Kirgyos y Sabalenka, protagonistas de este nuevo capítulo de una vieja historia. (AFP)
Es un asunto que viene desde lejos, enfrentar a una mujer y un hombre en una modalidad deportiva. El tenis llevaba años intentando buscar el momento más propicio para un encuentro entre dos jugadores de sexos distintos.
No hay nada científico en realidad, se presenta más como una exhibición de estilo circense, la persona con tres piernas o la mujer barbuda. El caso es que el próximo 28 de diciembre en Dubai tendrá lugar, de nuevo, una nueva ‘Battle of the sexes’, esta vez entre Nick Kyrgios y Aryna Sabalenka.
Billie Jean King
No será la primera vez que un hombre y una mujer se enfrenten en un partido de tenis. Las dos primeras, en 1973, cuando el protagonista masculino fue Bobby Riggs, un cincuentón ganador muchos años antes de Wimbledon entre otras competiciones, y que en busca de recuperar popularidad –después de haberse retirado– optó por las fanfarronadas. Al otro lado de la red estuvo en primer lugar Margaret Court y luego Billie Jean King. Es decir, dos de las mejores tenistas de la época y, según varios analistas, entre las mejores de todos los tiempos.
Aquel primer ‘Battle of the sexes’ se lo aseguró Riggs en dos sets contra Court. Por contra el segundo partido fue claramente para Billie Jean King. Una hazaña transformada hasta en película con el mismo nombre, ‘Battle of the sexes’, en 2017, con Emma Stone y Steve Carell de protagonistas.
En general Billie Jean King ha sido alguien fundamental en la historia del tenis femenino en materia de reivindicaciones e intentos de fomentar la igualdad, sobre todo a nivel de premios.
Igual de importantes han sido más recientemente las dos hermanas Williams, ellas también protagonistas de unas ‘Battle of the sexes’. En este caso acabaron derrotadas por el alemán Carsten Braasch, un friki absoluto que jugaba con gafas para la vista, sacaba de manera muy torpe y se hizo famoso en el circuito porque a veces fumaba cuando se cambiaba de campo.
Serena Williams había afirmado, quizás ingenuamente (tenía por aquel entonces, en 1998, 18 años) que «podía ser capaz de derrotar el número 200 del tenis masculino». El reto lo recogió herr Braasch, que dio una paliza tanto a la hermana menor como a Venus, la mayor de los Williams, dando así la razón a los que pensaban, de manera machista, que los hombres tenían que ganar más dinero porque, simplemente, siempre ganarían a las mujeres, incluyendo a las mejores.
Kyrgios – Sabalenka
Ahora, en diciembre, les tocará a Nick Kyrgios y Aryna Sabalenka. Es decir, uno de los máximos representantes del ‘talento desperdiciado’, además de castigado por una plaga lesiones en el pasado reciente, y la actual mejor jugadora del planeta.
Tan extremo como el reto de Braasch a las dos Williams, o incluso más, porque el australiano Kyrgios no se ha retirado pero no disputa un partido desde el pasado marzo, cuando fue derrotado en la segunda ronda del torneo de Miami.
En los últimos meses, por otro lado, el australiano ha intentado recobrar popularidad a través de declaraciones polémicas, un poco contra el mundo entero. Antes de ello, además de los altibajos en el tenis (incluida final en Wimbledon en 2022, por ejemplo, perdida contra Djokovic), figuran insultos machistas durante unos partidos y acusaciones de violencia doméstica.
Su rival en Dubai será Aryna Sabalenka, número uno indiscutible del ranking femenino WTA. La bielorrusa ha ganado en 2025 el US Open y ha llegado a la final tanto en Roland Garros como en Wimbledon. Nunca ha dicho que pudiera ganarle al número 200 del mundo, como ocurrió con Serena Williams. Además Sabalenka tiene ya suficiente experiencia para no incurrir en ingenuidades, a sus 27 años.
Acabe como acabe este nuevo ‘Battle of the sexes’ el tenis es un deporte que tiene instrumentos para medirse a distancia. No es como el boxeo, donde los pesos tienen que ser iguales o muy parecidos, y la fuerza física adquiere mucha importancia; sobre todo es un deporte en este caso individual. Es un deporte en que las fuerzas tienden más a igualarse.
Al mismo tiempo, es un deporte que se ha descubierto como muy popular y con seguimiento de masas. En este último periodo se están multiplicando los eventos especiales, las exhibiciones con premios enormes, pero sobre todo entre los hombres, agravando de esta manera la diferencia con las mujeres. Y el próximo ‘Battle of the sexes’ parece entrar más en esta categoría, con un supuesto objetivo científico en que la que más tiene que perder será sin duda Sabalenka.