No le es difícil a Yvonne Ejim (Calgary, Canadá, 2003) integrarse en un equipo. La jugadora del IDK tiene once hermanos, repartidos por todo el … mundo, de los cuales seis de ellos juegan o han jugado de forma profesional al baloncesto. «El equipo es también como mi familia», dice este proyecto de gran jugadora, que ha empezado a mil por hora la liga, como el propio IDK. Enamorada de Donostia desde que lo pisó el primer día, se encuentra ahora concentrada con la selección de Canadá.

– ¡Vaya inicio de campeonato!

– Bueno, ¡eh? La verdad es que lo estamos haciendo muy bien, es maravilloso. Estamos jugando muy bien todas juntas, muy alineadas en los partidos, lo que hace que sea más fácil jugar con las compañeras. Por ahora está saliendo todo muy bien.

– ¿Igual las debutantes en la liga pensaban que iba a ser sencillo ganar al Perfumerías y al Jairis en su pista?

– No, no, ya nos habían dicho que eran dos equipos muy duros y muy buenos. Puede que precisamente el hecho de que sea nueva en la liga, haga que me tome los partidos sin prejuicios anteriores. Sé que tiene mucho mérito haber ganado a esos dos equipos en su cancha. Me hace ir sin presión fijándome solo en lo que tengo enfrente.

– ¿Cuál es la clave para este gran inicio?

– Somos muy transparentes entre nosotras. Es decir, trabajamos de forma clara y concisa. Hablamos mucho entre todas y creo que eso ayuda a mejorar la calidad de los entrenamientos y de los partidos. Creo que todo eso hace que lleguemos más seguras a los partidos y ahí están los resultados.Todo esto nos debe ayudar para cuando las cosas no vayan tan bien, que sepamos que el trabajo de unas y otras tiene resultado.

– ¿Ayuda el equilibrio que existe entre las jugadoras que conocen la liga y las que, como usted, debutan este año?

– Sinceramente creo que sí. Ese equilibrio es perfecto para que podamos hacer una buena temporada.

Retos

«Debemos tener el objetivo de ganar todas las semanas, y paso a paso, eso nos llevará a las cotas más altas, así lo creo»

– ¿Este inicio hace que el objetivo para este año sea más ambicioso?

– Debemos tener el objetivo de ganar todas las semanas. Y eso nos llevará a las cotas más altas, así lo creo. Queremos asegurarnos que en cada partido jugamos nuestro mejor baloncesto, el IDK está en esta liga y lo ha demostrado otros años para competir y ganar partidos.Claro que podemos llegar a estar entre los ocho primeros y meternos en Copa, o ser equipo de playoff al final de la liga. Queremos llegar a lo más alto.

– ¿Es tan difícil la liga como le habían dicho o se había imaginado?

– Sí, por supuesto. Muchas de las jugadoras a las que nos hemos enfrentado, ya les conocía de la selección. Cuando he jugado con Canadá varias compatriotas mías como Kayla Alexander, Sammy Hill me hablaron de la Liga. También he jugado contra España ó he visto que jugadoras de gran nivel en la universidad están en equipos de esta liga. Antes de venir, sabía el nivel que había en esta competición y es realmente alto. Estoy muy agradecida de poder estar en el IDK.

– Precisamente le iba a preguntar por sus convocatorias con Canadá. ¿Le han ayudado a esa transición del baloncesto de universidad al europeo?

– No creo que hubiera estado preparada para jugar aquí este año si no hubiera sido capaz de competir a buen nivel con Canadá. Creo que el enfoque, el esfuerzo, la ética de trabajo que mis compañeras y rivales ofrecieron, me han dado un ejemplo de lo que es jugar profesionalmente después de cinco años en la universidad de Gonzaga.

– Continúe.

– En ese instante en el que juegas con Canadá, contra otros países y estás rodeada de compañeros que han jugado al más alto nivel, me di cuenta de que me quiero dedicar al baloncesto de manera profesional. Tengo varios hermanos que así lo hacen y también lo quiero para mí.

Inicio

«Hemos empezado muy bien, es maravilloso. Estamos muy alineadas como equipo, está siendo un buen arranque»

– ¿Cómo fue esa llamada de su agente proponiéndole venir al IDK Euskotren?

– Una de mis compañeras de equipo de Canadá (Niyah Becker), jugó aquí el año pasado, así que, obviamente, hablé un poco con ella. Tuve otras compañeras como Samy Hill (Araski) o Emily Potter (Estrella Roja) que también jugaron contra el IDK, así que eso fue muy interesante. Me puse a hacer muchas preguntas para intentar enterarme de todo lo posible. Obviamente, mi agente me dijo que estaba en España, está en un lugar muy bonito, la ciudad es hermosa, la cultura es súper buena, así que no podía tener un destino mejor.

– ¿Lo rubrica después de unos meses?

– Sí, sí, por supuesto.Es una ciudad muy cómoda y preciosa.El hecho de poder ir andando a casi todos los sitios está genial para mí. Ten en cuenta que en Calgary, donde vivo, había más de millón y medio de personas y es más grande…Estoy muy a gusto en Donostia.

– Y venir a esta liga le acerca a uno de sus hermanos…

– Eso es. Melvin ha estado varios años en Unicaja de Málaga y este año ha fichado por Lleida.

– Perdone, ¿sabe que hay un donostiarra compañero de su hermano Melvin?

