El Chelsea de Enzo Maresca atropelló (3-0) en Stamford Bridge a un Barcelona que tiene mucho que mejorar si quiere codearse con los mejores equipos de Europa. Los de Hansi Flick naufragaron en todas las líneas y volvieron a confirmar la debilidad defensiva que les sigue lastrando en grandes noches europeas. Es imposible soñar con hacer algo grande en la máxima competición continental sin ajustar el sistema defensivo y regalando una media de dos o tres goles por encuentro.

A los tres minutos el balón ya había entrado en las mallas de Joan García, pero el gol se anuló por una mano de Fofana. El Chelsea, jugando a un ritmo endiablado, cortocircuitó al Barça, incapaz de jugar a esa velocidad. Y eso que Lamine Yamal parecía estar fino, con ganas de encarar. Pero un magistral Marc Cururella se acabó comiendo al atacante azulgrana. Entre Enzo Fernández, Estevao, Garnacho y Neto aplastaron al equipo culé.

El Barcelona tuvo en las botas de Ferran el primer gol, pero el atacante culé falló de forma incomprensible ante Robert Fernández. Fue tras casi el único error del Chelsea y ahí se le fue al equipo de Flick la oportunidad de cambiar una noche que acabó siendo de pesadilla. A los 27 minutos de juego llegó el primer gol del Chelsea, tras varios avisos del equipo londinense, en un córner en el que Cucurella sorprendió a la zaga de Barça y acabó metiendo un pase que se metieron en propia puerta entre Koundé y Ferrán.

El partido acabó para el Barcelona cuando Ronald Araujo, ya con una amarilla por una falta no pitada sobre Lamine Yamal, realizó una dura entrada a destiempo ante Cucurella. Segunda amarilla y el Barça con la obligación de afrontar toda la segunda parte con uno menos.

Hansi Flick trató de ajustar a su equipo, pero el Chelsea de Maresca no le dio opción. La segunda parte la gobernó el equipo inglés de principio a fin, con dos goles más que ratificaron su superioridad y todos los problemas del Barcelona. Estevao sacó la varita para notar un golazo de bandera tras recortar a Cubarsí y fusilar a Joao García.

La sentencia definitiva llegó en el 73, tras una buena triangulación que mandó al fondo de las mallas Liam Delap. Noche negra para el Barcelona en Londres ante un Chelsea que apunta a grandes cosas en esta Champions League.

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Luis Rubiales en Espejo Público