El 20 de noviembre se cumple medio siglo de la muerte de Franco, una fecha cuya efeméride va a aprovechar Movistar Plus+ para estrenar ‘Anatomía de un instante‘. Alberto Rodríguez dirige la adaptación a la pequeña pantalla de la novela homónima … de Javier Cercas que disecciona uno de los momentos cruciales de la historia reciente española: el intento de golpe de Estado del 23F.
Álvaro Morte, quien en la miniserie interpreta a Adolfo Suárez, fue el encargado de presentarla en ‘El Hormiguero’ este martes 18 de noviembre, «en representación de un elenco increíble» encabezado también por Eduard Fernández (Santiago Carrillo), Manolo Solo (Gutiérrez Mellado) y David Lorente (Antonio Tejero).
«Cuenta desde diferentes puntos de vista todo lo que sucede en España en esa época tan convulsa y tan tremenda que fue la Transición, hasta que Tejero entra en el Congreso y hace aquel intento de golpe de Estado», arrancó explicando el invitado. Además, se trata de una época poco estudiada, según su experiencia. «Yo no la di en el colegio, ni he llegado a conocer a nadie. Entonces, me gustaría pensar que cuando la gente la vea le va a pasar como a mí… Yo he descubierto muchísimas cosas de aquel periodo, de aquellos personajes que hicieron aquella cosa tan tremenda de pasar al franquismo a la democracia. Y a mí me ha parecido muy interesante».
El Suárez más desconocido
Motos la recomendó tanto a los que vivieron el 23F, pero especialmente a la gente más joven, «porque es muy entretenida, vais a pasar miedo, tensión…» Pero además, hizo hincapié en que todo sucedió de verdad. «Y esto es importante también, sobre todo para la gente que a lo mejor tiene una idea de lo que fue la dictadura».
El intérprete gaditano recordó también cómo se sintió al recibir la propuesta de dar vida a Adolfo Suárez. En ese momento trabajaba en Londres y lo llamó su representante por petición de las directoras de casting, Eva Leira y Yolanda Serrano. «Me pareció que habían perdido la cabeza», admitió. Finalmente se acabaron trasladando a la capital inglesa para hacerle la prueba en persona. «Ellas me convencieron, porque tienen esa capacidad maravillosa de ver mucho más allá de lo que tú puedas ver sobre ti mismo. Les estoy tremendamente agradecido por ponerle sobre la mesa este proyecto, que desde luego me lo he tomado con muchísima responsabilidad, respeto y con un vértigo tremendo».
Aparte de la caracterización física, Morte relató que su intención al meterse en la piel del presidente no era imitar. «Estos personajes los tenemos en nuestras retinas, pero los conocemos delante de las cámaras. Suárez fue director de TVE, sabía controlar perfectamente el lenguaje cinematográfico. Sabía cómo encontrar su mejor perfil y demás. Era un Suárez impostado, el político que está transmitiendo un mensaje y un poco elevado en sus intervenciones», especificó.
El protagonista de ‘La casa de papel’ se ha esforzado por descubrir a la persona detrás del político, aseguró. «A mí lo que me interesaba es conocer quién era el tipo que consiguió hacer estas cosas tan tremendamente importantes. Cercas le define en el libro como ‘el vendedor de neveras’ porque decía que tenía la capacidad de venderte hielo en el Polo Norte. Pero a mí lo que me interesaba era depurar un poco todo eso para quedarme con lo humano».
El primer día de rodaje no solo pudo verse caracterizado por primera vez como Suárez, sino que también se estrenó visitando el Congreso, una experiencia que vivió como un viaje en el tiempo. «Entré en el Hemiciclo transformado en el de 1981, on esa responsabilidad, vestido y maquillado como Suárez… Sentarme en aquel escaño y ver esos tiros pegados en la pared y en el techo que afortunadamente nunca han reparado y espero que nunca reparen para que nunca se olvide esto, pues fue verdaderamente emocionante».
Los tres grandes traidores: Carrillo, Suárez y Gutiérrez Mellado
El presentador confesó que la serie le provocó sensación de tristeza al ver «aquellos políticos de verdad», enfrentados ideológicamente como Carrillo y Suárez, «y sin embargo lo importante era mejorar el país, ir hacia la libertad. Me llama la atención de que en aquel momento pudiese ser y que ahora da la sensación de que es imposible que se pongan de acuerdo en nada, exclusivamente porque uno es de un partido y otro de otro», reflexionó.
«Yo no soy politólogo, ni nadie con las suficientes herramientas para poder desmenuzar esto», apostilló el actor antes de dar su punto de vista con mucha cautela de sus palabras. «Es posible que estemos en esta cultura del y tú más. Lo que sí es verdad que los políticos de aquella época, que no digo ni mejores ni peores porque habría de todo y yo por ejemplo a la hora de interpretar a Suárez he descubierto claroscuros, tenían algo muy importante que resolver. A lo mejor por eso se dejaron de nimiedades».
Y, de hecho, recordó el invitado, Cercas habla de ellos como ‘los tres grandes traidores’, «pues gracias a la heroicidad de su traición nosotros hoy por hoy podemos disfrutar de una democracia». «Ellos mismos renunciaron a parte de sus ideologías. Gutiérrez Mellado, que era militar tenía a todos los militares en contra porque pensaban que les traicionó. Santiago Carrillo, el máximo exponente del comunismo en este país, también se puso su partido en contra. Y Adolfo Suárez venía de ser secretario general del movimiento, y también se puso a toda esta gente en contra debido a las decisiones que tuvieron que tomar para que nosotros hoy por hoy disfrutáramos de algo que tenemos tan asumido como lo que es la democracia».
Gracias a la serie ha descubierto hasta qué punto fue titánico el proceso. Reconoció que igual no fue la transición perfecta, «pero también he entendido que era la transición que se podía hacer. Es muy fácil criticar desde la distancia. Y también he aprendido hasta qué punto es frágil la democracia».
Morte se refirió directamente a quienes piensan que se viven mejor en otros sistemas políticos. En concreto, sacó a relucir la encuesta reciente del CIS que revela que el 17% de los jóvenes cree que la democracia actual es peor que la dictadura franquista. «Me cuesta hasta decirlo… Sinceramente, eso a mí me hace pensar que a lo mejor no tienen toda la información necesaria. No lo digo de ninguna forma peyorativa, yo creo que se puede ser ignorante… Y ojo, yo soy el primer ignorante en muchísimas cosas. Pero creo que se puede ser ignorante por dos motivos: que tú no tengas acceso a una información, o que tú no quieras acceder a una información. Y hoy por hoy lo que sí que creo que es necesario es que encontremos o filtremos las fuentes de información».
Citando al propio Cercas, el actor señaló que «ahora cada uno tiene su verdad y cada uno te la vende como quiere para buscar su propio beneficio». «Yo a toda esta gente les animaría a que intentaran encontrar otras fuentes y piensen que si prefieren un sistema político en el que los partidos políticos están prohibidos, la mujer está por debajo del hombre y necesita un permiso marital para poder sacarse un carnet de conducir o estudiar una carrera, está perseguida la diversidad cultural, lingüística, religiosa, sexual, creo que se lo tienen que hacer mirar», sentenció.