Y usted conoce el estilo andaluz, es un poco diferente, no quiero ponerle adjetivos. Entonces, no fue fácil, fue un tema cultural interesante. Pero insisto, con buena voluntad, con respeto, pues se logró algo que desde el punto de vista fue a todas luces exitoso.
-Gran parte del impacto económico ha recaído en Sevilla gracias a la Semana de los Latin Grammy de hace dos años. El propio Ayuntamiento no pensó que fuese ser tanto, se habló de 50 millones y han sido más de 180.
-Sí, es que la magnitud de nuestros eventos es muy importante. Me pasó una cosa muy curiosa con la ciudad. Me decían que Sevilla estaba acostumbrada a eventos como el nuestro, premios fulanos, que si la celebración tal. Y entonces, en un tono simpático decíamos, «ok, ese evento se parece al nuestro, pero hay una gran diferencia, es que todos esos eventos van a suceder a la vez en una semana». El gran reto era que se iban a hacer de domingo a jueves. Entonces se entendió la dificultad logística y de producción a la que nos enfrentábamos.
-Sevilla también se prepara para la celebración del 29, año en que se conmemora el primer centenario de la Exposición Iberoamericana, que une precisamente a los pueblos latinos con Sevilla. También se espera para entonces una gran transformación de la ciudad. ¿Es posible una próxima gala de los Grammy Latinos en Sevilla?
-Por parte nuestra… Nos trataron maravillosamente y fuimos muy felices ahí. Pero eso hay que preguntárselo a ellos. Lo que sí puedo decir es que nosotros estamos activamente conversando con varias ciudades, incluidas ciudades españolas. Lo de Sevilla no fue un día de campo o un experimento único, es parte de una estrategia muy bien armada, con lo cual, verás salir la gala de los Grammy de los Estados Unidos próximamente. Y claro, por supuesto, no se descarta.

-El presidente de la Junta de Andalucía dijo hace apenas dos meses que se estaba trabajando en ello, casi casi lo dio como hecho que volverán, a Sevilla u otra ciudad andaluza.
-Voy a ser muy cuidadoso en lo que digo. Puedo decir que hay conversiones activas, pero no hay nada definido con nadie. Con nadie, porque esto es un proceso complicado. Hoy día estamos enfocados nuestra semana de este año. El año que viene es poco probable, no es imposible, pero es poco probable que regresemos a España sin antes ir a algún país de Latinoamérica. Insisto, no es imposible, pero yo sí creo que, volviendo la pregunta de posibilidades, creo completamente posible que en los próximos 4 o 5 años regresemos a España.
-Para ese año del 29…
-Mire, la verdad es que es muy buen dato.
-De momento, esta relación no acaba. Han sido tres años y aún queda un poco. La semana que viene Andalucía estará presente la celebración de los Grammy como patrocinador. ¿En qué consiste?
-Sí, son los sponsor de la Persona del Año, el andaluz Raphael. Es un hecho que con esta participación de la semana que entra se cierra el ciclo, se cierra la alianza que realizamos durante tres años. Tengo una magnífica impresión de la gestión del presidente. Se nos cumplió con absoluto profesionalismo, se nos cumplió exactamente todo lo que se nos ofreció, pero también nosotros cumplimos con nuestra parte. Entonces, bueno, pues cuando hay una relación así, a ver qué sigue. Como digo, ha dejado un buen sabor de boca.
Yo cada vez que tengo reuniones no paran de hablar maravillas de lo que fue la semana en Sevilla. De hecho, para ser muy franco, había mucho escepticismo cuando anunciamos que íbamos a celebrar en Sevilla la Semana de los Grammy. Y la verdad es que Sevilla por sí sola calló uno a uno a los críticos, porque fue una experiencia que a la fecha me siguen recordando como un éxito. No fue casual, pero logramos que Sevilla fuera un personaje más. La gran diferencia es que Sevilla no es una serie de recintos, es un personaje más de las celebraciones. Y creo que dejó un magnífico sabor de boca en todos los que tuvimos el privilegio de participar.
«Si hiciéramos una segunda semana en Sevilla sería muy parecida. Salió perfecto, pero nos costó mucho»
-¿Y eso ocurre, por ejemplo, en Las Vegas?
-No quiero hablar mal de nuestras ciudades. Pero en Las Vegas no se siente. O sea, tenemos una maravillosa capacidad técnica y logística, los eventos se producen a un nivel extraordinario, pero ese factor, ese sabor andaluz, no se consigue.
-¿Qué mejoraría de Sevilla? Alguna pega tuvo que haber…
-Vamos a decirlo de otra manera, hubo aprendizajes. También nosotros estábamos en la lucha de salir, de producir fuera. Hubo aprendizajes, se lo voy a dejar al consejero para que lo conteste. Si hiciéramos una segunda semana en Sevilla sería muy parecida a la primera. Aprendimos y haríamos algunas cosas de logística, de lo que no se ve. Pero creo que, de lo que se ve, salió perfecto, aunque llegar ahí nos costó mucho. Los aprendizajes son buenos, los capitalizaríamos. Desde el punto de vista de logística, de proveedores, desde el punto de vista de la cultura de negocios.
