Tantos años de derrotas acumuladas, hasta catorce desde 2011, una sequía interminable en clave nervionense en la dársena del río, acabaron con el estallido de una victoria liberadora celebrada por los remeros del Sevilla cantando la letra del himno de El Arrebato en el … pantalán de Río Grande, donde se procedió a la entrega de trofeos. Del famoso ‘Cocodrilo’ que los sevillistas no elevaban al cielo desde 2010. Se reunieron para festejar las dos tripulaciones absolutas del Sevilla, aunque la femenina no había podido un año más con la verdiblanca. No importó. Los chicos reclamaron a sus compañeras en la celebración.
Así, con una victoria liberadora de los sevillistas, se bajó el telón de la 59ª edición de la clásica hispalense, que esta vez finalizó a la altura de la Torre del Oro, junto al Puente de San Telmo. Con Jacobo Castiñeira al timón, el Sevilla conquistó su 31º triunfo con la marca de Jorge Flavio Knabe, Jaime Canalejo, Antonio José Díaz, Juan Miguel Palomino, Julio Casielles, Patricio Rojas, Ramón Palomino y Alejandro Vera. Del lejano triunfo de 2010, con final en el CEAR de la Cartuja, sólo continuaban en el barco Canalejo y Rojas, que habían sufrido y encajado muchas frustraciones en todo este imponente ciclo ganador del Betis.
Canalejo, que convive todo el año con el marca verdiblanco, Javier García, en el dos sin timonel español, se casó hace unos días con la remera internacional malagueña Natalia de Miguel y aplazó la luna de miel hasta que concluyera el derbi. Ahora podrá disfrutarla por partida doble, con la alegría añadida por el triunfo en una regata muy competida y reñida hasta después del paso por el Puente de Triana, cuando el Sevilla aceleró definitivamente para sacarle a su poderoso rival la ventaja suficiente que descerrajaba las puertas de la anhelada victoria en el Puente de San Telmo. Hasta ese desenlace, tensión, emoción a raudales, remadas limpias, deportividad, esfuerzos superlativos de las dos tripulaciones y duelo al sol en la estrategia de los dos expertos timoneles, Jacobo Castiñeira y Tomás Jurado.
Tomás Jurado, timonel verdiblanco, felicita al barco sevillista por la victoria
MARÍA GUERRA
Igualdad extrema
Hubo ya nervios al inicio, incluso para equiparar a los barcos en la salida. Un laborioso proceso que se estiró mas de lo habitual. Con cinco minutos de retraso sobre la hora fijada arrancó una regata muy igualada al inicio, con el Sevilla virando a estribor para salvar la dificultad de la curva a la derecha que conduce al CEAR y al Puente del Alamillo. La igualdad era extrema por entonces, con cada bote en su calle, sin temor por el choque de palas, con la suficiente distancia entre ambos para que no hubiera roces indeseables. Le enseñaba el Sevilla la proa a su rival, pero el Betis aumentó su ritmo de palada para restablecer la igualdad.
No se quería quedar el bote heliopolitano y ya se sabe que la embarcación verdiblanca tiene mucha facilidad para cambiar de marcha. No es la primera vez que se veía por detrás a esas alturas de la Regata, muy limpia. El equilibro era absoluto cuando ambos barcos enfilaban poco a poco a babor en el Puente del Alamillo y el Betis adquiría ventaja. Aumentaba su cadencia y Tomás Jurado maniobraba para tratar de ganarle la calle antes de la llegada a Chapina. Había margen y los verdiblancos tenían ya casi medio barco de ventaja.
Aguantaba el Sevilla, vaciándose en la remada para no descolgarse mientras se afanaba en defender la teórica ventaja que le proporcionaba la ribera izquierda del río. Ahí estaba la clave. Ahí y en sus resistencia. Se abría un poco el Betis y el Sevilla recuperaba terreno suturando la ventaja de su rival. Otra vez las dos embarcaciones niveladas en un pulso de alto voltaje, de mucha emoción. El Sevilla le aguantaba el pulso a su adversario y no se cerraba en la llegada al viraje de Chapina para alejar al Betis de sus intenciones. Pura estrategia.
A partir de ahí, un esprint a toda máquina de las dos embarcaciones. El Sevilla le sacó casi un barco cruzando el Puente de Triana y esa ventaja aumentó un poquito más hasta que el Betis, sin rendirse ni aflojar en ningún momento, sucumbiera quince años después, cuánto tiempo ha pasado, ante la tripulación nervionense. El Betis, que hizo una excelente regata pese a la derrota, bogó con Javier García como marca, Bruno Eder Blanco, Gonzalo García, Álvaro Gutiérrez, Francisco Figueira, Carlos González, Emilio Fernández y Daniel Gutiérrez.
