Parece mentira cómo ha cambiado el mercado de los televisores en un par de años. Si te ibas a comprar una tele “buena” hace poco, tenías que preparar más de mil euros y rezar para que una OLED entrara en tu presupuesto.
Ahora, esas pantallas orgánicas se han vuelto algo más accesibles, pero no son la única opción si buscas una calidad de imagen brutal sin arruinarte. Ahí es donde entra la tecnología MiniLED, que comparte con el OLED esa capacidad de mostrar negros profundos gracias a miles de pequeños diodos controlados por zonas, pero con una ventaja clave: el precio es mucho más amable con tu bolsillo.
Y para muestra, un botón: Amazon ha puesto a la venta la Xiaomi TV S Pro MiniLED de 55 pulgadas por solo 577 euros en la previa del Black Friday. Es su precio más bajo hasta la fecha y hablamos de una tele que juega en la liga de la gama media-alta sin despeinarse.
Xiaomi TV S Pro MiniLED 55

Este televisor con panel MiniLED y Google TV es de las mejores opciones si buscas un modelo de 55″, con bastante potencia y una calidad de imagen brutal.
Una TV todoterreno, y también para jugar
Lo que hace especial a esta Xiaomi S Pro no es solo que sea barata, sino lo que ofrece por ese dinero. Al ser un panel MiniLED, cuenta con cientos de zonas de atenuación local —en concreto 408 zonas independientes— que se apagan y encienden según lo que salga en la pantalla.
Esto se traduce en que, si ves una escena espacial o una película oscura, el negro se ve negro de verdad y no grisáceo, algo que las teles LED normales no consiguen ni de lejos.
Además, esta tecnología permite picos de brillo espectaculares, llegando hasta los 1.700 nits. ¿En qué se nota esto? Pues en que los reflejos del sol, las explosiones o las luces de neón en contenidos HDR te van a deslumbrar casi como si estuvieras allí, haciendo que la imagen tenga un “punch” increíble incluso si tienes el salón muy iluminado.
Para los jugones también tiene algunas características destacables. El panel es capaz de alcanzar una tasa de refresco de 144 Hz, lo que significa que si tienes un PC potente o una consola de nueva generación, los juegos se van a ver con una fluidez pasmosa, sin borrosidad en los giros rápidos de cámara.
Y no se queda ahí: tiene puertos HDMI 2.1 completos, compatibles con VRR y FreeSync, tecnologías que eliminan esos cortes molestos en la imagen cuando la acción se pone frenética. Es decir, te llevas un monitor gaming gigante de 55 pulgadas camuflado de tele de salón.
En cuanto a sistema operativo, Xiaomi apuesta sobre seguro con Google TV. Esto es una garantía de que vas a tener todas las apps que necesitas –Netflix, Prime Video, Disney+, HBO Max, Plex, etc.– funcionando a la perfección y con una interfaz limpia y fácil de usar.
Además, al llevar el ecosistema de Google, tienes Chromecast integrado para lanzar contenido desde el móvil en un segundo y asistente de voz para buscar películas o controlar la domótica de casa sin levantar el mando.
El sonido, aunque suele ser el punto flaco de las teles planas, aquí cumple con dos altavoces de 15W compatibles con Dolby Atmos, aunque con la calidad de imagen que tiene, seguramente te entren ganas de añadirle una barra de sonido para que el audio esté a la altura.