En la carrera de Lady Gaga hay un antes y un después en febrero de 2018, cuando la cantante decidió suspender su gira mundial de la noche a la mañana a pesar del éxito del álbum Joanne. «Ese era el ángulo en cada habitación de cada sitio al que iba. Yo era un producto, un objeto, un negocio. Una vez me convertí en un gran negocio para la gente, su prioridad no fue asegurarse de que tuviera una experiencia artística digna. Su prioridad era asegurarse de que podía ganar dinero lo más rápido posible. Hubo un momento de mi vida en el que dejó de haber instrumentos en los sitios a los que iba. Lo importante era controlarme a mí en tanto que negocio rentable«, cuenta Lady Gaga en una entrevista para Rolling Stone, en la que añade que el momento más duro de su carrera coincidió con el rodaje de la película Ha nacido una estrella.
Clay Enos
«Hice Ha nacido una estrella bajo los efectos del litio», dice, refiriéndose al fármaco que se utiliza para tratar la depresión y el trastorno bipolar. A su vez, los dolores crónicos causados por su fibromialgia contribuyeron a un deterioro hasta el punto de que padeciese una crisis emocional en toda regla: “Un día mi hermana me dijo: ‘Ya no veo a mi hermana’, y cancelé la gira. Hubo un día en el que fui al hospital para recibir tratamiento psiquiátrico. Necesitaba un descanso. No era capaz de hacer nada… me derrumbé por completo. Fue realmente aterrador. Hubo un momento en que pensé que no podría mejorar. Me siento muy afortunada de estar viva. Sé que puede sonar dramático, pero ya sabemos cómo puede acabar eso”.