El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha firmado una orden ejecutiva para retirar los aranceles a algunas importaciones agrícolas de Brasil con fecha a partir del 13 de noviembre, tal y como ha comunicado la Casa Blanca. Esto se debe a un progreso en las negociaciones con el Gobierno de Brasil, encabezado por Lula da Silva, y tal y como indica el presidente estadounidense, cree que estos cambios son «necesarios y apropiados para hacer frente a la emergencia nacional».
Las exenciones están recogidas en dos listados que incluyen desde carne y otros productos bovinos a especias, frutas y granos como el café, el cacao y sus derivados y muchos otros bienes de origen agrícola. También se incluyen combustibles fósiles, productos derivados o sustancias químicas relacionadas con el carbón y su procesamiento, gases licuados, productos químicos, pulpas de madera y diversos componentes para aviación civil.
Trump y Lula, que prometió defender la soberanía de su país, comenzaron a negociar después de haberse cruzado por casualidad el pasado mes de septiembre en Nueva York, en los pasillos de la Asamblea General de la ONU, cuando según los líderes surgió «química» entre ambos. Poco después, los mandatarios tuvieron una llamada telefónica y se reunieron cara a cara el pasado 26 de octubre en Kuala Lumpur, Malasia, en una cita calificada como positiva por ambas partes.
Desde entonces, equipos de ambos Gobiernos han discutido la posible revisión de los aranceles impuestos a Brasil, un país que durante los últimos 15 años, según datos oficiales, ha tenido una relación comercial deficitaria con el país norteamericano. De hecho, la semana pasada, el Gobierno brasileño calificó de «positivo» el plan de Trump de retirar ciertos aranceles a productos agrícolas brasileños, pero indicó que confía en seguir negociando nuevas rebajas.
Quejas de Trump con respecto al trato del Gobierno brasileño a Bolsonaro
El pasado 10 de octubre, el presidente brasileño pidió a Trump revisar el gravamen del 40% a Brasil, que se añade al 10% general impuesto a todos los países por parte de Estados Unidos. Entonces también discutieron la revocación de visados a jueces de Brasil por el juicio al expresidente Jair Bolsonaro, aliado del líder estadounidense que fue condenado a 27 años de prisión por haber intentado un golpe de Estado tras la victoria electoral de Lula.
El pasado mes de julio, Trump decidió imponer aranceles del 50% a Brasil porque consideraba que el Gobierno de Lula da Silva estaba llevando a cabo «una caza de brujas» con respecto a Bolsonaro. Además, el magnate también criticó los «ataques insidiosos» del Ejecutivo brasileño a las elecciones libres y a los derechos fundamentales de libertad de expresión de los estadounidenses.