La tripulación femenina del Betis, celebrando la victoria con el trofeo de Veredas López
maria guerra
Choque de palas en la femenina
En la regata absoluta femenina tampoco hubo sorpresas, aunque sí polémica. El arranque fue parejo, como se esperaba, con el Sevilla virando a estribor, hacia el centro de la dársena, para tomar en mejor situación la larga curva a la derecha que acaba en el CEAR. Se tuvo que abrir Fernando Cano, el timonel verdiblanco, para evitar la colisión de las palas, aunque el Betis en seguida tomó ventaja, quizá demasiado rápido, de medio barco ya al alcanzar el Puente del Alamillo. Tenía al principio mas cadencia el Betis, más ritmo de palada, y las verdiblancas ya amagaron con abordar la calle del Sevilla, que hacía lo posible por mantenerse en paralelo a su rival. Cerraron esa pequeña brecha las nervionenses, que apretaron y mucho. Reaccionaron y de qué manera. Recuperaron metros y se restableció la igualdad hasta el punto de que aventajaron ligeramente al Betis, enseñando la proa.
Hubo entonces un choque de palas muy evidente, pero el juez-árbitro, David Galisteo, no detuvo la prueba, el Sevilla se frenó claramente y el bote verdiblanco, al contrario, aprovechó para demarrar. Ahí se rompió la regata. Fue su punto de inflexión. Y, aun con muchos metros por delante hasta la meta, prácticamente se acabó. A la llegada a la Barqueta, con 2.600 metros recorridos, el Betis ya le sacaba un barco a su rival y estaba en disposición de virar a babor para colocarse por delante del Sevilla y afrontar la curva de Chapina con absoluta ventaja.
El timonel sevillista también escoraba el bote hacia el margen izquierdo, pero el Betis le había ganado la posición, ponía agua sucia de por medio y poco a poco dificultaba cada vez más la remada de su oponente. Psicológicamente, esa sensación es durísima para el barco que va por atrás y ha perdido la referencia de su rival. La diferencia, de dos barcos a la altura del Puente del Cachorro (4,4 kilómetros), era ya insalvable y se ampliaría por mucho que el Sevilla siguiera apretando y no bajase los brazos aunque realmente no tuviera opciones, como siempre pasa cuando los barcos se alinean. Ya había bastante público tanto en el Puente de Triana como en el Paseo Marqués de Contadero y el Betis cerró el triunfo, junto al Puente de San Telmo.
Las verdiblancas sumaron su octava victoria seguida con Paola Alonso de Caso (marca), María Jesús Gómez, Ana Navarro, Teresa Sánchez-Lanuza, Esperanza Márquez, Laura Montes, Julia Gelart y Estefanía Montilla en la proa, timoneando Fernando Cano. El Sevilla, con Hugo Díaz al timón, remó con Lidia Florido (marca), Amanda Gil, Rocío Laó, Inmaculada Rius, Ángela Borreguero, María Navarro, Clara Vázquez y Nuria Barrios en la proa. En esta categoría, el balance se queda en 15-21 a favor del Betis.
Veteranos y aspirantes
La jornada sabatina se inauguró con la tercera victoria de las veteranas remeras sevillistas sobre las verdiblancas para colocar el 3-1 en la general. El ocho del Sevilla lo integraron Laura Clavijo (marca), Beatriz Casanueva, Laura Fernández, María Russo, Encarnación Polvillo, Ana Malasaña, Esther Fernández y Marta Aristoy (proa), con Esther Pérez al timón. En veteranos, en cambio, volvió a imponerse el Betis, como ya es costumbre, encadenando su sexta victoria seguida y consolidando su manifiesto dominio en el cómputo global (7-23). La tripulación bética la formaron Gabriel Centeno (marca), Laude Óscar Díaz, José María Claro, Javier Márquez, Nicolás Martín, José Enrique de Vera, Francisco Navarro y Luis Juan de Lara, con Julia Márquez al timón.
También se impusieron las aspirantes femeninas del Betis (balance 2-2), y de manera clara, en un ocho integrado por Cristina Pastor (marca), Lucía Ruiz, Estela Díaz, Reyes Ramos, Ángela Montilla, Alejandra Vázquez, Noa Rodríguez y Lucía Camacho, con Julia Márquez de timonela. En la categoría de aspirantes masculinos, la victoria se la apuntó el Sevilla con un gran esprint final, para igualar la general (20-20), con una tripulación formada por Iker Castiñeira (marca), Juan Jesús Ortega, Pablo Sánchez, Salvador Serra, Manuel Cruz, Rafael Gómez, Jesús Hermosilla y Alfonso Moreno (proa), con Paula Márquez al timón.