El tenista Jaume Munar y su novia, la fisioterapeuta María Prieto, se han dado el ‘sí, quiero’ este sábado en una romántica ceremonia en Mallorca. La pareja celebró su boda en Pollença, donde vivieron este día tan especial junto a sus familiares y amigos, momento que ambos han compartido en sus redes sociales. El lugar escogido para el enlace fue la bodega Can Axartell, una bonita finca con viñedos, olivares, bosques, montañas y cursos de agua ubicada en el Camí Vell de Pollença. Un espacio con historia, ya que esta finca fue redescubierta en la década de 1990 y ha sido restaurada.

Para la ocasión la novia lució un vestido blanco de manga larga con la zona de los hombros abullonada, una apertura en la espalda, larga cola y dos telas que salían de los hombros a modo de capa. Respecto al cabello, se decantó por un semirecogido con la mayor parte de la melena suelta con ondas. El novio, por su parte, apostó por un chaqué en azul con chaleco en gris perla, corbata en azul claro, camisa blanca y zapatos de cordones en marrón. Dos opciones clásicas pero con estilo, perfectas para disfrutar de un día único.

Tal y como ha publicado la propia pareja, el enlace estuvo organizado por Clara Brunet Studio, que se encargó de todos los detalles, con la colaboración de Adiamore Floral Design y Otro Cantar Decoración. Respecto al catering, este corrió a cargo de Jardín Events, que ofreció un variado menú en el que los comensales pudieron degustar platos tan sabrosos como langosta a la parrilla con huevos fritos y patatas. El maestro de ceremonias de la boda fue un rostro muy conocido en la isla: Toni Pons Vera. El actor ha reenfocado su carrera y ahora también oficia ceremonias, eventos en los que siempre consigue sacar una sonrisa tanto a los invitados como a los novios con su humor y espontaneidad.


Imagen compartida por una de las asistentes a la ceremonia en redes sociales.

Tras la ceremonia y el sabroso banquete, llegó el momento del baile con el grupo Isla Paradiso y el DJ Paco Colombás. Una celebración en la que no faltaron los tradicionales manteos a los novios y los bailes con sus grupos de amigos con divertidos complementos como gafas de fiesta, pelucas y luces. Un día en el que se celebró el amor y que seguro no olvidarán ni los novios ni los invitados. Esta fiesta ha tenido lugar tan solo un mes después de que Jaume Munar perdiese ante el ruso Daniil Medvedev, antiguo número 1 del mundo, en el Masters 1.000 de París.

Eso sí, el tenista se muestra optimista con su trayectoria profesional: «Está siendo una temporada muy positiva, me estoy encontrando muy bien. Creo que a nivel tenístico he mejorado en muchísimos aspectos mucho. Al final la madurez también de tener ya 28 años, de llevar los años que llevo en el circuito, pues todo ese global se va acomodando poquito a poco y cada vez me siento mejor jugador de tenis». Ahora, tras pasar por el altar, el mallorquín y su mujer podrán disfrutar de unas semanas de desconexión en su luna de miel.