Hasta la 1 de la madrugada del jueves al viernes, España no conoció al rival al que se enfrentará en las semifinales de la Copa Davis este sábado (12:00, M+). La Armada, con nocturnidad, se enteró de que, si quiere estar en la final de la copa del mundo de tenis, tendrá que apear a Alemania, que abatió en una agónica eliminatoria a Argentina (2-1), resuelta en el tie-break del último set del último punto. Más emoción imposible en Bolonia, donde los ánimos de una sonora hinchada argentina resultaron en vano, porque Tim Puetz y Kevin Krawietz desarmaron a Horacio Zeballos y Andrés Molteni (4-6, 6-4 y 7-6 (10) en 2h31), que gozaron de tres bolas de partido, y de eliminatoria, en el desempate final. Los alemanes, que ganaron en su quinto match-ball, hicieron buena la victoria de Alexander Zverev, verdugo de Francisco Cerúndolo (6-4 y 7-6 (3) en 1h36) para arreglar el tropiezo de Jan-Lennard Struff frente a Tomás Martín Etcheverry (7-6 (3) y 7-6 (7) en 2h04).

Una jornada de tenis que comenzó en la Fiera di Bologna a las 10:00 de la mañana se prolongó más 15 horas, y eso que la suerte es que, de los seis partidos que se disputaron entre el España-Chequia y el Argentina-Alemania, tan solo uno, el último, se prolongó hasta los tres sets. Si alguno más lo hubiera hecho, estaríamos hablando de tenis seriamente de after hours. Cosas que todavía tiene que pulir el formato de la copa del mundo de tenis. “Increíble, no hay muchos partidos en una carrera así, significa mucho, mejor si lo ganas. Vaya atmósfera en Bolonia, en un país neutral, tremenda eliminatoria”, resumió Puetz, exhausto, tras vencer junto con Krawietz, con quien comparte el 11º puesto del ranking mundial de dobles, a dos especialistas como son Molteni y González.

Golpearon primero los argentinos, que se llevaron la primera manga y estuvieron a tan solo un set de avanzar a semifinales. Sin embargo, los alemanes, que no ganan una Copa Davis desde hace 32 años, tiraron de orgullo, igualaron el encuentro y forzaron el tie-break en el tercer set, en el cual se instauró la locura. Las primeras ventajas fueron para los germanos, que lo tuvieron todo de cara pero desaprovecharon tres bolas de eliminatoria seguidas. Eso les dio alas a los argentinos, que fueron quienes comenzaron a gozar de puntos de partido. En un intercambio constante de puntos con el saque, prevalecieron los europeos, que con una línea final resolvieron una eliminatoria frenética. La ventaja para España es que los alemanes, en semifinales de la Davis por segundo año consecutivo, se acostarán muy tarde este jueves, aunque tienen el viernes para descansar.

Por otro lado, la ventaja para los germanos es que cuentan con el que, por ranking, es el mejor tenista en Bolonia: Alexander Zverev, el único miembro del top-10 que se encuentra en el norte de Italia (es tercero del mundo), regresó a la selección alemana de forma triunfal, y es que solventó un cara a cara desfavorable en indoor ante el siempre peligroso Cerúndolo, al que batió para mantener a Alemania con vida en la eliminatoria. “Somos un gran equipo, sobre todo con Sascha, pero también lo son los españoles. Ahora lo disfrutaremos, y mañana pensaremos en España”, aseguró Krawietz tras su victoria. “Quizá ha sido increíble para vosotros, al final ha sido increíble, la atmósfera ha sido genial, tremendo lo de los argentinos gritando sin parar durante siete horas. Ha habido altos y bajos en el tie-break, es genial estar en la siguiente ronda, tenemos que celebrarlo un poco esta noche y concentrarnos en lo siguiente. Estamos felices por estar en las semifinales de nuevo, como el año pasado contra Holanda. No tenemos un gran balance contra España, será complicado, todas las eliminatorias están igualadas”, finalizó el capitán Michael Kohlmann.

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