El Comité Antisida de Extremadura (CAEX) estima que entre 1.300 y 1.500 personas viven con VIH en la región, aunque alrededor del 18 % de los infectados desconocen su estado serológico, lo que dificulta la detección temprana y el control de la transmisión.

Los nuevos contagios se concentran mayoritariamente en la población joven, especialmente en el rango de 15 a 25 años, según los datos manejados por el comité. Por ello, la prevención y la detección temprana se consideran fundamentales para frenar la expansión del virus.

Estas cifras se han difundido en el marco del acto conmemorativo del Día Mundial del VIH-Sida, celebrado en el Ayuntamiento de Badajoz, que incluyó la colocación de un gran lazo rojo en el balcón del palacio municipal. El evento reunió a representantes de asociaciones y fundaciones vinculadas al VIH/Sida y a las autoridades locales.

El acto recordó que, a pesar de los avances médicos y científicos que permiten hoy vivir con VIH con calidad y esperanza, persisten barreras sociales y sanitarias, como el estigma, la discriminación y las desigualdades en el acceso a los servicios de salud.

Además, se destacó la importancia de la educación, la investigación y la cooperación comunitaria como estrategias esenciales para continuar la lucha contra la enfermedad, garantizar los derechos y la dignidad de las personas afectadas y avanzar hacia una mayor prevención y tratamiento efectivo.

El programa conmemorativo sirvió también para honrar la memoria de quienes han fallecido por la enfermedad y apoyar a quienes actualmente viven con VIH en Extremadura, reafirmando la necesidad de mantener la conciencia social y el compromiso colectivo frente a esta epidemia.