Era el secreto mejor guardado… Hasta hoy. SUR les muestra en exclusiva la primera imagen del nuevo diseño de la Torre del Puerto de Málaga … , proyectada por el estudio internacional de David Chipperfield.
Los promotores del hotel de gran lujo previsto en el dique de Levante: el grupo Hoteles Hesperia junto con el fondo Al Alfia, de Catar, presentarán el próximo lunes, 17 de noviembre en el edificio del antiguo Instituto de Estudios Portuarios (actual sede de la UNIA), los detalles del rascacielos y de la intervención para la reforma integral del paseo de Levante, ambos proyectados por el estudio internacional de David Chipperfield. En el encuentro participarán los promotores y el equipo técnico responsable del mismo.
Este paso se produce una vez que la Autoridad Portuaria de Málaga le ha dado el visto bueno al expediente en toda su extensión, y lo ha remitido a Puertos del Estado (organismo superior, dependiente del Ministerio de Transportes) para que a su vez determine su validez legal. En última instancia, en caso positivo este organismo será el encargado de elevarlo a la mesa del Consejo de Ministros para su aprobación definitiva. En todo caso, antes de que este paso se pueda producir, se tendrán que resolver los dos recursos Contencioso-Administrativos que se están dirimiendo en los juzgados.
Del edificio que ha dibujado el premio Pritzker (Nobel de la arquitectura), ya se sabe que tendrá una estructura rectangular, muy sencilla y estilizada. Esta ascenderá hasta los 144 metros de altura (unas 35 plantas) y albergará entre 350 y 390 habitaciones tipo suites. Como característica fundamental, además de su fachada acristalada destaca la gran terraza-jardín en la cubierta, que será la parte más emblemática y una de las principales características de su diseño.

Imagen panorámica del diseño

Un nuevo centro urbano
En realidad, en la nueva propuesta que está sobre la mesa, y que ya tiene las bendiciones del Puerto y del Ayuntamiento de la capital, el rascacielos forma parte de una intervención urbana más amplia. El proyecto de Chipperfield propone remodelar a lo largo y ancho todo el dique de Levante, con jardines y nuevos usos, abiertos a todos los ciudadanos, y un centro de convenciones con capacidad para 2.000 espectadores.
El centro de convenciones tendrá capacidad para 2.000 espectadores, y el proyecto prevé dotar de uso ciudadano a todo el dique de Levante
Como el autor confesó en febrero, cuando se hizo la primera presentación de la propuesta, todavía incompleta: «El foco del proyecto, la misión principal es el hotel y el centro de congresos. Pero la verdadera oportunidad es transformar el muelle y la plataforma en parte de la ciudad, atraer esa parte del territorio a la ciudad. Y creemos que el hotel y el centro de congresos puede ser el catalizador».
«El proyecto tiene una parte más vertical, que es la que podría atraer inicialmente la atención, pero para nosotros es igualmente importante toda la parte horizontal, el programa público que se abre a los ciudadanos. Hasta ahora ha sido una zona industrial, y creemos que es una gran oportunidad para incorporarlo al tejido de la ciudad». El actual paseo de Levante se convertirá en una zona ajardinada y estará equipada con zonas de estancia, miradores hacia el mar y la ciudad y pérgolas fotovoltaicas. «Es una transformación total de un espacio industrial a urbano».
Los nuevos espacios ciudadanos tendrán usos comerciales y otras partes abiertas y de ocio, no solo para los clientes del hotel. De estas, la pieza principal será el centro de convenciones, «que es una infraestructura con la que hoy en día no cuenta la ciudad y que le va a permitir competir en el negocio del turismo de convenciones con las grandes ciudades internacionales», indicó entonces Jordi Ferrer, el consejero delegado de Hoteles Hesperia.
Luz verde al proyecto
Ya en fechas recientes, el máximo responsable del grupo promotor del hotel-rascacielos ha celebrado la decisión del consejo de administración de la Autoridad Portuaria de dar luz verde al proyecto, que considera «un hito clave» tras casi una década de tramitación. «Que el puerto de Málaga haya decidido tirar para adelante es una apuesta estratégica para consolidar una inversión de primer nivel», ha destacado el consejero delegado de Hoteles Hesperia. «No hay en España un proyecto de estas dimensiones en la industria hotelera. Es una inversión estratégica para Málaga, pero también para el país».
Ferrer ha puesto de relieve además el valor arquitectónico y urbano de la propuesta diseñada por el británico David Chipperfield, premio Pritzker de arquitectura, a quien calificó como «una elección acertada por su visión sostenible y su compromiso con la integración urbana». «Chipperfield insistió desde el primer día en que quería hacer un proyecto para la ciudad, que recuperara una zona en desuso del puerto y creara nuevos espacios verdes y abiertos al público. Su diseño integra de forma natural la ciudad y el mar».
Además, ha insistido en que la torre «no compite con la ciudad», sino que «embellece su skyline». «La altura no es un gesto de protagonismo. Está dentro de los parámetros urbanísticos aprobados, y lejos de competir con Málaga, la proyecta internacionalmente». Además, ha recordado que el edificio se ubicará en el extremo del puerto, «alejado del casco histórico», y contribuirá a revitalizar un espacio «en desuso».
¿Qué falta para terminar la tramitación del proyecto?
Desde finales de octubre, el expediente del hotel previsto en el dique de Levante está en manos de la entidad Puertos del Estado, dependiente del Ministerio de Transportes del Gobierno central. En aquellas fechas, la Autoridad Portuaria de Málaga validó íntegramente el expediente de la propuesta del arquitecto David Chipperfield, por encargo del fondo catarí Al Alfia y Hoteles Hesperia, y lo envió a este organismo estatal para continuar con su compleja y dilatada tramitación.
Los técnicos de la institución marítima han hecho un análisis de cumplimiento de la normativa en todos sus ámbitos: urbanística, medioambiental, de movilidad y portuaria, así como las propuestas técnica y económica. La propuesta se presentó por parte de los promotores privados en marzo de 2025, y la tramitación por parte de los técnicos portuarios comenzó algunas semanas después, por lo que se prolongó aproximadamente durante unos seis meses.
«El proyecto cumple los parámetros de la concurrencia de proyectos que se convocó en su día, y está dentro de los límites del Plan Especial de 2025, de la Declaración de Impacto Ambiental de 2023 y de toda la normativa exigible. Por eso, le damos el visto bueno y lo mandamos a Madrid», declaró entonces el presidente del Puerto, Carlos Rubio.
Por lo tanto, ahora tendrán que ser los servicios jurídicos de Puertos del Estado los que deberán informarlo, comprobar por su parte que la iniciativa se ajusta a lo previsto por la legislación. Finalmente, si obtiene el visto bueno de este organismo, este mismo ente será el responsable de elevarlo al Consejo de Ministros, para recabar la luz verde definitiva.
Sin embargo, el ministro de Transportes, Óscar Puente, puso de relieve en el foro organizado por SUR en Málaga el pasado julio que esta tramitación no se iba a llevar a cabo hasta que haya un veredicto definitivo sobre los dos recursos Contencioso-Administrativos que se han presentado, por parte de la plataforma ciudadana Defendamos nuestro horizonte y la Academia de Bellas Artes de San Telmo.
De manera que el proyecto queda sujeto ahora a los resultados de ambos recursos, por lo que serán los tribunales los que marcarán los tiempos para los siguientes pasos. En ambos casos, todavía les quedan muchos meses por delante hasta que se conozca la decisión del juez.