-¿A qué se refiere?
-La cultura de negocios también fue un aprendizaje, no es que fuera mala, simplemente es diferente. Me refiero a la forma de negociar, los tiempos de negociación. Va a sonar feo, pero somos muy gringos en nuestra forma de trabajo. Fue un choque cultural interesante. Pero no tengo nada malo que decir de ellos, la verdad es que han sido muy profesionales y han estado a la altura.
-Como dijo en la primavera de 2023 durante la presentación de la Semana de los Grammy Latinos, «Sevilla lo reúne todo».
-Sí, esa es la verdad, es una ciudad maravillosa, que además tomó ese protagonismo que no esperaba. Lo que no se ve en ningún estudio económico es esa sensación de la población local de orgullo, de haber recibido a esta marca internacional que además es tan importante en el mundo de la música.
-Quizá, la pega de los sevillanos fue que los eventos estuvieran cerrados, que no pudiéramos participar más.
-Tiene toda la razón, ese es otro de los aprendizajes. A final de cuentas somos un gremio y nuestros eventos son gremiales. Nosotros no hacemos grandes conciertos, es más, los eventos que hicimos en Málaga o hace un par de meses en el Cartuja Center, son eventos un poco fuera de lo que normalmente hacemos. Se plantea una gran pregunta para nosotros de si queremos, si podemos o si debemos, porque ojo, nosotros no somos promotores, no somos organizadores de conciertos. Esa es la parte de lucro de los artistas y de todo un ecosistema que vive de eso y nosotros no venimos con ellos, nosotros nos apoyamos. Entonces, uno de los argumentos es cómo ser, cómo abrir más la participación del público, sin duda.
«La palabra que define a Raphael es resiliencia»
La Junta de Andalucía reafirma su compromiso con la música latina al regresar por tercer año como Patrocinador Oficial de la Recepción de Nominados, la Gala Persona del Año™ 2025 de La Academia Latina de la Grabación, la Latin GRAMMY Premiere, la 26ª Entrega Anual del Latin GRAMMY®, incluida la alfombra roja, y la Fiesta Oficial del Latin GRAMMY. La Persona del Año es el jiennense Raphael. -¿Qué puede decir de la figura de Raphael?-Lo digo en pocas palabras, es un talento sin duda revolucionario, o sea, marcó un estilo. Si me pidieras una palabra para definirlo, diría resiliencia. Es un hombre que no descansa, que no para, que está siempre con un hambre, con una intensidad de llevar su arte a la gente. Es admirable. Y lo que ha influido en las generaciones que lo han visto seguir ahí, es increíble.
– Una de las propuestas que se habló al principio de la colaboración con la Junta fue que la categoría de Grammy Flamenco se diera siempre aquí en Andalucía. ¿Esa puede ser una vía?
-Hemos explorado muchas alternativas, también nos sucede con otras categorías que son muy particulares de una región. Y siempre existe esa dicotomía. Sí, quizá tendría más impacto darlo en Andalucía, pero también le quitaría a los flamencos la oportunidad de estar en Las Vegas o estar en el mapa internacional. Se plantea la duda de si por hacer un bien estás fomentando un aislamiento. Tenemos que ser cuidadosos con eso. Al final, se trata de la celebración de nuestra música, nuestra premiación es global y es incluyente. Creo que hay mayor participación, creo que eventos adicionales como los que hicimos son la solución.

-Y aprovecho esto para preguntarle cómo cree que ha sido la proyección del flamenco en estos tres años de esta relación con la Academia.
-Bueno, yo creo que muy buena. Y vuelvo a lo mismo, para eso está la academia, para seguir fomentando y protegiendo géneros que probablemente a nivel global se salgan del mainstream, pero que es nuestra labor seguir fomentándonos y creo que se ha logrado esa lucha, es una asignatura completada, porque es un proceso continuo.
-Y en general, ¿qué visión hay de la música española? ¿Qué lugar ocupa la música española dentro de la música latinoamericana?
-Hay que ser cuidadoso de no favorecer a una región más que a otra, aunque obviamente aquí estamos hablando de España. Es innegable el legado cultural y de influencia de la música y de los músicos españoles. Seis personas del año de la Academia de la de la Grabación eran de España. Junto con México, el país que más ha tenido. Entonces, me remito a los hechos. Es innegable y creo que además los nuevos talentos españoles también tienen una gran posibilidad y gran presencia.
-Pero la música española se distingue de la latina, que es la que hoy domina.
-No, mire, un fenómeno que es innegable es que sí hay ciertos artistas superglobales, pero también el consumo se ha vuelto muy geolocalizado. Si ve las listas de popularidad de España, de México, de Colombia y de Argentina, son muy diferentes, o sea, salvo dos o tres artistas que de alguna manera son mucho más globales. Entonces, nuestra función es no particularizar sino ser incluyentes y creo que además hay otra cosa, la discusión de qué es música latina y qué no, puede puede llevarnos aquí todo el día y yo trato de simplificar. La Academia Latina de la Grabación reconoce música en español, portugués, lenguas originarias de la región. Eso es lo que nosotros celebramos. Insisto, la definición de música latina se la dejo a los expertos y será diferente para cada quien.