La operación salida en la Real Sociedad, con descartes como Umar Sadiq y Carlos Fernández en el foco, debe tener también una parada obligatoria en el lateral derecho. El buen hacer de Rupérez en esta pretemporada (anotó el gol en el empate ante el Rennes de este pasado sábado) eleva a cuatro el número de jugadores en dicha posición, donde Sergio Francisco confiará como titular, a priori, en Aramburu. Inicialmente, la idea era buscar una solución a la situación de Odriozola, pero la dificultad de esa misión (tiene cuatro años más de contrato) ha provocado que en los últimos días gane fuerza la marcha del lateral que resta: Hamari Traoré.
Desde Francia se ha apuntado que existe un acuerdo total con el Paris FC para traspasar al defensor maliense, que solo tiene una campaña más de vinculación por delante. Tras sufrir una rotura de ligamentos cruzados a comienzos del pasado curso, el club donostiarra tuvo el gesto de hacer valer el año opcional que tenía y lo renovó en enero hasta 2026. Pero tras una temporada prácticamente en blanco, en la que disputó 759 minutos repartidos en 13 choques, a nadie escapa que el africano tendrá muy difícil ganarse un sitio ante la elevada competencia existente.
La Real Sociedad le dice adiós 
Fuerte apuesta por Hamari Traoré
El gesto de la Real Sociedad con Traoré
A sus 33 años, el conjunto de la capital gala, recién ascendido la Ligue 1, le ofrece un contrato largo parea convertirlo en uno de sus pilares. Además, es un club que conoce de sobra, pues fue en el que desembarcó en Europa en 2012 para militar una campaña, pasando luego por el Lierse belga, el Stade Reims y el Rennes, desde donde llegó libre a la Real Sociedad en 2023. Pero Traoré se lo está pensando.
El Paris FC tantea otra alternativa: Héctor Fort
La pelota está en su tejado, pues desde Anoeta ven con buenos ojos su salida. Pero la falta de noticias ha provocado que en las últimas horas haya surgido la opción del también lateral diestro Héctor Fort, sin sitio en el FC Barcelona, que podría llegar cedido al cuadro parisino.
Mientras tanto, la respuesta de Traoré es la del máximo compromiso, dentro y fuera del campo. Este pasado sábado, ante el Rennes, no tuvo minutos y se limitó a realizar ejercicios de calentamiento, pero aprovechó para ejercer como todo un capitán y facilitar la integración del recién llegado Caleta-Car, que tampoco pudo jugar. Durante todo el partido, se le vio charlar de forma animada con el central croata en el banquillo, aparentemente en inglés, dando un nuevo ejemplo de compañerismo que le hace ser uno de los jugadores más queridos del vestuario.