La investigación de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil sobre el caso Cerdán ha colocado el puente del Centenario en el epicentro de una trama de presiones políticas y beneficios económicos canalizados hacia la empresa navarra Servinabar a través de … su relación con Acciona Construcción, adjudicataria de la sustitución de los tirantes del viaducto. Un documento interno de la UCO —incluido en el sumario y al que ha tenido acceso ABC— reconstruye cinco años de hitos clave, desde 2018 hasta 2023, que muestran cómo la mayor obra pública de Sevilla acabó envuelta en la red investigada por la que cobraron mordidas presuntamente varios miembros de la trama, entre ellos los dos anteriores secretarios de Organización del PSOE: José Luis Ábalos y Santos Cerdán.

2018

La emergencia y el premer acuerdo Acciona-Servinabar

El 6 de agosto de 2018, el Ministerio de Fomento declaró la emergencia para analizar el deterioro de los tirantes del puente. Apenas tres meses después, el 15 de noviembre, Santos Cerdán trasladó su interés por el proyecto, por el que insiste varias veces a Koldo García para que se acelere el trámite.

El 27 de noviembre, Acciona y Servinabar firmaron un Memorándum de Entendimiento que garantizaba a la firma navarra el 2% del importe del contrato si la obra recaía en la constructora. Para la Guardia Civil, ese documento es el origen de la relación económica entre ambas empresas.

Es decir, ambas empresas acordaron el ‘negocio’ diez meses antes de que se le adjudicara a Acciona las obras.

2019

Presiones, conversaciones e impulso político

La reconstrucción de la UCO señala un incremento de movimientos en la primavera de 2019. El 2 y 4 de abril, Santos Cerdán volvió a mostrar su interés, y el 9 de abril se produjo una conversación intervenida entre Koldo García y el entonces ministro José Luis Ábalos sobre la licitación. Santos había escrito por Whatsapp a Koldo llamándole a que «cerrase Sevilla». Éste respondió: «Lo sé, jefe; vamos ahora», y en una comunicación posterior con el exministro José Luis Ábalos, le traslada la urgencia: «El problema está en que Santos, tienes que hablar con él, está obsesionado con el puente de Sevilla. Según me da a entender, entiendo que él se está jugando la vida…»

El 24 de abril, Carreteras obtuvo autorización para actuaciones previas también por vía de emergencia.

El 2 de julio, Acciona recibió la adjudicación del enlace del Puerto de Sevilla con la SE-40, considerado un paso previo para el proyecto principal. En septiembre, comenzaron las obras, mientras la UCO detectaba una actividad «intensa e inusual» del entorno político para acelerar los expedientes vinculados al Centenario.

2020

Contratos sin firmar y reapertura acelerada

El 8 de abril de 2020, Acciona redactó tres contratos sin firmar que permitían subcontratar a Servinabar trabajos en el Puerto. Uno de ellos se firmó finalmente el 5 de agosto.

El 2 de septiembre, Javier Herrero —por entonces jefe de Carreteras— comunicó a Koldo la reapertura del procedimiento del puente. Tan solo 26 días después, el 28 de septiembre, se publicó la licitación por vía de urgencia, un plazo acelerado que la UCO vincula a las presiones detectadas en los meses anteriores.

2021

Adjudicación por 71 millones y colocación del cuñado

El 29 de enero de 2021, Herrero informó a Koldo mediante un mensaje: «Centenario, Acciona la más barata, no temeraria». El 17 de mayo, la citada empresa obtuvo la adjudicación por 71,4 millones de euros, la obra más compleja de la red viaria sevillana. Ese mismo año se redactó un nuevo contrato sin firmar -fechado el 7 de junio- para permitir la aportación de Servinabar.

Entre los documentos intervenidos, la Guardia Civil encontró un registro que acredita que Antonio Muñoz Cano, cuñado de Santos Cerdán, trabajó en la obra entre febrero y septiembre de 2021. Fue el único trabajador, según la UCO, que estuvo presencialmente en la obra. Aunque, según ha podido saber ABC, apenas se le vio por allí.

La UCO recoge dos nuevos contratos sin firmar: uno del 11 de noviembre de 2021 y otro del 8 de julio de 2022, ambos con el patrón de permitir a Servinabar participar como subcontrata bajo conceptos genéricos como «ayudas varios obra».

2023

El contrato de la obra se eleva a los 85 millones

El 20 de junio de 2023, Carreteras aprobó una modificación del contrato que aumentó el coste hasta los 84,98 millones de euros, siendo el anterior de 71,4, razón por la cual se consideró que la de Acciona era la oferta más económica.

Según la UCO, aplicando el porcentaje pactado en 2018, Servinabar habría podido obtener 1,8 millones de euros por su participación en el proyecto, una cifra incompatible con su estructura y capacidad real… y con sólo un trabajador ‘peón especialista’ sobre el terreno.