En la semana en que se ha conmemorado los 50 años de la muerte de Francisco Franco y los 50 años de la llegada al trono de Juan Carlos I, una serie de televisión nos recuerda las horas cruciales en la que España se jugó dar pasos atrás de nuevo en el camino de la democracia. Se trata de Anatomía de un instante, la nueva serie de Movistar Plus+, que dirige el cinesta sevillano Alberto Rodríguez basada en el libro de Javier Cercas sobre el 23F, que ya pasó por el Festival de San Sebastián y se ha podido ver también en el pasado Festival de Cine de Sevilla y en el Festival de Cine de Almería.

Rodríguez, autor de La isla mínima, El hombre de las mil caras o Modelo 77 de la mano de Rafael Cobos en el guión, vuelve a los terrenos donde se mueve con naturalidad: los pasillos del poder, las grietas de la conciencia, los gestos que definen a los hombres. La serie no pretende reconstruir el golpe de Estado, sino detenerse en un instante: aquel en que Adolfo Suárez permanece sentado, inmóvil, mientras las balas atraviesan el techo del Congreso. Ese gesto, mínimo y absoluto, se convierte en metáfora de un país que, en plena Transición, aún no sabía quién era.

La trama se centra en el instante que quedó fijado en la memoria colectiva: tras la entrada del teniente coronel Tejero en el hemiciclo del Congreso de los Diputados disparando al techo, todos los miembros de las cortes se tumbaron en el suelo excepto tres personas: el presidente del gobierno Adolfo Suárez, el vicepresidente general Gutiérrez Mellado y el líder del Partido Comunista, Santiago Carrillo. A partir de esa escena, la serie realiza un flashback para narrar cómo Adolfo Suárez llegó a la presidencia del gobierno, su relación con el rey Juan Carlos I y la complicidad que mantuvo con Gutiérrez Mellado. También se adentra en el regreso a España de Santiago Carrillo y las conversaciones que mantuvo con Suárez antes de la legalización del Partido Comunista.

El reparto de la serie cuenta con nombres de peso. Encabeza el elenco Álvaro Morte, quien da vida a Adolfo Suárez con una transformación física y emocional muy cuidada. A su lado, Eduard Fernández interpreta al histórico líder comunista Santiago Carrillo, y Manolo Solo encarna al entonces vice­presidente militar Manuel Gutiérrez Mellado. Completan este núcleo figuras como David Lorente en el papel del golpista Antonio Tejero, Miki Esparbé como el rey Juan Carlos I, Juanma Navas en el rol de Alfonso Armada, y Óscar de la Fuente encarnando al general Jaime Milans del Bosch. Este reparto coral, combinando figuras muy reconocibles de la ficción con personajes clave de la historia reciente española y la ambición de la producción, le ha valido una nominación a los Premios Forqué como mejor Serie de Ficción.

Con la precisión y el pulso narrativo que lo caracterizan, Rodríguez compone una obra de respiración lenta, de luz contenida, donde el silencio pesa tanto como la palabra. No hay épica ni artificio, sino una mirada limpia que busca entender qué nos hizo temblar y qué nos sostuvo en uno de los episodios más críticos de nuestra historia.