La primera «invasión» de las peligrosas carabelas portuguesasobligó a cerrar al baño durante unas horas este fin de semana siete playas del concejo de Llanes. Los arenales afectados fueron los de Toranda y Torimbia, en Niembru; Barru; Borizu, en Celoriu; Ballota, entre Andrín y Cue, y Poo (Po).

La presencia de estos animales marinos, que no son medusas, hizo que los servicios de salvamento y socorrismo izaran la bandera roja, pese al buen estado de la mar. La elevada temperatura del agua es, según las autoridades, la razón de que se registren estas «invasiones».

Dolor agudo y fuerte

Las picaduras de carabela portuguesa provocan un dolor agudo y fuerte. Pero aquellas personas con un historial de alergias o con problemas cardíacos deben tener especial cuidado. Estas falsas medusas son organismos formados por tres pólipos con numerosos tentáculos que le sirven para atrapar a sus presas y que pueden paralizar a un pez grande y afectar seriamente a la salud de los humanos.

Una carabela portuguesa en una playa

Una carabela portuguesa en una playa / Agencias

La carabela portuguesa no es originaria del Mediterráneo, pero la falta de sus depredadores naturales ha contribuido a su aparición en las costas asturianas.

Sustancia tóxica

Los tentáculos de la carabela portuguesa, igual que las de las medusas, expulsan una sustancia tóxica al entrar en contacto con ellos que provocan las siguientes molestias: 

  • Dolor agudo y fuerte. 
  • Lesiones en la zona de contacto como inflamación, enrojecimiento, ampollas o descamación. Este espécimen puede llegar a provocar una reacción cutánea en zonas que no han entrado en contacto con la carabela portuguesa. 
  • Además, y de forma excepcional, puede llegar producir “una afección generalizada, causando problemas respiratorios, cardiacos, neurológicos o gastrointestinales, tales como vómitos, fiebre, náuseas y ansiedad que generalmente pasan en unos días. En caso de especial sensibilidad a la toxina puede causar incluso la muerte”, advierten los expertos.

«No subestimar la situación»

El avistamiento de carabelas portuguesas y medusas en el litoral asturiano ha llevado al Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) a emitir una serie de recomendaciones. La primera es «no subestimar la situación».

«Si observan la presencia de medusas o sufren alguna reacción adversa o picadura deben avisar al servicio de salvamento de la playa o en su defecto llamar al 1-1-2. Mantengan siempre precaución a la hora del baño.», señala el SEPA, que aconseja evitar el contacto, no bañarse y, si se está en el agua, salir de forma calmada. También seguir siempre las indicaciones de los socorristas.

«Si observan la presencia de medusas o sufren alguna reacción adversa o picadura deben avisar al servicio de salvamento de la playa o en su defecto llamar al 1-1-2. Mantengan siempre precaución a la hora del baño», señala el SEPA, que hace las siguientes recomendaciones:

Recomendaciones a bañistas

  • No subestimes la situación. Ante una proliferación de medusas es mejor no meterse en el agua, ni siquiera en la orilla, ya que pueden existir fragmentos de tentáculos con la misma acción urticante. En caso de duda pregunta al servicio de vigilancia de la playa.
  • No toques las medusas muertas o fragmentos de ellas: su poder urticante persiste hasta 24 horas en condiciones de sequedad.
  • Si has visto medusas y no existe ningún aviso, informa al puesto más cercano de vigilancia o en su defecto llama al 1-1-2
  • La zona de rompiente es una zona peligrosa en caso de existir medusas, ya que muchos fragmentos con acción urticante pueden concentrarse allí.
  • Para minimizar el riesgo de picadura, puedes usar crema solar o protegerte con ropa ligera. 

Ante una picadura

  • No rasques o frotes la zona afectada, ni siquiera con una toalla o arena.
  • Lava la zona con agua marina, nunca con agua dulce
  • No apliques amoniaco, orines o vinagre.
  • Quita los restos o trozos con pinzas y si lo haces con la mano, que esté protegida.
  • Para aliviar el dolor aplica frío, durante 15 minutos, sin frotar. Si usas hielo evita el contacto directo con la piel.
  • Los niños, personas mayores o aquellas con alergias que resulten afectados, pueden necesitar atención especial.
  • Si se observan síntomas como náuseas, vómitos, mareos, calambres musculares, cefaleas o malestar generalizado, acude al hospital o centro de salud más próximo e informa, si es posible, del tipo de medusa que produjo la picadura.
  • Desinfecta la herida con alcohol yodado 2 o 3 veces al día durante 48-72 horas.
  • Se recomienda que aquellas personas que permanezcan un tiempo prolongado en el agua, utilicen prendas protectoras (gafas, trajes de neopreno, lycras, etcétera).

Se conocen casos en que se han producido reacciones graves pasados los días de la picadura (ulceraciones, celulitis, necrosis y gangrena).