A finales de los años 90 y principios de los 2000, se produjo un verdadero auge de las series juveniles de instituto, tanto a nivel internacional, con producciones como Sensación de vivir o Melrose Place, como a nivel nacional, con series como Al salir de clase o Compañeros. Esta última, precisamente, trataba de acercarse a la realidad que se vivía en los institutos del país y llegó a contar con nueve temporadas y 121 episodios que se emitieron entre 1998 y 2002.
Llegó, así, a congregar a millones de espectadores frente a la televisión, especialmente su sexta temporada, que llegó hasta los cinco millones de espectadores y una cuota de pantalla del 30%. En ella, se marcaba especialmente el contraste entre profesores y alumnos y muchos aún recuerdan a personajes icónicos como Quimi, Valle, Luismi o Sara. Además de todos ellos, también destacó Cesar Vea, que junto a actores como Beatriz Carvajal o Miguel Rellán, se ponía en la piel de uno de los profesores del centro educativo.
El actor, que interpretaba a Gusto Gil, nació en Logroño y antes de llegar a esta serie había llegado a participar con papeles pequeños en películas como Torrente o Muertos de risa. Su personaje en Compañeros, que llegó a aparecer en 108 episodios, era el profesor de los más pequeños y trataba de hacer que sus alumnos siempre se lo pasaran bien. Además, siempre trataba de tener algo con Virginia, la profesora de Educación Física que estaba interpretada por Estrella Zapatero.
Tras su paso por Compañeros, Vea llegó a participar en series como Hospital Central, Los simuladores o Doctor Mateo. Asimismo, llegó a formar parte del elenco de Acacias 38, donde dio vida a Cesáreo Villar entre 2018 y 2020, llegando a estar en más de 500 episodios.
Del éxito a la ruina económica
Sin embargo, su vida dio un vuelco cuando invirtió cerca de un millón de euros en un proyecto fotovoltaico de La Rioja promovido en 2008 por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Se trataba, en concreto, de un huerto solar y durante tres años la instalación dio beneficios gracias a las primas estatales. Pese a ello, toda esa inversión se volvió en una pesadilla después de que el Estado suprimiera las primas prometidas, lo que llevó a Vea y a su familia a una situación de ruina económica, con grandes deudas e hipotecas que eran imposibles de asumir.
«Por una simple publicación en el BOE nos expulsaron del sistema de primas», explicó el actor en una entrevista para el diario ABC. Decidido a hacer justicia con lo ocurrido, emprendió una lucha que comenzó en 2024 y que se intensificó en 2025 con huelgas de hambre frente al Parlamento de La Rioja, así como con acampadas y protestas en Madrid y en Bruselas.
Así, él no fue el único damnificado, ya que como el actor ha asegurado en varias ocasiones hubo hasta 62.000 familias afectadas que invirtieron sus ahorros en energías renovables. «En 2007 el Gobierno alienta a invertir en renovables para ser un país modélico en 2020. Sin embargo, el Gobierno aplicaba después un decreto que, con un recorte del 20%, puso la situación muy complicada. Y por si fuera poco, después le sumaba un recorte mayor, el 30%, que supuso el descalabro total. Nos han humillado y engañado, y aquí no pasa nada. Se quitan las ganas de emprender», explicaba Vea en una entrevista.
Además, para denunciar públicamente la situación que habían vivido, llegó a dirigir el cortometraje El camino del Sol, donde se aborda la estafa vivida por miles de familias. «El PSOE ha arruinado a mi familia», llegó a decir en otra ocasión: «No voy a quedarme callado, estoy luchando por miles de familias». Así, este mes de febrero de 2025 inició su tercera huelga de hambre y parece que consiguió avances. «El PP ha dado el OK a firmar la documentación que permita abrir una comisión de investigación que esclarezca lo que ocurrió», afirmó hace meses.