– Sí, sí. Mikel Sanz, ¿no? me habían dicho mis compañeras y lo hablé con mi hermano, sí.

– Siga.

– Pensé que quizás podría jugar en el mismo país que mi hermano, lo que sería increíble porque él ha estado jugando profesionalmente mucho tiempo en distintos sitios, así que no he podido estar cerca de él mientras jugaba. Entonces, cuando me hablaron del interés del IDK dije a mi agente que quería mantenerlo en la lista para estar cerca de mi hermano. Pensé que sería una decisión muy buena, y se ha demostrado que así ha sido.

– ¿Se han cumplido las expectativas que tenía sobre la ciudad y el equipo?

– Sí, estoy muy cómoda aquí. He tenido tiempo para adaptarme a cualquier situación nueva, pero aquí he encontrado mi lugar en la ciudad, así que estoy muy feliz de estar aquí. En lo que respecta al equipo creo que todo ha sido bueno, conocer a todo el mundo, conectarme con gente diferente, a mis compañeras, a los entrenadores… creo que eso ha sido realmente muy fructífero. No sé cómo decirlo, pero ha sido realmente una buena transición, desde el comienzo de la temporada hasta ahora.

Tiradora

«Todas las jugadoras amenazan desde la línea de tres. Hay que ser conscientes de que el juego ha cambiado»

– Su hermano Melvin es medalla de plata en unos Juegos con Canadá.

– Eso es. Toda la familia estuvimos muy orgullosas de lo que consiguió.

– Es que jugó con el MVP de la NBA, Shai Gilgeous-Alexander...

– (Ríe) Cierto. Y con otros muchos jugadores de Canadá que están en la NBA. Mira, en las últimas finales entre Oklahoma e Indiana, Shai estaba en un equipo y Andrew Nemhart en el otro. Fue divertido, tuvimos a dos canadienses en cada equipo de NBA para las finales, pero además Nemhart fue a Gonzaga, a la misma universidad que fui yo y su hermano pequeño, Ryan, acabó graduándose en mí mismo año.

– Llega usted de una universidad prestigiosa, ¿dónde está?

– En el estado de Washington, en el noroeste, a cinco horas de Seattle.

– ¿Zona lluviosa?

– Menos que en Oregón que está justo debajo. Ya me han dicho que aquí llueve mucho… (Ríe)

– Para una mujer nacida en Calgary, Canadá, ¿este tiempo será veraniego?

– Este es un gran clima. Todo el mundo está en vestido de invierno y yo estoy en camiseta y pantalones ahora mismo. Me encanta esto.

– ¿Qué nos dice de Calgary?

– Es un lugar hermoso para ir, no importa la estación, puedes ir en cualquier mes del año. En verano está la ‘gran estampida’ que es el rodeo más grande que se celebra en todo el mundo, dura diez días. O también ir al parque nacional de Banff, que tiene unas vistas espectaculares. Si alguien de San Sebastián quiere ir, se lo puedo recomendar (ríe).

– Hemos hablado de Melvin pero usted tiene diez hermanos más.

– Sí, somos doce en total. Todos nos apellidamos Ejim pero tengo hermanos de distinta madre a la mía.

– ¿Cuántos son profesionales del baloncesto?

– Seis de ellos son profesionales.En Finlandia, Melvin aquí en Lleida, otro en Canadá, Uruguay… los tengo repartidos por todo el mundo.

– Con tantos hermanos, ¿estar en un equipo será mucho más sencillo, no?

– Puede ser. Es que lo que me he encontrado aquí en Donostia es como una familia. ¡Tan numerosa como la mía!

– ¿Sabe la edad de todos sus hermanos?

– Uff, de casi todos, lo tendría que mirar en el móvil.y con los cumpleaños pasa lo mismo, en casi todos los meses tenemos un cumpleaños en la familia. Y además ahora hay sobrinos, así que se va complicando el tema. Mis cuatro hermanos mayores están repartidos por todo el mundo, los tres siguientes viven en Calgary y los cuatro más pequeños viven en Australia.

«Mi madre se levanta a las cuatro para ver mis partidos»


– ¿Tienen planeado sus padres venir a verle?

– Es complicado que vengan. La logística para venir con tanto hermano (sonríe) es difícil.Además como Melvin está en Lleida, tengo a alguien muy cerca.Y se agradece.

– ¿Habla mucho con su casa?

– Sí, todo lo que puedo y por ello no me siento muy separada de ellos.Por el cambio horario suele ser por la tarde noche de aquí.Ayer estuve chateando con mi madre. Es muy fan y no se pierde ningún partido.Es decir, se levanta a las cuatro de la mañana para ver nuestros partidos.

– Ha jugado 6 partidos. ¿Está contenta con sus estadísticas?

– He de decir que sí. No vine con una expectativa creada, más bien una hoja en blanco que quiero ir escribiendo. Lo que tengo claro es que mi objetivo es mejorar para ayudar al equipo.

– ¿Y lo que más le ha costado en cuanto a juego?

– Sobre todo las reglas defensivas, son distintas a las que empleábamos en Gonzaga. Aquí se juega más fluido, hay más libertad. Me encuentro bien y me gusta este tipo de juego.

– Ahora todo el mundo tira de tres puntos y sus aciertos le han hecho ganar partidos.

– Sí, todas las jugadoras amenazan desde la línea de tres. Incluso yo puedo tirar.Hay que ser conscientes de que el juego ha cambiado.