La negociación que mantienen desde hace semanas el gobierno de José Luis Sanz y los sindicatos de la Policía Local a cuenta del pago de las horas extra atrasadas y la definición de la cobertura del Plan de Navidad vivirá mañana un nuevo hito … que puede ser clave en el desarrollo de este diálogo. Para este domingo 23 de noviembre está previsto que el Real Betis dispute como local un partido de Liga contra el Girona en el Estadio de la Cartuja, un evento en el que se requiere de un despliegue importante de los agentes para regular el acceso de los aficionados y controlar el volumen de tráfico en el entorno del recinto deportivo que, en estos momentos, no cuenta con el número de efectivos suficientes para poder llevarse a cabo.

En un comunicado interno publicado por el Sppme, sindicato mayoritario de la Policía Local en Sevilla, se advierte de que el Ayuntamiento hispalense no ha planificado los servicios extraordinarios que requiere la celebración de un partido de esta magnitud y que, por tanto, sólo estarán disponibles los agentes que habitualmente se movilizan para un fin de semana ordinario en la ciudad. Es decir, de las aproximadamente 15 patrullas que son necesarias para un encuentro de Liga del Betis o del Sevilla sólo habrá disponibles un tercio de las mismas, que deberán afrontar las necesidades del partido así como el resto de servicios que se reclamen en el conjunto de la capital hispalense. Por tanto, si acuden a la Cartuja dejarán desasistidas los demás operativos que se requieran ese día.

A todo ello se suma el hecho de que, además, se espera que mañana haya una afluencia masiva de aficionados al Estadio de la Cartuja, que tiene una capacidad para 70.000 espectadores. El horario de celebración del partido entre el Real Betis y el Girona, las 16.15 horas, se ha convertido en todo un aliciente para fomentar la presencia de la afición en las gradas del recinto deportivo. De hecho, desde el club verdiblanco se ha informado a través de sus canales oficiales que en estos momentos quedan muy pocas entradas disponibles, por lo que es más que probable que se registre la mayor cifra de espectadores en lo que va de temporada. Una situación a la que hay que añadir que un tramo de la SE-20, una de las principales vías de acceso para los vehículos hasta la Cartuja, se encuentra cortado a la circulación por los desperfectos ocasionados por las últimas lluvias.

Desde el Sppme se ha solicitado a los aficionados béticos que acudan «con tiempo» al partido para «poder acceder al estadio a la hora prevista». En este sentido, han culpado directamente al alcalde José Luis Sanz de que «no se disponga de efectivos para cubrir el evento», algo que es consecuencia de «sus actos, la falta de plantilla y la falta de capacidad presupuestaria para los servicios extraordinarios». Al hilo de este denuncia, el sindicato policial añade en su comunicado que «cabe la posibilidad de que, en un acto de desesperación política y nuevo acto dictatorial, quiera dejar sin efectivos al resto de la ciudad» y que «seguramente intente desviar la responsabilidad», pero que «la realidad es que el único responsable es él y su falta de capacidad para negociar, además de incumplir con lo prometido».