Bajo el lema «Frente al Cáncer, Ciencia y Cuidado”, la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) acaba de celebrar su congreso anual en Madrid. En ese marco se ha celebrado la sesión ‘Lo que nos queda por descubrir en inmunoterapia’, moderada por Ernest Nadal (director de investigación, ICO-L’Hospitalet, Barcelona) y Luis de la Cruz (Complejo Hospitalario Regional Virgen Macarena, Sevilla). En ella han intervenido Marco Donia (Hospital Herlev, Copenhague, Dinamarca), para hablar sobre la posible aplicación de terapias celulares en tumores sólidos y Milana Bergamino (Hospital Clínic, Barcelona) para abordar la terapia celular sin células: anticuerpos biespecíficos e IMTACS.

Nadal ha explicado la creciente importancia de esas ‘terapias celulares sin células’, partiendo de los anticuerpos desarrollados para la identificación de múltiples antígenos. 

En cáncer de pulmón microcítico, un tumor característicamente “frío” con una respuesta limitada a la inmunoterapia, el empleo de este tipo de terapias ha dado muestras de una elevada eficacia. “Es muy interesante el cambio que se puede producir mediante la activación de células T con este tipo de tratamiento, incluyendo resultados en mantenimiento y a largo plazo, aunque aún están limitados a pequeños grupos de pacientes”, ha reflexionado el especialista.

En este grupo de terapias avanzadas se ha hablado también de anticuerpos biespecíficos con capacidad de reconocer tres dominios. Es el caso de izalontamab brengitecan, cuyos resultados fueron uno de los que más llamaron la atención en el reciente congreso de la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO).

Dentro de los múltiples avances en esta nueva generación de terapias oncológicas, Nadal valora como muy interesante la posibilidad de conseguir respuestas en tumores fríos.

TIL, la nueva generación de terapias celulares

Por otra parte, a raíz del trabajo de Marco Doria, los participantes han tenido la oportunidad de conocer los últimos avances en el campo de la selección de linfocitos T con mayor capacidad para identificar y neutralizar células tumorales (de ahí le viene el nombre ‘TIL’, ‘linfocitos infiltrantes de tumor’ en inglés). Es una terapia que ya ha ofrecido algunos resultados en melanoma refractario, ha apuntado el moderador de la sesión.

El equipo de Doria está trabajando en este campo con varias series de casos de un solo brazo, pero también se han puesto en marcha ensayos comparativos (con ipilimumab). Se están llevando a cabo estudios para explorar las posibilidades de esta estrategia en cáncer colorrectal y de mama, entre otros. A pesar de su potencial, en el debate, como apuntaba Ernest Nadal, se habló también del reto que supone escalar la terapia con TIL. 

CAR-T en tumores sólidos

Una línea de investigación que ha creado mucha expectación en los últimos años pero parece atravesar un momento de cierta estabilización es la aplicación de CAR-T en tumores sólidos.

El microentorno de los tumores y la difícil identificación de antígenos siguen siendo retos clave, “pero se han ido produciendo avances, por ejemplo en cáncer gástrico, recientemente publicados en The Lancet”, ha matizado según los apuntes que ofreció Milana Bergamino durante el encuentro.

Lamentablemente, las respuestas obtenidas aún son transitorias, puntualizaba.En el congreso se han dado cita 306 ponentes en 60 mesas científicas, con más de 1.800 asistentes. Se han abordado los avances en los diferentes tumores; la genómica como guía para la Oncología de Precisión y la interpretación de la NGS, la influencia del sobrepeso y la obesidad en los pacientes con cáncer, el conocimiento del exposoma, la aplicación de la inteligencia artificial en Oncología y sus aspectos bioéticos, la nanomedicina en el tratamiento del cáncer, la influencia de los determinantes socieconómicos como indicador epidemiológico y los nuevos retos para organizar la asistencia de los largos supervivientes. A estos temas se sumaron sesiones específicas de cáncer hereditario, trombosis, inmunoterapia, prevención, fases I, cuidados continuos, bioética, oncogeriatría que confluían con mesas de debate dirigidas a residentes con opciones sobre salidas laborales, conciliación y autocuidado y resiliencia.