Los trabajos para instalar una escultura dedicada a María Pacheco, la ‘Leona de Castilla’, han comenzado ya en el entorno del Alcázar de Toledo, justo frente a la puerta de la Biblioteca regional, en la confluencia entre la Cuesta de Carlos V y la … Cuesta de los Capuchinos.
La intervención ha arrancado con la colocación de la base circular que sostendrá la peana sobre la que se asentará la figura en bronce, obra del escultor toledano Julio Martín de Vidales, autor también de la escultura de Juan de Padilla situada en la plaza que lleva su nombre y donada en su día por la Fundación Soliss.
La instalación de este monumento, iniciativa en la que han colaborado el Ayuntamiento de Toledo, la Junta de Comunidades y el las Cortes regionales, culmina un proceso que se inició hace más de cinco años.
En 2020, el grupo municipal socialista impulsó una moción para «recuperar y hacer justicia» a la figura de María Pacheco mediante una escultura que actuara como recuerdo permanente de «su tesón y de su lucha contra la injusticia y por la igualdad y la libertad». La propuesta salió adelante con 16 votos a favor (PSOE, Ciudadanos e IU), 6 abstenciones del PP y el voto en contra de Vox, aunque su materialización se ha demorado hasta ahora.
Por esas fechas también, motivo de la celebración del V centenario de la Guerra de las Comunidades (2020-2021), el presidente de las Cortes, Pablo Bellido, anunciaba que el Parlamento autonómico financiaría la escultura de María Pacheco como parte del reconocimiento institucional a la protagonista más destacada de aquel de un levantamiento que en parte tuvo su origen y su epílogo en Toledo.
«Muchas de las ciudades que se levantaron están ahora en Castilla-La Mancha» y, además, «la comunidad toma este nombre por las propias Comunidades de Castilla y la Junta lo es también por la Junta de los comuneros que va a ver a la Reina Juana I para intentar cambiar el curso de la historia», aseguraba en su día Bellido.
Desde entonces se han sucedido y descartado algunos bocetos -como el de una escultura ecuestre de María Pacheco– hasta llegar a la pieza definitiva que será instalada antes de que acabe el año y que servirá de acto de reparación y memoria pública a una de las mujeres que la historia ha querido borrar. Cinco siglos después de la derrota comunera en Villalar, el nombre de Carlos V y la figura de María Pacheco convivirán en un mismo espacio.