Además de la Copa Davis, el tenis anda estos días pendiente del circuito Challenger. Esta semana, entre otros, se juega el NSW Open en Sidney, donde participa una de las grandes promesas del tenis australiano y mundial.
Se trata de Cruz Hewitt quien, a sus 16 años, está quemando etapas a pasos agigantados y ya es número 759 del mundo. Tras alcanzar los octavos de final la semana en Brisbane, el australiano volvió a superar una ronda tras derrotar el martes a su compatriota Omar Jasika por 3-6, 7-6, 6-4.
Sin embargo, este miércoles se despidió del cuadro individual tras caer ante el japonés Hayato Matsuoka por 5-7, 6-3, 7-5, aunque la noticia estuvo en el cuadro de dobles.
Allí compitió junto a su padre, que regresaba a las pistas tras nueve años retirado, y lo hizo a lo grande.
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A sus 44 años, el exnúmero 1 del mundo y excampeón del US Open en 2001 y Wimbledon en 2002, se unió a su hijo para vencer a los australianos Hayden Jones y Pavle Marinkov por 6-1 y 6-0 en un partido que apenas duró solo 46 minutos.
Lleyton Hewitt es el actual capitán de la Copa Davis de Australia. Cruz Hewitt es uno de los tres hijos que Hewitt tiene con su esposa, la ex actriz australiana Bec Hewitt, con quien se comprometió en el año 2004 y se casó en 2005.