Este miércoles Mediaset despidió a Alessandro Lecquio tras décadas como colaborador tras las declaraciones de Antonia Dell’Atte, su exmujer y madre de su primer hijo, acusándole de violencia machista, según adelantó El País. El conde Lecquio trabajaba en el programa de Telecinco Vamos a Ver presentado por la conocida periodista Ana Rosa Quintana.
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La entrevista de la exmodelo en El País fue el detonante para que el conglomerado televisivo decidiera prescindir del colaborador. Dell’Atte aseguró que Lecquio le llegó a pegar una «patada estando embarazada» después de volver de su luna de miel.
La modelo comentó, además, otros malos tratos y vejaciones que supuestamente habría sufrido del tertuliano. «Me decía que iba a destruir mi nariz para que no fuera guapa. Nos fuimos a vivir a Turín con su familia y yo no podía contactar con la mía ni con mis amigas. Me obligó a dejar de trabajar y estaba encerrada en casa. Se iba al trabajo, volvía y me decía: ‘Te controlo, hoy has ido con el niño y he visto que mirabas a otros hombres», añadió.
Eso pasó hace 34 años, un tiempo en el que el colaborador ha estado protegido por un silencio protector. Ahora, El País cuenta cómo se gestó el despido de la que había sido su cadena todo este tiempo. En un artículo escrito por Isabel Valdés, que el despido se dio con «la resistencia» que diversas fuentes citadas por el periódico apuntan que ha interpuesto Ana Rosa Quintana.
Indica el medio que desde el primer momento la empresa se mostró dispuesta a colaborar con Dell’Atte tras la entrevista para actuar tras su testimonio. Fuentes indican que Mediaset no tuvo dudas de su testimonio y que le pidió la documentación del caso para revisarla. Lo que ella entregó fue la primera denuncia que ella interpuso contra él, en marzo de 1991, «por malos tratos físicos y psíquicos».
Dell’Atte también ganó una demanda de Lecquio por calumnias cuando le llamó «maltratador» en público en varios programas. Unicorn, la productora de Ana Rosa Quintana, hacía caso omiso a esto, siendo ella una de las grandes protectoras de Lecquio. Tras su salida de la cadena, ni ella ni ningún tertuliano de su programa han hecho declaraciones al respecto.
Varias fuentes apuntan a que Quintana «se resistía» a su salida, pero era consciente de que llegaría en algún momento tras la entrevista. El pasado martes el abogado de Dell’Atte evió el documento que faltaba a Mediaset, que lo revisó y acordó el despido de Lecquio el miércoles por la tarde en una reunión «rapídisima» y «consensuada», apuntas varias fuentes. «Ya no había forma de que no se tomara la decisión de despedirlo», indican varias fuentes a El País, que coinciden en que con los documentos delante Mediaset no tenía otra opción.