En agosto, Pierre Oriola decidió dar un paso importante en su carrera y en su vida. Después de muchos años en el baloncesto europeo, sobre todo en España, optó por iniciar una nueva aventura fuera del Viejo Continente. Cruzar el charco y probar suerte en otro ambiente. Y así fue como fichó por el Fuerza Regia, equipo de la Liga mexicana, y se ha proclamado campeón.

El equipo de Monterrey derrotó a los Diablos Rojos de Ciudad de México (84-74) en el quinto partido de la serie para acabar ganando la final por 4-1. Es el octavo título en la carrera de Oriola, que tuvo una buena actuación con 8 puntos y 10 rebotes en más de 20 minutos en pista. Es su tercera liga después de ganarla con el Valencia Basket (2017) y el Barça (2021).

«He intentado dar el máximo desde el primer día. No fue fácil. Vine aquí a vivir una experiencia y la verdad que han sido tres meses brutales, con un grupo humano que desde el inicio me ha acogido con los brazos abiertos. No me fue fácil al principio, porque es una liga muy física, pero gracias a los compañeros y al entrenador pude hacerme un hueco y ser importante en toda la serie de playoff», comentó Oriola después del encuentro.

Durante sus declaraciones, fue interrumpido por su propio entrenador, Pablo García, que no dudó en elogiar su contribución. «¿Habéis visto los minutos de Pierre cuando peor estaba el partido? Esa es la garra española, un ganador. ¡Campeón del mundo!», declaró efusivo el técnico, mientras le echaba una bebida por encima a su jugador.

«Es mi ADN lo que me ha permitido estar durante 16 años en la élite y ojalá pueda estar algunos años más. Me encantaría estar el próximo año, pero todavía no lo sé. Hay que pensar en el día a día y no en el futuro. Ahora me gustaría estar con mi familia y acabar la temporada en España, y si la próxima tengo la oportunidad de poder volver, no dudéis de que lo voy a hacer», finalizó el jugador nacido en Tàrrega. El catalán se ha tatuado incluso un sombrero mexicano y dos chiles.