Al poco de ser una celebridad, Oscar Isaac decidió arrimarse a Disney e ir reforzando su conexión con el público. Fue así como interpretó a uno de los personajes más carismáticos de la trilogía de secuelas de Star Wars que se desarrolló entre 2015 y 2019: el rebelde Poe Dameron. Desde que dicha trilogía concluyera los fans han sido muy vocales con sus deseos de que Isaac vuelva a pasearse por la galaxia, pero han sucedido muchas cosas en los últimos años. Entre ellas, un nuevo contrato con Disney.

En 2022 Isaac protagonizó Caballero Luna, una de las series más inclasificables de Marvel. Tan inclasificable como para que ahora mismo esté prácticamente descartado que Isaac retome su personaje en algún punto, estando el actor ocupado con otros proyectos más apetecibles. 

Por ejemplo la última adaptación de Frankenstein a manos de Guillermo del Toro, que Isaac ha protagonizado en el papel homónimo. Durante la promoción del film se le ha preguntado, como en tantas otras ocasiones, por las posibilidades de que en algún punto vuelva a Star Wars.

Esta vez la respuesta de Isaac ha tenido bastante miga. Así que dice que no le importaría recuperar el papel de Poe Dameron, pero sí le importaría algo más las condiciones en que se encontrara a Disney. 

“Sí, estaría abierto a ello, aunque ahora mismo no tanto a trabajar con Disney. Si logran no sucumbir al fascismo entonces sí, podríamos hablar de una galaxia muy lejana. O de cualquier otra cosa”, ha asegurado en una entrevista con GQ.

Isaac se refiere, evidentemente, al viraje de los últimos meses, cuando Disney no ha dudado en doblegarse ante Donald Trump. Ya fue sintomático lo poco que tardó en editar los disclaimers de los contenidos de Disney+ que avisaban del racismo o machismo de películas antiguas, pero lo de Jimmy Kimmel fue mucho más sonado. El humorista vio cómo su late night era suspendido tras haber hecho un chiste sobre Charlie Kirk, el portavoz MAGA que fue asesinado en  septiembre.

La suspensión vino por parte de la cadena ABC, que resulta ser propiedad de Disney. Así que, en el debate sobre la libertad de expresión que sucedió posteriormente (y antes de que el programa de Kimmel volviera a emitirse), se convino a señalar a Disney como uno de los grandes enemigos de este derecho. Si continúa en esta senda, Isaac prefiere que nadie le espere en Star Wars o en el Universo de Marvel.