La Plaza Mariano Granados de la capital acoge este fin de semana la cuarta edición de la Feria del Vino, un evento organizado por la Diputación Provincial de Soria. Siete bodegas del ámbito rural se han dado cita para exhibir la calidad de la Ribera del Duero soriana en una jornada que este año destaca por su marcado carácter solidario, al destinar todos sus beneficios a la protectora de animales Redención. Han participado las bodegas Hispano Bodega, Bodega Vildé, Castillejo de Robledo, Rudeles, Valdefradas, Quinta Vendimia y Terraesteban.
El presidente de la Diputación, Benito Serrano, ha sido el encargado de inaugurar la feria, subrayando el compromiso de la institución para «mostrar nuestros productos, mostrar productos de toda la provincia«. En esta edición, además de los vinos, se pueden degustar otros manjares como el torrezno, el queso de Oncala, las patatas de vieja o las croquetas de Tierra de Fronteras. Serrano ha puesto en valor el papel fundamental de estas empresas, muchas de ellas proyectos familiares, que «proporcionan desarrollo en nuestros pueblos, que fijan población» y que trabajan por «posicionar a nuestra provincia en el top de los vinos de España y vinos internacionales«, creando futuro y desarrollo en el mundo rural.
La principal novedad de este año es su vertiente solidaria, ya que la recaudación obtenida por la venta de tickets para las copas y los productos, aportados por la Diputación, se cederá íntegramente a la asociación Redención. Su presidenta, Lili, ha agradecido enormemente la iniciativa, que supone una ayuda «fenomenal» para la protectora, que cumplirá 25 años en enero, y ha animado a los sorianos a adoptar o hacerse socios. Los asistentes pueden adquirir sus tickets en dos casetas habilitadas en la entrada de la plaza para después degustar una amplia variedad de vinos, con precios que oscilan desde un euro hasta los 4 euros en función de la calidad y crianza de los vinos, abarcando desde caldos del año hasta reservas y grandes reservas.