Aunque esta noche todas las miradas y, por supuesto, todos los focos de la gala de los Latin Grammy 2025, que se celebrará en el MGM Grand Garden Arena de Las Vegas (EEUU), estarán puestos en artistas como Bad Bunny, que lidera las nominaciones de la edición número 26 de los galardones de la Academia Latina de la Grabación con 12 candidaturas, Bunbury, que recibirá el galardón a la Excelencia Musical por su impecable trayectoria, o Raphael, que recibirá uno de los grandes premios de la noche, como lo es el de Persona del Año, lo cierto es que, entre la larga lista de nominados, se encuentra una compostelana dispuesta a hacer historia y alzarse con uno de los famosos gramófonos. Su nombre: Isabel Dobarro.

Nacida en Santiago en 1992, Dobarro es una de las pianistas españolas con más proyección internacional de su generación. Prueba de ello, en 2021 recibió el VIII Premio Mujeres a Seguir en el apartado de Cultura. No ha sido el único galardón obtenido a lo largo de su carrera musical, la cual compagina con su profesión de abogada. Una trayectoria artística que comenzó a muy temprana edad, a los tres años. Fue entonces cuando comenzó a aprender los entresijos de un instrumento tan complejo como lo es el piano, justo un año antes de dar su primer concierto. De ello tienen mucho la culpa sus padres, que le animaron a dar sus primeros pasos en la música clásica llevándole desde muy pequeña al Auditorio de Galicia a escuchar conciertos.

Desde entonces, Dobarro ha ido ampliando sus conocimientos musicales en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid, donde, en 2010, obtuvo el Título Superior de Piano, y en la Universidad de Nueva York, en la que, en 2012, finalizó un máster de Música mientras mostraba su talento dando recitales en las más prestigiosas salas de conciertos norteamericanas, como Carnegie Hall, Steinway Hall, Yamaha Center, Liederkranz Foundation, Frederick Loewe Theater y Columbia University Faculty House. También fuera de EEUU en lugares como el Moscow Tchaikovsky Conservatory, el Ateneo de Madrid o la Sala Arturo Benedetti Michelangeli, en Bolzano (Italia). Todo ello al mismo tiempo que se graduó en Derecho por la UNED y obtuvo un certificado en Relaciones Internacionales por la Universidad de Harvard.

Visibilizar a las compositoras

A día de hoy, Isabel Dobarro ejerce como abogada en Madrid, pero en paralelo continúa desarrollando su música, una música muy comprometida con el repertorio de otras compositoras desde que, a sus 19 años, impartiendo clases como profesora en la Universidad de Nueva York, un alumno le preguntó si no había obras de compositoras que pudiese tocar. Aquella cuestión resultó ser un shock para ella, no solo porque nunca se la había planteado, sino porque se dio cuenta de hasta qué punto llegaba la invisibilización de las mujeres en la música.

Desde ese momento, Dobarro ha llevado a cabo muchas investigaciones, tanto históricas como contemporáneas, las cuales se reflejan a la perfección en Kaleidoscope (Naxos-Grand Piano), su primer disco en solitario, el cual fue publicado el pasado año. Con él, a pesar de las dudas iniciales, continúa su labor de dar a conocer a mujeres compositoras y ofrecerles un lugar en la historia.

Dobarro tenía mucha confianza en este trabajo, pero, para ella, el resultado final ha superado con creces cualquier cosa que pudiera soñar, y es que su primer disco en solitario le permite esta noche soñar con alzarse con el Latin Grammy en la categoría de Mejor Álbum de Música Clásica, categoría en la que fue nominada el pasado mes de septiembre y cuya candidatura le pilló comiendo junto a las personas que le han hecho ser quien es a día de hoy, su familia, quien sin duda le apoyará en la que será una de las noches más importantes de su vida.

Dobarro es consciente de la dificultad de conseguir el famoso gramófono, más si cabe teniendo que entre sus competidores se encuentran artistas de talla mundial, pero, gane o pierda, esta compostelana ya se toma su nominación a los Latin Grammy como un auténtico premio.