Ya sabemos el posible calendario de ciclocross para Mathieu van der Poel
Mathieu van der Poel vuelve al barro como quien regresa al lugar donde la historia se escribe con cada pedalada.
Su equipo ya ha adelantado un calendario que apunta a una temporada de esas que se recuerdan durante décadas: yhasta trece carreras entre Copas del Mundo, X2O Exact Cross, con un posible debut en Namur el 14 de diciembre.
Si no llega a tiempo, arrancará en Amberes unos días después.
El dónde casi es irrelevante: lo importante es que vuelve el dominador indiscutible del ciclocross.
Este invierno no es uno más.
Es el inicio de la campaña en la que Van der Poel puede convertirse, por fin y sin discusión, en el más grande de la historia del ciclocross.
Con su séptimo título mundial, alcanzó a Erik De Vlaeminck, pero ahora arranca el camino del octavo, el que lo dejaría solo en lo más alto.
Hulst, febrero, arcoíris en juego: todo apunta a una cita con el destino.
Lo que vimos en Liévin fue otra demostración de su autoridad.
Wout van Aert, con la parte alta del muslo izquierdo rasgada, persiguiendo en la penúltima vuelta; la imagen repetida, el celeste intentando conectar con Mathieu.
Un déjà vu constante.
Pero esta vez ni siquiera hubo tensión real.
Mala salida de Wout, esfuerzo enorme por remontar… y al final, la misma conclusión: Van der Poel impone su ley y lo hace sin margen a la duda.
Lo suyo no es solo ganar, es elevar el ciclocross a una dimensión nueva.
Ha convertido la disciplina en su laboratorio personal: cada curva más precisa que la anterior, cada tramo de barro leído como un libro abierto.
Ha añadido una potencia extraordinaria tras sus campañas en carretera, donde gana Roubaix, Flandes o lo que se le ponga delante, y al mismo tiempo conserva la chispa necesaria para esfuerzos cortos y explosivos.
Muchos dicen que no hace falta mirar estadísticas para saber que es el mejor. Y quizá tengan razón: basta con verlo correr.
Nys progresa, Van Aert resiste, los jóvenes aparecen, pero ninguno ha demostrado tener la llave de su hegemonía.
Ahora empieza la campaña decisiva.
La que puede convertirlo, por resultados y por dominio, en el ciclista más grande que haya pisado un circuito de ciclocross.
Y la sensación es clara: no hay nadie que pueda evitarlo.
Imagen: UCI Cyclocross
